Las dos caras de la conciencia

Por: pastor Daniel Brito

Título: Las dos caras de la conciencia

Texto: 1 Reyes 22:7-14

«Pero Josafat inquirió:   —¿No hay aquí un profeta del Señor a quien podamos consultar? 8 El rey de Israel le respondió:  —Todavía hay alguien por medio de quien podemos consultar al Señor, pero me cae muy mal porque nunca me profetiza nada bueno; sólo me anuncia desastres. Se trata de Micaías hijo de Imlá.   —No digas eso —replicó Josafat. 9 Entonces el rey de Israel llamó a uno de sus funcionarios y le ordenó:   —¡Traigan de inmediato a Micaías hijo de Imlá!

10 El rey de Israel, y Josafat, rey de Judá, vestidos con su ropaje real y sentados en sus respectivos tronos, estaban en la plaza a la *entrada de Samaria, con todos los que profetizaban en presencia de ellos.11 Sedequías hijo de Quenaná, que se había hecho unos cuernos de hierro, anunció: «Así dice el Señor: “Con estos cuernos atacarás a los sirios hasta aniquilarlos.” »12 Y los demás profetas vaticinaban lo mismo: «Ataque Su Majestad a Ramot de Galaad, y vencerá, porque el Señor la entregará en sus manos.»

13 Ahora bien, el mensajero que había ido a llamar a Micaías le advirtió:   —Mira, los demás profetas a una voz predicen el éxito del rey. Habla favorablemente, para que tu mensaje concuerde con el de ellos. 14 Pero Micaías repuso: —Tan cierto como que vive el Señor, ten la seguridad de que yo le anunciaré al rey lo que el Señor me diga.»

Introducción

El tema de esta noche es sobre la “conciencia” del ser humano. Estaremos usando los ejemplos de TRES personajes en el Texto Sagrado que representan TRES decisiones que muestran su “carácter” y su obediencia o desobediencia a DIOS. Trataremos los siguientes puntos:

1) El trasfondo

2) Micaías, el hombre de DIOS

3) Acab, el rey perverso

4) Josafat, el rey que no obedeció a su conciencia

5) El efecto de la conciencia del Cristiano

Lección

1.      El trasfondo. – El tema de la conciencia nos lleva a la creación de Adán y Eva, donde el libro de Génesis nos dice que fueron creados a imagen de DIOS. Toda persona tiene una conciencia. Toda persona sabe que hacer el mal es malo. Veremos algunos ejemplos en las Escrituras sobre algunas personas que, a veces se sabe muy poco de ellos, pero que nos dejaron una gran lección.

a.      Comenzamos la historia con tres personajes, el primero, era un hombre de Dios con el nombre de Micaías, de quien el Texto Sagrado dice poco, pero nos deja un gran ejemplo en cuanto a la OBEDIENCIA a su CONCIENCIA.

b.      En segundo lugar y opuesto a la historia de Micaías, tenemos la historia de Acab, el rey perverso del reino del norte de Israel en Samaria, casado con una mujer pagana y terrible. El Texto Sagrado nos muestra como ella se aprovechó del carácter débil y malvado de ese hombre impío para manipularlo en sus hechos diabólicos.

c.      En tercer lugar, tenemos la historia del rey Josafat, en el reino de Judá del sur de Israel, un hombre piadoso, pero quien no obedeció a su conciencia, y casi perdió su vida por ello.

d.      Por último en este punto, debemos recordar que no se puede cambiar la OBEDIENCIA por DESOBEDIENCIA. El BIEN no se puede cambiar por el MAL. La DESOBEDIENCIA a DIOS siempre produce GRAVES consecuencias. Mientras que la OBEDIENCIA a DIOS lleva a la vida eterna.

