Biblia

SEGUIR

SEGUIR

v. Imitar, Perseguir
Exo 14:4 endureceré .. Faraón para que los siga
Exo 14:8 Faraón .. siguió a los hijos de Israel
Deu 4:4 vosotros que seguisteis a Jehová .. estáis
Deu 10:20 a Jehová tu Dios temerás .. seguirás
Deu 13:4 su voz, a él serviréis, y a él seguiréis
Deu 16:20 la justicia seguirás, para que vivas y
Deu 30:20 amando a Jehová .. y siguiéndole a él
Jos 14:8 yo cumplí siguiendo a Jehová mi Dios
Jos 22:5 sigáis a él, y le sirváis de todo vuestro
Jos 23:8 a Jehová vuestro Dios seguiréis, como
1Sa 30:8 síguelos, porque .. los alcanzarás, y de
1Ki 18:21 si Jehová es Dios, seguidle; y si Baal
2Ki 6:19 seguidme, y yo os guiaré al hombre que
2Ki 18:6 siguió a Jehová, y no se apartó de él
Isa 51:1 oídme, los que seguís la justicia, los que
Mat 4:20; Mar 1:18 dejando .. redes, le siguieron
Mat 8:19; Luk 9:57 te seguiré adondequiera que
Mat 8:22 le dijo: Sígueme; deja que los muertos
Mat 9:9; Mar 2:14; Luk 5:27 le dijo: sígueme .. y le siguió
Mat 16:24; Mar 8:34; Luk 9:23 niéguese .. y tome su cruz, y sígame
Mat 19:21; Luk 18:22 tesoro en .. y ven y sígueme
Mat 19:27; Mar 10:28; Luk 18:28 hemos dejado todo, y te hemos seguido
Mar 9:38; Luk 9:49 lo prohibimos .. no nos seguía
Mar 10:21 vende .. ven, sígueme, tomando tu cruz
Luk 5:11 las barcas, dejándolo todo, le siguieron
Joh 1:43 Jesús .. halló a Felipe, y le dijo: Sígueme
Joh 8:12 el que me sigue, no andará en tinieblas
Joh 10:5 al extraño no seguirán, sino huirán de él
Joh 10:27 mi voz, y yo las conozco, y me siguen
Joh 12:26 si alguno me sirve, sígame; y donde yo
Joh 13:37 ¿por qué no te puedo seguir ahora?
Joh 18:15 seguían a Jesús Simón Pedro y otro
Joh 21:22 si quiero que .. ¿qué a ti? Sígueme tú
Act 12:9 saliendo, le seguía; pero no sabía que
Rom 4:12 que también siguen las pisadas de la fe
Rom 12:9 aborreced lo malo, seguid lo bueno
Rom 14:19 sigamos lo que contribuye a la paz y a
1Co 14:1 seguid el amor; y procurad los dones
Phi 3:16 sigamos un misma regla, sintamos una
1Ti 6:11; 2Ti 2:22 sigue la justicia, la fe, el
Heb 12:14 seguid la paz con todos, y la santidad
1Pe 3:13 podrá hacer daño, si .. seguis el bien?
2Pe 2:2 y muchos seguirán sus disoluciones, por
Jud 1:11 porque han seguido el camino de Caín
Rev 14:13 porque sus obras con ellos siguen


