Cuídate De No Ser Contumaz
Cuídate de no ser contumaz
Hermano hoy quiero advertirte de una actitud que puede y se filtra en el interior de los círculos cristianos, es probable que estés a punto de llegar a practicarla.
Se predica en las Iglesias, una y otra vez acerca de las cosas que no le agradan a Dios, se realizan estudios bíblicos buscando de igual forma atacar las prácticas erróneas en la vida diaria.
A pesar de esto pueden existir personas que se sigan aferrando a la práctica de estas cosas aun sabiendo de antemano que no le agradan a Dios, procuran incluso argumentar que están permitidas, o bien haciéndolas propician que se hable aún en contra de Dios.
No haré una lista de las acciones y prácticas que puedan ser, usted que lee sabrá identificarlas y primeramente se que se examinará usted mismo al ser temeroso de Dios, porque sabemos que no se trata de ver primero a otros sino de buscar en nosotros mismos y posteriormente estar atentos para cuidarnos de no caer en manos de lobos vestidos de ovejas.
Y es que al insistir en mantenerse en dichas prácticas se pueden convertir en personas contumaces, esta es la actitud a la cual hice referencia en un principio, pero ¿Cuál es su significado?
Cuidate De No Ser Un Contumaz
Primeramente veamos lo que dice el diccionario de la Real Academia Española, contumaz:
Rebelde, porfiado y tenaz en mantener un error.
Por consecuencia tendremos que ver el significado de porfiado:
Dicho de una persona: Terca y obstinada en su dictamen y parecer.
Y también de tenaz:
Que se pega, ase o prende a una cosa, y es dificultoso de separar.
Entenderemos que cuando alguien se empeña en realizar prácticas que son incorrectas, que no son agradables a Dios, aún cuando ya se las han observado, aún cuando sabe que así es, en efecto son rebeldes, tercos, obstinados y se pegan a dicha práctica y se niegan a soltarla.
Es conveniente saber que la Escritura dice, que estas personas cuando además de hacer, enseñan a otras a hacer o causar herejías destructoras, serán castigadas en el día del juicio:
2 Pedro 2:1-3 y 9-10 “1 Pero hubo también falsos profetas entre el pueblo, como habrá entre vosotros falsos maestros, que introducirán encubiertamente herejías destructoras, y aun negarán al Señor que los rescató, atrayendo sobre sí mismos destrucción repentina. 2 Y muchos seguirán sus disoluciones, por causa de los cuales el camino de la verdad será blasfemado, 3 y por avaricia harán mercadería de vosotros con palabras fingidas. Sobre los tales ya de largo tiempo la condenación no se tarda, y su perdición no se duerme.”
“9 sabe el Señor librar de tentación a los piadosos, y reservar a los injustos para ser castigados en el día del juicio;10 y mayormente a aquellos que, siguiendo la carne, andan en concupiscencia e inmundicia, y desprecian el señorío. Atrevidos y contumaces, no temen decir mal de las potestades superiores,”
Amado hermano, cuídate de no ser contumaz, cuida tu testimonio de tal manera que no provoques blasfemias en contra del Señor, sobre todo cuida no enseñar a otros a realizar prácticas inmundas reprobadas por Dios y cuídate de las personas que identifiques con estas actitudes.
Dios te bendiga.