Biblia

ZUINGLISMO

ZUINGLISMO

Esta palabra alude a la doctrina de Ulrich Zuinglio (1484-1531), teólogo y reformador suizo, que fue en gran parte responsable de la introducción de la Reforma en Suiza. Zuinglio fue ordenado en 1506 y, durante los años que pasó como Pastor en la ciudad de Glarus, adquirió un notable conocimiento de autores como Orí­genes, Jerónimo, los capadocios, Cirilo de Alejandrí­a, Juan Crisóstomo y Agustí­n. Entre sus escritos están los Archeteles (1522), una condenación de las diversas ceremonias que se habí­an desarrollado en la Iglesia católica durante la Edad Media; las 77 Conclusiones (1523), una obra que tení­a algunos paralelos con las 95 Tesis de Lutero, y que establecí­a las normas generales del plan reformador de Zuinglio; el Comentario sobre la verdadera y la falsa religión (1525), que incluí­a algunas importantes enseñanzas sobre la cena del Señor y sobre la divina providencia; y la Confesión de fe (1530), un breve sumario de su teologí­a preparado para Carlos Y en la Dieta de Ausburgo.

La doctrina de Zuinglio ha sido definida como un tipo de †œprimitivismo», en cuanto que deseaba hacer de las Escrituras y de los escritos patrí­sticos la norma para una purificación más bien iconoclástica de la Iglesia. El principio que subraya esta crí­tica rigurosa de la Iglesia está ya contenido en la primera de sus Conclusiones de 1523: «Todos los que afirman que el evangelio no tiene valor sin la aprobación de la Iglesia, yerran y desprecian a Dios,†. Concretamente, muchas de las doctrinas que la Iglesia ha aprobado tienen que revisarse y eliminarse si oscurecen el papel único de Jesucristo, como el único mediador de la salvación; se trata de las doctrinas que se refieren a la misa como sacrificio, a la intercesión de los santos, a la autoridad eclesiástica, al ayuno y la abstinencia, al purgatorio y otras muchas. Lo mismo puede decirse de algunas cuestiones de disciplina, como el celibato clerical y las comunidades religiosas, de las imágenes religiosas y de los himnos acompañados de música de órgano. El espiritualismo de Zuinglio no admite ninguna mediación material de la gracia, con el resultado de negar toda presencia †œreal† del cuerpo y de la sangre de Cristo en la cena del Señor. La comunión con el Señor es más bien de naturaleza espiritual y está meramente simbolizada por los elementos del pan y del vino.

Fue incapaz de conciliar su concepción con la más «realista† de Lutero, en el Coloquio de Marburgo en 1529.

Una aportación de Zuinglio al protestantismo es esta aproximación más simbólica a los sacramentos. Contra los anabaptistas, argumentaba fuertemente que los apóstoles tení­an intención de bautizar a los niños. Zuinglio veí­a a Dios como el agente universal en todas las cuestiones que afectan a la salvación humana. En este sentido daba prioridad a la doctrina de la predestinación. Para Zuinglio la Iglesia es tanto invisible (los elegidos) como visible (la congregación de los que creen y son bautizados). Mientras que negaba cualquier estructura jerárquica de la Iglesia, admití­a que toda comunidad tiene necesidad de un pastor para la predicación y para dar buen ejemplo.

Las autoridades civiles deberí­an utilizar su poder para asegurar que la sociedad fuera gobernada por prí­ncipes cristianos.

La muerte precoz de Zuinglio en la batalla de Kappel, el 11 de octubre de 1531, disminuyó su influencia y el desarrollo de su pensamiento. Habí­a sido promotor de la Reforma durante diez años solamente. En Suiza esta misión cayó en manos de Juan Calvino (15091564), cuya primera edición de la Institución de la religión cristiana se publicó en Basilea en 1536.

W Henn

Bibl.: J Delumeau, La Reforma, Labor, Barcelona 1973; HdI. Y 349-363.

Fuente: Diccionario Teológico Enciclopédico