1. akoloutheo (ajkolouqevw, 190), ser un akoiouthos, seguidor, o compañero (del prefijo a, expresando aquí­ unión, semejanza, y keleuthos, camino; de ahí­, uno que va por el mismo camino). Se utiliza: (a) frecuentemente en el sentido literal (p.ej., Mat 4:25); (b) metafóricamente, de discipulado (p.ej., Mc 8.34; 9.38; 10.21). Se utiliza 77 veces en los Evangelios, de seguir a Cristo, y solo una vez en otro sentido (Mc 14.13). 2. exakoloutheo (ejxakolouqevw, 1811), seguir hacia arriba, o fuera hasta el fin (ek, fuera, utilizado intensivamente, y Nº 1); es empleado metafóricamente, y solo por el apóstol Pedro en su segunda epí­stola; en 1.16, de fábulas artificiosas; 2.2, de actos disolutos; 2.15, del camino de Balaam.¶ En la LXX, Job 31:9; Isa 56:11; Jer 2:2; Am 2.4.¶ 3. epakoloutheo (ejpakolouqevw, 1872), seguir en pos, cerca de (epi, sobre, y Nº 1). Se emplea de señales que siguen a la predicación del evangelio (Mc 16.20); de seguir buenas obras (1Ti 5:10); de pecados que siguen a los que son culpables de ellos (5.24); de seguir los pasos de Cristo (1Pe 2:21).¶ 4. katakoloutheo (katakolouqevw, 2628), seguir detrás o en pos con firme propósito (kata, en pos, utilizado intensivamente, y Nº 1). Se utiliza de las mujeres de camino a la tumba de Cristo (Luk 23:55); de la muchacha padeciendo posesión demoní­aca en Filipos, siguiendo a los misioneros (Act 16:17).¶ 5. parakoloutheo (parakolouqevw, 3877), significa literalmente seguir cerca en pos, o al lado, significando por ello acompañar, amoldarse a (para, al lado, y Nº 1). Se utiliza de señales que acompañan «a los que creen» (Mc 16.17); de investigar el curso de unos hechos(Luk 1:3 «después de haber investigado», lit., «después de haber seguido»); de seguir la buena doctrina (1Ti 4:6); similarmente de seguir una doctrina para practicarla (2Ti 3:10; RV: «has comprendido»). Véase INVESTIGAR.¶ 6. sunakoloutheo (sunakolouqevw, 4870), proseguir con, acompañar a un conductor (sun, con, y Nº 1), recibe su verdadera traducción en Mc 5.37, RVR77: «No permitió que nadie le acompañase» (RV: «que viniese tras él»; RVR: «que le siguiese nadie»); en 14.51, del joven que «le seguí­a» (conforme al TR que tiene el Nº 1 aquí­; VM traduce «seguí­a con él» en este pasaje, lo mismo que en el anterior); Luk 23:49, de las mujeres que «le habí­an acompañado» (Besson, VM; «que le acompañaron»; RV, RVR, RVR77: «que le habí­an seguido»), esto es, a Cristo, desde Galilea.¶ 7. dioko (diwvkw, 1377), denota: (a) echar de un sitio (Mat 23:34 «perseguiréis de ciudad en ciudad»); (c) ir en pos sin hostilidad, seguir, dicho de la justicia (Rom 9:30 «que no iban tras la justicia»; RV: el que †¦ seguí­an»); de la Ley (9.31: «que iba tras»; RV: «que seguí­a»); de la hospitalidad (12.13: «practicando»; RV: «siguiendo», como se seguirí­a una vocación); lo que hace a la paz (14.19: «sigamos»); el amor (1Co 14:1 «seguid»); lo bueno (1Th 5:15 «seguid»); la justicia, la piedad, la fe, el amor, la paciencia, la mansedumbre (1Ti 6:11); la justicia, la fe, el amor y la paz (2Ti 2:22); la paz con todos y la santidad (Heb 12:14); la paz (1Pe 3:11); (c) proseguir, utilizado intransitivamente (Phi 3:12,14: «prosigo», o «sigo adelante)». «Ir tras» serí­a aquí­ un significado inadecuado. Véanse IR, Nº 15, PERSEGUIR, Nº 1, PROSEGUIR, Nº 1. 8. aletheuo (ajlhqeuvw, 226), véase DECIR, A, Nº 10. Se traduce «siguiendo la verdad» en Eph 4:15 (VM: «hablando la verdad»; Besson: «diciendo la verdad»). 9. kolao (kollavw, 2853), véase JUNTAR, Nº 3. Significa primeramente pegar o encolar juntos, unir firmemente; es en este sentido que se debe entender la exhortación «seguid lo bueno» en Rom 12:9 (RVR77: «adherí­os a lo bueno», traducción seguida por LBA y NVI); véase ARRIMAR, PEGAR, UNIR. Notas: (1) El verbo ercomai, véase VENIR, Nº 1, se utiliza en el participio presente en Act 13:44, traducido «el siguiente dí­a de reposo, o sábado». (2) La traducción «le siguieron» (Mc 1.20), es, literalmente, «se fueron en pos de El», de la frase griega (ajph`lqon ojpivsw) apeldon opiso; en cuanto al verbo apercomai (primer término de la frase), véase IR, Nº 14, SALIR, Nº 16; para opiso, véase TRAS. (3) Katadioko, véase BUSCAR, Nº 6, se traduce «le siguió Simón, y los que estaban con él» en Mc 1.20 (RV; RVR: «buscó»).¶ (4) Mimeomai, imitar, ser imitador, se traduce siempre así­ en la RVR; en la RV se traduce «no sigas lo que es malo» en 3 Joh 11: Véase IMITAR, A. (5) Poreuo se traduce «siga mi camino» en Luk 13:33 (RV: «camine»); por lo general se traduce con el verbo «ir». Véanse ANDAR, Nº 2, CAMINAR, Nº 2, IR, Nº 1, MARCHAR, Nº 2, SALIR, Nº 3. (6) Stoiqueo, véase ANDAR, Nº 4, se traduce con el verbo seguir en Rom 4:12 «siguen las pisadas de la fe» (RV, RVR); «sigamos una misma regla» (Phi 3:16; RV: «vamos»).

