SAMSI-ADAT I

rey asirio, quien gobernó del 1813 al 1780 a. C., estableció el primer imperio centralizado del Oriente, organizado en distritos con sus propios administradores escogidos por el rey, el cual logró expandir sus dominios hasta el Mediterráneo. Sin embargo, Isme-Dagan I, hijo y sucesor de Samsi-Adat, quien gobernó entre 1780 y 1760 a. C., fue vencido, ca. 1760 a. C., por Hammurabi, rey de Babilonia, y A. fue anexada al Imperio babilónico. Hammurabi formó el Imperio babilónico, tras la caí­da del Imperio de Sumer y Acad, pero duró poco, pues los casitas tomaron Babilonia en el siglo XVI a. C. Luego, los hurritas invadieron gran parte del norte de Mesopotamia, extendiéndose hasta Palestina. Es decir, A. estuvo por varios siglos asediada y dominada por sus vecinos. Hacia el 1500 a. C. cayó bajo el poder de Mitanni, hasta cuando el Imperio hitita derrotó a Mitanni y en 1595 a. C. destruyó a Babilonia. Hacia al 1200 a. C. cae el Imperio hitita, con las migraciones de los llamados †œpueblos del mar†, llegando A. a una época oscura y llena de conflictos, con la formación de ciudades-Estado al norte de Siria, cuyo componente étnico era siro-hitita, y los arameos que también comenzaron a mostrarse, pueblos a los cuales A. debió hacer frente.

A. habiendo aprendido los secretos de la metalurgia de los hititas, emergió entonces como una potencia bélica, y por primera vez en la historia se formó un ejército completamente férreo, dotado con máquinas de guerra, arietes para tomar ciudades muradas, que destruí­an los pueblos y llevaban a cabo deportaciones masivas de sus habitantes a fin de romperles su unidad polí­tica, cultural y religiosa, convirtiéndose A. en la potencia más cruel dueña de Oriente Próximo y en uno de los imperios más importantes y poderosos de la antigüedad. En estos tiempos del renacer de A., este imperio entra en contacto con los pueblos bí­blicos, concretamente con Salmanasar III, rey asirio del 858 a. C. al 824 a. C.

Este rey invadió Siria ca. 854 a. C., pero fue rechazado por una coalición de Siria e Israel, en Carcar. Cuando Jazael, rey de Siria, invadió el reino de Israel 2 R 10, 31-33, el rey Jehú de Israel pagó tributo a Salmanasar III para que lo auxiliara contra el soberano sirio. A este respecto, se refieren las figuras del Obelisco Negro, hallado en la Asiria antigua, y que se encuentra en el Museo Británico, y que muestran a Jehú, rey de Israel, postrado ante Salmanasar III.

De aquí­ en adelante se dan las grandes invasiones del Imperio asirio como lo predijo el profeta Isaí­as en uno de sus oráculos, 5, 26-30. ® Teglatfalasar III, o Tiglat-pileser III, o Pul, nombre éste que tomó cuando se hizo al poder en Babilonia, a quien Menajem, rey de Israel, le pagó tributo 2 R 15, 19, rey asirio del 745 al 727 a. C., quien llevó a cabo la invasión ca. 735 ó 732 a. C. ® Salmanasar V, quien reinó en A. del 726 al 722 a. C., comenzó el sitio a Samarí­a en el año 724 a. C., año noveno del reinado de Oseas, y su hijo y sucesor ® Sargón II, quien reinó del 721 al 705 a. C., la conquistó en el 721 a. C., y estableció allí­ una provincia asiria, deportó a sus habitantes hacia Media y norte de Mesopotamia, y en su lugar puso extranjeros de otras regiones también sometidas a A., 2 R 17 y 18, 9-11. ® Senaquerib, rey asirio del 704 al 681 a. C., hijo y sucesor de Sargón II, inició su acción contra Palestina en el 701 a. C., en el año catorce de Ezequí­as, rey de Judá, se apodera de sus ciudades fortificadas y le impone tributo al monarca 2 R 18, 13 ss; 2 Cro 32, 1 ss; Is 36 y 37.

De aquí­ en adelante el poder de A. se impone en el Cercano Oriente.

Diccionario Bí­blico Digital, Grupo C Service & Design Ltda., Colombia, 2003

Fuente: Diccionario Bíblico Digital