2.      Micaías, el hombre de DIOS.. – (1 Reyes 22:15-18) «Cuando compareció ante el rey, éste le preguntó:  —Micaías, ¿debemos ir a la guerra contra Ramot de Galaad, o no?  —Ataque, Su Majestad, que vencerá —contestó él—, porque el Señor la entregará en sus manos. 16 El rey le reclamó:   —¿Cuántas veces debo hacerte jurar que no me digas nada más que la verdad en el *nombre del Señor? 17 Ante esto, Micaías concedió:  —Vi a todo Israel esparcido por las colinas, como ovejas sin *pastor. Y el Señor dijo: “Esta gente no tiene amo. ¡Que cada cual se vaya a su casa en *paz!” 18 El rey de Israel le dijo a Josafat:  —¿No te dije que jamás me profetiza nada bueno, y que sólo me anuncia desastres?»

a.      Comenzamos con Micaías, de quien no se conoce mucho, pero lo que sí conocemos de él, nos muestra que fue fiel a  DIOS, a pesar de las amenazas del rey, y de haber sido enviado a la cárcel por haber sido fiel a “su conciencia,” y por ende a JEHOVÁ. Veamos algunas cosas:

i.Lo primero es que en medio de amenazas y de adversidad, Micaías es TOTALMENTE fiel al MENSAJE que JEHOVÁ quería que él diera, aunque su vida peligraba.

ii.En segundo lugar, Micaías estaba solo en contra de lo que 400 profetas falsos del rey Acab decían.  Hubiera sido fácil para Micaías haber sido como los demás falsos profetas y haberle profetizado al rey lo que quería oír.

iii.En tercer lugar, Micaías prefirió la cárcel en vez de agradar con mentiras al rey. Siguió a su CONCIENCIA en vez de seguir a la mayoría.

1.      Martín Lutero el gran Reformador del siglo 16, siguió el ejemplo de Micaías, estando delante del emperador que le exigía que se RETRACTARA, dijo que no podía ir en contra de su conciencia.

b.      Ser parte de la “minoría” no es fácil, y puede intimidar; pero al igual que Micaías, TODO CREYENTE es llamado a seguir a su conciencia y responder a TODA circunstancia en OBEDIENCIA A DIOS.

3.      Acab, el rey perverso. – Acab era un rey asesino, quien dejó que su esposa Jezabel lo manipulara en querer erradicar el culto a JEHOVÁ por el de Baal. Acab había ordenado la muerte de todos los profetas de JEHOVÁ.

a.      Acab sabía lo que estaba haciendo, y su CONCIENCIA no lo dejaba en paz.

i.El profeta Elías era igual que Micaías pero mejor conocido en el Texto Sagrado, había sido usado por JEHOVÁ para oponerse a Acab; era como una “encarnación de la conciencia de Acab.”

1.      (1 Reyes 21:20) «Acab le respondió a Elías:  —¡Mi enemigo! ¿Así que me has encontrado?  —Sí —contestó Elías—, te he encontrado porque te has vendido para hacer lo que ofende al Señor»

ii.Cada vez que Acab veía a Elías, era como si su CONCIENCIA le estuviera hablando.

iii.Al igual que Elías, Micaías profetizaba lo opuesto a lo que los 400 profetas falsos decían; era una CONCIENCIA hablándole a Acab.

b.      Para terminar este punto, veamos el castigo de DIOS sobre  Acab.

i.Acab quiso aprovecharse en la guerra, se cambió de ropa para pelear como un soldado común. Un soldado tiró una flecha al azar y le pegó a Acab (1 Reyes 22:34).

1.      “Que nadie piense que puede esconderse del juicio de Dios. El sirio que disparó su arco a la ventura (v.34) no parece que intentase herir a un determinado enemigo, pero Dios dirigió aquella saeta de forma que: 1. Hiriese a la persona apropiada. 2. Y que la hirieses en el lugar adecuado: ‘entre las junturas de la armadura;, el único lugar por el que podía penetrar la saeta.”[1]

ii.Dios había usado la alianza de los dos reyes para traer a Acab a una guerra en la cual DIOS mismo había decretado JUICIO sobre el impío Acab.