Fuente: Diccionario Vine Nuevo testamento

Seguir a Dios es andar por los *caminos de Dios, por los que condujo a su pueblo en tiempos del *éxodo, los que trazará su Hijo para conducir a todos los hombres al término del nuevo y verdadero Exodo.

1. La vocación de Israel. Saliendo de Egipto respondí­a el pueblo a Yahveh que lo llamaba a seguirle (cf. Os 11,1). En el desierto camina Israel detrás de Yahveh, que le guí­a en la columna de nube y en la columna de fuego (Ex 13,21), que enví­a a su ángel para abrir un camino a su pueblo (Ex 23,20.23). Israel oye sin cesar este llamamiento a seguir a Yahveh, como la prometida sigue a su prometido (Jer 2,2), como el rebaño sigue a su *pastor (Sal 80,2), como el pueblo sigue a su *rey (2Sa 15,13; 17,9), como el fiel sigue a su *Dios (lRe 18,21).

En efecto, seguir significa adhesión total y sumisión absoluta, es decir, *fe y *obediencia. Por eso el hombre que no dudó jamás, Caleb, es recompensado por haber «seguido plenamente a Yahveh» (Dt 1,36); David, que observó los mandamientos, es el modelo de los que siguen a Dios con todo su corazón (lRe 14,8). Cuando el rey Josí­as y todo el pueblo se comprometen a vivir según la alianza, deciden «seguir a Yahveh».

En adelante el ideal del fiel será siempre seguir «los *caminos del Señor» (Sal 18,22; 25,…). Seguir a Yahveh es por tanto exigencia de *fidelidad. Yahveh es, en efecto, un Dios celoso: prohibe seguir a otros dioses, es decir, darles culto e imitar las prácticas de sus fieles (Dt 6,14). Ahora bien, Israel presta oí­do a los llamamientos de los dioses locales; apenas llegado a Canaán, los Baales disputan su corazón al Dios del Sinaí­ (Dt 4,3). Así­ «cojea de las dos piernas» hasta que resuena vio-lentamente la voz profética: «Si Yahveh es Dios, seguidle ; si lo es Baal, seguidle» (lRe 18,21). A ejemplo de Elí­as los profetas reprochan sin cesar a Israel «el prostituirse y desviar-se de seguir a Yahveh» (Os 1,2) y «seguir a dioses extranjeros» (Jer 7, 6.9; 9,13; 11,10). Predicando la conversión invitan a volver al camino que habí­a seguido Israel en los tiempos del Exodo (Os 2,17), a volver en pos de Yahveh.

