Un Dios de propósitos
Sermones Cristianos | Predicas Cristianas
Lectura Biblica: Isaías 45:1-3
Introducción:
Esta es una de las historias de la Biblia muy sobresaliente, miramos como Dios usa a un hombre para llevar a cabo su propósito, también que es lo que Él tiene para cada uno de nosotros, cuando nosotros tomamos la palabra de Dios en serio y la ponemos por obra.
“Así dice Jehová a su ungido, a Ciro, al cual tomé yo por su mano derecha, para sujetar naciones delante de él y desatar lomos de reyes; Para abrir delante de él puertas, y las puertas no se cerrarán: Yo iré delante de ti, y enderezaré los lugares torcidos; quebrantaré puertas de bronce, y cerrojos de hierro haré pedazos; Y te daré los tesoros escondidos, y los secretos muy guardados, para que sepas que yo soy Dios Jehová, el Dios de Israel, que te pongo nombre”. (Isaías 45:1-3)
Dios ya había ungido a Ciro por nombre hacía ya mas de 210 años atrás, en este pasaje Ciro representa al creyente.
La victoria de Ciro contra el rey Belsasar de Babilonia, como cualquier lucha que nosotros tengamos con Satán o con el pecado, dependen de Dios.
“Si Jehová no edificare la casa, en vano trabajan los que la construyen” (Salmos 127:1)
“Porque separados de mi, nada podéis hacer” (Juan 15:5)
Dios tomó a Ciro de la mano derecha y por 10 años lo llevo de victoria en victoria.
Pero Babilonia era muy fuerte para un muchacho tan joven como Ciro, para empezara a pelear con ella, por esta razón Dios le dio la victoria con otras naciones mas pequeñas.
Hasta después que Dios sujeto a todas las otras naciones ante Ciro, Dios fue delante de el a “Desatar lomos de reyes ( Belsasar rey de Babilonia), para abrir delante de el puertas, ( Las puertas de Babilonia) y las puertas no se cerraran”
Las puertas de Babilonia no se abrieron nomás por abrirse sino porque el rey sabia que no podía contra Ciro.
Jeremías 51:30-31 – Los valientes de Babilonia dejaron de pelear, se encerraron en sus fortalezas; Les faltaron las fuerzas, se volvieron como mujeres, incendiadas están sus casas, rotos sus cerrojos: 31 Correo se encontrará con correo, mensajero se encontrará con mensajero, para anunciar al rey de Babilonia que su ciudad es tomada por todas partes.
HOY TAMBIÉN ES TIEMPO DE QUE LA IGLESIA TOME SU CIUDAD POR TODAS PARTES !!!!!!!!!!
Dios fue delante de Ciro para “desatar los lomos de los reyes” Y mas el rey de Babilonia. (Isaías 45:1)
Daniel 5:6 – Entonces el rey palideció, y sus pensamientos lo turbaron, y se debilitaron sus lomos, y sus rodillas daban la una contra la otra
Como Dios ya había abierto las puertas de la Ciudad, ( Isaías 45:1) Ciro entró y a la ciudad, y como los hombres de Babilonia no querían pelear, Ciro entró y mató al rey Belsasar, como leemos.
Daniel 5:30 – La misma noche fue muerto Belsasar rey de los caldeos
Dios nos dice porque es que El hizo estas cosas, “Por amor de mi siervo Jacob, Y de Israel mi escogido, te llame por tu nombre, te puse sobrenombre, aunque tu no me conociste.” (Isaías 45:4)
Dios no llamó por nombre a Ciro para darle honor, más el tiempo de liberar a su pueblo de la cautividad de Babilonia ya había llegado, como dice el profeta Jeremías:
“Porque así dijo Jehová: Cuando en Babilonia se cumplan setenta años, yo os visitaré, y despertaré sobre vosotros mi buena palabra, para haceros volver a este lugar: Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.” (Jeremías 29:10-11)
HOY TAMBIÉN ES TIEMPO QUE DIOS DESPIERTE EN NOSOTROS LA BUENA PALABRA !!!!!!!!!!!!!!!!
Dios le dijo a Ciro que él le daría todos los tesoros que estaban escondidos en los lugares secretos (Babilonia) Isaías 45:3
LOS TESOROS LE FUERON DADOS A CIRO PARA QUE LE CONSTRUYERA UNA CASA A JEHOVÁ EN JERUSALÉN
Isaías 45:13 – yo lo desperté en justicia, y enderezaré todos sus caminos; Él edificará mi ciudad, y soltará mis cautivos, no por precio ni por dones, dice Jehová de los ejércitos.
HAY CUATRO COSAS QUE DIOS NOS DICE EN ESTE TEXTO:
Yo lo despertaré en justicia
Y enderezaré todos sus caminos
Él edificará mi ciudad
Y soltará mis cautivos
Yo lo despertaré en justicia: Dios es un Dios justo, Él nos justifica por medio de Jesucristo.