4.      JOSAFAT, el rey que NO obedeció a su conciencia. – Josafat fue el buen rey que hizo una alianza con un impío, y casi que le costó su vida por haberlo hecho. En esa mala decisión de Josafat, podemos ver un PROBLEMA que no solamente era común en el tiempo de Josafat, sino aún en nuestros días, y es hacer MALAS decisiones que violan la propia CONCIENCIA del creyente para hacer lo que TODOS están haciendo.

a.      (1 Reyes 22:29-32) «El rey de Israel, y Josafat, rey de Judá, marcharon juntos contra Ramot de Galaad.30 Allí el rey de Israel le dijo a Josafat: «Yo entraré a la batalla disfrazado, pero tú te pondrás tu ropaje real.» Así que el rey de Israel se disfrazó y entró al combate. 31 Pero el rey de *Siria les había ordenado a sus treinta y dos capitanes de los carros de combate: «No luchen contra nadie, grande o pequeño, salvo contra el rey de Israel.»32 Cuando los capitanes de los carros vieron a Josafat, pensaron: «Sin duda, éste es el rey de Israel.» Así que se volvieron para atacarlo; pero Josafat gritó.33 Entonces los capitanes de los carros vieron que no era el rey de Israel, y dejaron de perseguirlo.»

b.      Josafat hizo alianza con Acab el rey malvado. La alianza incluía un parentesco entre su hijo y la hija de Acab. Ese parentesco después trajo muy malas consecuencias a la familia de Josafat, y a todo el reinado de Judá.

c.      Como hemos leído en el Texto anterior, Josafat casi que pierde su vida por haber DESOBEDECIDO a su CONCIENCIA. Al regreso de la guerra con Acab, un hombre de Dios le habla por parte de Dios.

i.(2 Crónicas 19:1-2) «Cuando Josafat, rey de Judá, regresó sin ningún contratiempo a su palacio en Jerusalén,2 el vidente Jehú hijo de Jananí fue a visitarlo y le dijo: «¿Cómo te atreviste a ayudar a los malvados, haciendo alianza con los enemigos del Señor? Por haber hecho eso, la ira del Señor ha caído sobre ti.»

5.      El efecto de la conciencia del Cristiano. – (Mateo 5:14-16) «Ustedes son la luz del mundo. Una ciudad en lo alto de una colina no puede esconderse.15 Ni se enciende una lámpara para cubrirla con un cajón. Por el contrario, se pone en la repisa para que alumbre a todos los que están en la casa.16 Hagan brillar su luz delante de todos, para que ellos puedan ver las buenas obras de ustedes y alaben al Padre que está en el cielo.»

a.      Obediencia a lo dicho por DIOS en Su Palabra, es obedecer a la conciencia. El ejemplo de Micaías y todos los otros que hemos estudiado en esta noche, nos debe motivar a ser fiel a la PALABRA DE DIOS aunque seamos los únicos.  Mientras que Josafat debe ser el ejemplo del peligro de hacer una alianza entre un cristiano con el mundo.

b.      Debemos ser “LA LUZ DEL MUNDO” como nuestro SEÑOR JESUCRISTO nos ha ordenado ser. Debemos mantener nuestra confesión fiel a la Palabra de DIOS sin importarnos lo que otros digan.

c.      Siempre recordando que el CAMINO que lleva a la VIDA ETERNA es ESTRECHO, y el que lleva a la PERDICIÓN es ANCHO.

i.(Mateo 7:13-14) «Entren por la puerta estrecha. Porque es ancha la puerta y espacioso el camino que conduce a la destrucción, y muchos entran por ella.14 Pero estrecha es la puerta y angosto el camino que conduce a la vida, y son pocos los que la encuentran.»

Conclusión

Oremos….

*Toda referencia Bíblica es tomada de la Biblia, Nueva Versión Internacional.

Notas:

1. Matthew Henry, Comentario Bíblico de Matthew Henry, traducido por Francisco Lacueva, p. 392, editorial CLIE.