Biblia

VICIOS CAPITALES

VICIOS CAPITALES

Se llaman «vicios capitales» a las siete inclinaciones desordenadas que tienden a convertirse en actitudes de pecado soberbia, avaricia, lujuria, ira, gula, envidia, pereza. Se llaman «vicios» por su facilidad de llevar al pecado, a modo de hábito; se llaman «capitales», por dar pie a otros pecados más, como consecuencia. Son inclinaciones contrarias a las virtudes.

De hecho corresponden a inclinaciones que deben orientarse hacia su lado positivo el aprecio de sí­ mismo, el uso de los bienes de la tierra, la sexualidad, la agresividad ante las dificultades, la tendencia a la comida y bebida, la emulación, el deseo y necesidad de descanso… La concupiscencia, desordenada por el pecado original, transforma estas tendencias en un desorden que, cuando se sigue voluntariamente, constituye el pecado o vicio capital.

Cristo ha vencido el pecado y comunica a todo creyente la posibilidad de transformar toda inclinación de la naturaleza humana, en donación verdadera del propio ser a Dios y a los hermanos, sin dejarse llevar de los desórdenes de la concupiscencia (cfr. Mt 4,1-11).

Referencias Pecado, pecado original, sexualidad, tentación, virtudes.

Lectura de documentos CEC 1866 (todos), 2481 (vanagloria), 2094, 2540 (orgullo, soberbia), 2536-2537 (avaricia), 2351 (lujuria), 2538-2540 (envidia), 2094 (pereza).

Bibliografí­a Ver estudios en las referencias (pecado, etc.).

(ESQUERDA BIFET, Juan, Diccionario de la Evangelización, BAC, Madrid, 1998)

Fuente: Diccionario de Evangelización