Entendimiento y disposición al llamado de Dios

Lectura: 1 Reyes 19:19-21

Introducción:

Servir a Dios siempre ha sido una honra que todos debemos anhelar. Para servir a Dios se requiere, indispensablemente, un llamado de parte de Dios, y ante ese llamado, entendimiento y disposición.

Un llamamiento de Dios es el acto por el cual Dios escoge a una persona para realizar una labor general o específica. Jesús de Nazaret nos enseñó la labor a realizar (Mr 16:15); sus discípulos, los nuevos apóstoles lo entendieron y mostraron interés, los cuales les hicieron obedecer a aquel mandato divino (Hch 5:42; 4:31).

Veamos dos criterios necesarios para obedecer al llamado de Dios.

1. Entendimiento

a. Eliseo: significa Dios es salvación. Era habitante de Abel- Mehola, de buena familia (de alta posición económica); era propietario junto con su familia de doce pares de bueyes, con los cuales laboraban en el campo. Se desconoce su edad en que fue llamado por Dios; dando a entender que la edad es lo de menos para servir a Dios en su santa obra. Dios puso su mirada en este hombre para que fuera el reemplazo de Elías (el profeta de fuego).

b. A Elías Dios le había dicho en Horeb que llegara a Abel- Mehola y ungiera a Eliseo como futuro profeta en Israel (1Rey 19:16).

c. Cuando Elías llega donde estaba Eliseo, “echó sobre él su manto” (ver 19). En el mismo momento Eliseo “entendió” que Dios lo necesitaba en su obra, que Dios lo estaba llamando para servir al lado de un varón de Dios, Elías; y posiblemente reemplazarlo. Eliseo sabía que Dios se iba a llevar a Elías (2Rey 2:3).

d. El “manto” (del heb. Simlah) era una vestimenta exterior y ancha; lo usaban los hombres y también las mujeres. Las clases populares del Medio Oriente llevaban con frecuencia un manto exterior de cabello de camello o de cabra. Manto en griego es “himation”, y se traduce “capa”; en el Nuevo Testamento Jesús también usó un manto (Mt 14:36).

Manto: continuidad a una ministerio; en este caso Eliseo continuando el ministerio que dejaba Elías (el ministerio de profeta).

Cuando Elías dejó caer su manto sobre Eliseo, le estaba diciendo que, él era el hombre que debía continuar con su ministerio de pregonar contra la apostasía y corrupción de Israel. Eliseo entiende que Dios lo necesita ya…Esta es la hora de servir a Dios por doquier, de impactar nuestra localidad.

Eliseo lo entendió. Qué bueno que todos entendamos que Dios nos necesita en su obra en este momento.

2. Disposición

Ante aquel llamado simbólico, donde no se emite ni una sola palabra, Eliseo reacciona prontamente:

a. Renuncia a sus labores diarias para dedicarse a una labor espiritual (ver 20) “dejando él los bueyes”. Ver 21.

b. Dejó su parentela para unirse a una familia de profetas que amaban a Dios (ver 20).

En ese momento era peligroso ser profeta; mataban a los profetas; el mismo Elías huía porque Jezabel lo había mandado a matar. Pero Eliseo no le importó lo difícil que era en ese momento servir a Dios. Jesús conforta a aquellos que sufren  por causa de Su Nombre (Mt 5:11,12).

Dejó todo lo que poseía para servir a Dios como criado de Elías.

Eso es disposición y amor a la obra de Dios. Tuvo disposición para servir a Dios.

Conclusión:

Qué bueno que entendamos que Dios nos ha llamado a predicar Su Palabra, y que mostremos disposición en servir a Dios en Su obra.

Fuente: www.centraldesermones.com