2. En seguimiento de Cristo.

a) Los primeros pasos. «Â¡Seguidme!», dijo Jesús a Simón y a Andrés, a Santiago y a Juan, a Mateo, y su palabra, llena de autoridad, arrancó su adhesión (Mc 1,17-20; 2,14).

Una vez discí­pulos de Jesús, serán iniciados progresivamente en el secreto de su misión y en el misterio de su persona. En efecto, seguir a Jesús no es sólo adherirse a una enseñanza moral y espiritual, sino compartir su destino. Ahora bien, los discí­pulos están sin duda prontos a compartir su gloria: «Hemos dejado todo para seguirte; ¿qué nos corresponderá, pues?» (Mt 19,27) -pero deben aprender que antes han de compartir sus pruebas, su pasión. Jesús exige el desasimiento total: renuncia a las riquezas y a la seguridad, abandono de los suyos (Mt 8, 19-22; 10,37; 19,16-22), sin reservas ni miradas atrás (Lc 9,61s). Exigencia a la que todos pueden ser llamados, pero a la que no todos responden, como en el caso del joven rico (Mt 19,22ss).

b) Hasta el sacrificio. El discí­pulo, habiendo así­ renunciado a los bienes y a los lazos del mundo, aprende que debe seguir a Jesús hasta la *cruz. «Si alguien quisiere venir en pos de mí­, renuncie a sí­ mismo, tome su cruz y sí­game» (Mt 16,24 p). Jesús, exigiendo a sus discí­pulos tal sacrificio, no sólo de los bienes, sino también de su persona, se revela como Dios y acaba de revelar hasta dónde van las exigencias de Dios. Pero a estas exigencias no podrán responder los discí­pulos sino cuando Jesús haya hecho el primero el gesto del *sacrificio. Esto es lo que Pedro, pronto en espí­ritu a querer seguir a Jesús a dondequiera que vaya, y no menos pronto a abandonarlo como los otros discí­pulos (Mt 26,35.56), sólo podrá comprender «más tarde» (Jn 13,36ss), cuando haya abierto Jesús el camino con su muerte y su resurrección: entonces irá Pedro adonde no habí­a pensado antes (Jn 21,18s).

c) Imitar y creer. Los teólogos del NT transpusieron la metáfora. Para Pablo, seguir a Cristo es conformarse con él en su misterio de muerte y de resurrección. Esta conformidad, a la que estamos predestinados por Dios desde toda la eternidad (Rom 8,29), se inaugura en el bautismo (Rom 6,2ss) y debe profundizarse por la imitación (lCor 11,1), la comunión voluntaria en el sufrimiento, enmedio del cual se despliega el poder de la resurrección (2Cor 4,10s; 13, 4; Flp 3,10s; cf. lPe 2,21).

Según Juan, seguir a Cristo es entregarle la *fe, una fe entera, fundada en su sola palabra y no en signos exteriores (Jn 4,42), fe que sabe superar las vacilaciones de la sabidurí­a humana (Jn 6,2.66-69); es seguir la luz del mundo tomándola por guí­a (Jn 8,12; es situarse entre las ovejas que reúne en un solo rebaño el único pastor (Jn 10,1-16).

Finalmente, el creyente que sigue a los *apóstoles (Act 13,43) comienza así­ a seguir a Cristo «dondequiera que va» (Ap 14,4; cf. Jn 8,21s) hasta penetrar en pos de él, «en el otro lado del velo, donde entró él como precursor» (Heb 6,20). Entonces se realizará la promesa de Jesús: «Si alguien me sirve, sí­game, y don-de yo estoy, allí­ estará también mi servidor» (Jn 12,26).

-> Camino – Discí­pulo – Escuchar – Ejemplo – Fe – Obediencia – Vocación.

LEON-DUFOUR, Xavier, Vocabulario de Teologí­a Bí­blica, Herder, Barcelona, 2001

Fuente: Vocabulario de las Epístolas Paulinas