Endereza todos tus caminos: Dios es el que endereza los caminos. Los caminos torcidos serán enderezados (Lucas 3:5)
El edificará mi ciudad: Dios anda buscando que con los tesoros que el nos da nosotros le edifiquemos una ciudad.
Y soltara a mis cautivos: por medio de la palabra de Dios y el poder , y la oración que nosotros pongamos en libertad a los cautivos. ( Lucas 4:18-19)
Todo Esto pasaba mientras leemos en:
II Crónicas 36:22-23 – Mas al primer año de Ciro ser rey de los persas, para que se cumpliese la palabra de Jehová por boca de Jeremías, Jehová despertó el espíritu de Ciro rey de los persas, el cual hizo pregonar de palabra y también por escrito, por todo su reino, diciendo: Así dice Ciro, rey de los persas: Jehová, el Dios de los cielos, me ha dado todos los reinos de la tierra; Y él me ha mandado que le edifique casa en Jerusalén, que esta en Judà. Quien haya en vosotros de todo el pueblo, sea Jehová su Dios con él, y suba.
Esta proclamación llegó tan rápida que los judíos no lo podían creer, y leemos a continuación: Cuando Jehová hiciere volver la cautividad de Sion. Seremos como los que sueñan. Entonces nuestra boca se llenará de risa, y nuestra lengua de alabanza; Entonces dirán entre las naciones: Grandes cosas ha hecho Jehová con estos. Grandes cosas ha hecho Jehová con nosotros; Estaremos alegres. (Salmos 126:1-3)
Durante el periodo de la cautividad la actitud del pueblo de Israel era la siguiente:
Junto a los ríos de Babilonia, allí nos sentábamos, y aun llorábamos, acordándonos de Sion.
Sobre los sauces en medio de ella colgamos nuestras arpas.
Y los que nos habían llevado cautivos nos pedían que cantásemos, y los que nos habían desolado nos pedían alegría, diciendo: Cantadnos algunos de los cánticos de Sion.
Pero cuando llegó su libertad, nosotros leemos a continuación el cambio de actitud:
“Entonces nuestra boca se llenará de risa, y nuestra lengua de alabanza; Entonces dirán entre las naciones: Grandes cosas ha hecho Jehová con estos.” ( Salmos 126:2)
Entonces encontraron uso para ambos sus arpas y sus lenguas.
Yo quiero hacer la invitación a todos los que estarán leyendo este sermón que consideren que Dios no nos quiere en cautiverio sino en libertad como dice (Gálatas 5:1)
“estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de la esclavitud”
Nosotros miramos que los judíos habían colgado sus arpas y ya no se encontraba alabanza en sus lenguas.
Esto es algo que al pueblo de Dios nunca le debe de ocurrir, independientemente de las circunstancias. Un ejemplo que nos da la palabra de dios es:
“Pero a medianoche, orando Pablo y Silas, cantaban himnos a Dios y los presos los oían.” (Hechos 16:25)
Notemos también un hecho fundamental, Dios no es un Dios caprichoso que confiera beneficios por rango o por privilegios, el no ofrecería su amor y dones al primero que entrara en un estanque o al primero que entrara de rodillas en un templo, o al que cantara más alto, o al que cargara más cruces de madera o al que se flagelara más veces, o es más, al que diera más limosna, más ayunos o mandas; ¡No!, de ninguna manera, el nos enseña en toda su palabra y nos enseña por medio de su amado hijo Jesús, que Él ama al pequeño y afligido, al débil y necesitado, que el socorre a todos por igual, el único requisito es que le entreguen su vida y su fe completa y amorosamente con única y verdadera adoración, y entonces no existe mal o enfermedad que no sea quitada, no hay quebrantamiento que no nos enaltezca, no hay muerte que nos alcance en la vida eterna.
“Y había allí un hombre que hacía treinta y ocho años que estaba enfermo. Cuando Jesús lo vio acostado, y supo que llevaba ya mucho tiempo así, le dijo: ¿Quieres ser sano? Señor, le respondió el enfermo, no tengo quien me meta en el estanque cuando se agita el agua; y entre tanto que yo voy, otro desciende antes que yo. Jesús le dijo: Levántate, toma tu lecho y anda. Y al instante aquel hombre fue sanado, y tomó su lecho, y anduvo.
¡Que maravilla!, Como podemos negar el amor y la misericordia divina, al leer como es que un hombre que siempre estaba presente solicitando recobrar su salud, era olvidado de esos poderes sobrenaturales que se hacían presentes en la creencia popular y que solo asistían al mas rápido o fuerte, mencionando que siempre eran los mejores los que recibían el beneficio. Sin embargo Dios se compadece de su condición y toma en cuenta su fe y es así como llega Cristo y le ofrece ser sanado, pero se lo ofrece para que este hombre reconozca su propia fe en Dios y le glorifique, es así como por medio de esa fe y por el poder de Jesús conferido por el Padre le devuelve la salud poniendo de manifiesto que los poderes menores de este mundo son incapaces ante el único y verdadero Dios. Esto no es solo una historia de tiempos bíblicos, es una historia que vemos reflejada cada día en el mundo que vivimos, cuando tantos hombres y mujeres poderosos, ricos y llenos de “gracias” y privilegios, entregan su vida a poderes oscuros, practicando magia, adivinación, rituales satánicos, y poderes sobrenaturales que no son otra cosa que la pobre oferta del dios de este mundo, Satanás. No se trata de ver quien es mas poderoso o quien tiene más capacidades, tampoco quien puede ver el futuro, ni conjurar a la tierra, todo ello es el oro de los “tontos”.
