“ESTARÁ EL ARCO Y ME ACORDARÉ DEL PACTO” (Génesis 9:16)
El Arco de Dios en la Biblia
En Génesis, cuando Noé predicaba acerca de la lluvia, esta representaba un símbolo de juicio. Pero después del diluvio, Dios dijo: “no habrá más diluvio de aguas para destruir todo ser vivo. Estará el arco… y me acordaré del pacto perpetuo con todo lo que tiene vidas” (Génesis 9:15b,16). A partir de ese momento, la lluvia se convirtió en un símbolo de bendición.
Tal vez hayas estado “en el infierno” y has regresado; ahora temes que esto vuelva a ocurrir. ¡No tengas miedo! Tan sólo sigue caminando con el Dios que prometió: “no habrá más” (Génesis 9:15b).
Cuando Dios transforme lo que debería haberte destruido en bendición, serás capaz de mirar hacia atrás y decir: “El sufrimiento que permitiste era bueno para mí, porque me enseñó a aprender tus estatutos” (Ver Salmo 119:71). Sin ello nunca habrías descubierto :
(a) que el aislamiento crea determinación y hace que te agarres a Dios
(b) el poder de tus propias oraciones
(c) lo que Dios puede realizar frente a la adversidad
(d) que cuando te oyó llorar en la noche, tus lágrimas eran tan valiosas que las guardó en una redoma (Ver Salmo 56:8b)
(e) que el ángel del Señor te protegía cuando el enemigo quería destruirte (Ver Salmo 34:7)
(f) que Dios no necesitaba a tus amigos para apoyarte con vistas a bendecirte
(g) que sólo Él te salvó, ¡porque vio el arco iris y recordó su promesa!