Tu Dios te pide que solo lo ames a él, te pide que entregues tu vida a su ley, y te advierte tan claramente que no admite excusas, que te cuides de los falsos dioses, de las ilusiones que te brindan un efecto enervante de poder, de ese poder transitorio que nos pone con jerarquía en este mundo sobre los demás y que causa la envidia de aquellos que no buscan la riqueza del alma sino la riqueza que se vuelve herrumbre de muerte, que nos encadena como esclavos al mundo y por ello nos trae como única ganancia lo que es de su naturaleza, el mal por el mal; la tristeza, la carencia, el dolor, la enfermedad, la soledad; ¿Tu crees que si vives en Dios todo esto se te manifestará? Nada puede ser manifestado contrario a su naturaleza, la naturaleza divina es perfecta y en la perfección se da todo bien. Si tu vida es una larga cadena de penas y carencias, ¿Por qué no analizas a que te encuentras ligado?, ¿Por qué no revisas en donde tienes tu fe?, No sea que cuando te des cuenta ya estés pagando la factura de tu propia condenación.
”Y era día de reposo aquel día. Entonces los judíos dijeron a aquel que había sido sanado: Es día de reposo; no te es lícito llevar tu lecho. El les respondió: El que me sanó, él mismo me dijo: Toma tu lecho y anda. Entonces le preguntaron: ¿Quien es el que te dijo: Toma tu lecho y anda? Y el que había sido sanado no sabía quién fuese, porque Jesús se había apartado de la gente que estaba en aquel lugar. Después le halló Jesús en el templo, y le dijo: Mira, has sido sanado; no peques más, para que no te venga alguna cosa peor. El hombre se fue, y dio aviso a los judíos, que Jesús era el que le había sanado. Y por esta causa los judíos perseguían a Jesús, y procuraban matarle, porque hacía estas cosas en el día de reposo. Y Jesús les respondió: Mi padre hasta ahora trabaja, y yo trabajo..” ¿Por qué será que Jesús siendo Judío hizo estas cosas en el día de reposo guardado tan celosamente por la tradición y ley judía?, Jesús conocía la ley y recordemos además que la respetaba y daba cumplimiento en todo momento, y así lo enseñó.
Es claro que no lo hacía por olvido o por infringir el mandamiento y demostrar cuan poderoso era, no, lo hacia para demostrar que ninguna ley humana es más que la voluntad divina, por lo mismo los judíos lo perseguían tan encarnizadamente, ya que no es que defendieran la ley de Dios sino que defendían todo el aparato de poder que habían establecido en torno a la misma, para poder ellos vanagloriarse y conseguir los beneficios de este mundo sobre sus propios hermanos. Por eso eran como sepulcros blanqueados, ya que estaban muertos porque menospreciaban la voluntad de Dios y lo ofendían usando su nombre para vestirse con sus vestidos de santidad robados a la adoración única y verdadera.
Cuando Jesús halla al hombre de nuevo en el templo ya curado este, le habla ordenándole que ya no peque más para que no sea llamado el mal aumentado a su vida, pensemos un poco,¿ A que pecado se refería Jesús?, Bien podrían ser un sinfín de pecados, pero el que vemos más claramente es el pecado de omisión al poder del verdadero Dios, ya que Jesús al sanarlo le enseña que la verdad no estaba en las aguas de un estanque sino en las aguas de vida de la fe y la entrega a Dios, y también le enseña que no hay hombre o mujer pequeños para la misericordia divina, Dios mira a todos sus hijos y les envía el socorro, a pesar de que no se lo agradecemos.
¿Que es lo que hace el hombre después que Jesús lo conmina a reformar su vida de pecado? Pues corre a denunciar a Jesús ante sus perseguidores, devolviendo así mal por el bien divino; Si el hombre sanado hubiere reconocido a Jesús como uno más de tantos “sanadores” con poderes sobrenaturales, obviamente que no hubiese sido el Cristo anunciado por los profetas. Un Cristo que traería sanidad al alma y al cuerpo, por el poder del Espíritu, hubiera sido un hijo del dios del mundo, de esos que causan la perdición de los hombres y la corrupción del espíritu; Pero al no ser así, al reconocer la Divinidad de Jesús, lo que intenta es causarle daño y esto se entiende porque nos ha sido enseñado que ningún reino dividido prevalece, así el mal no puede luchar contra el mal, pero si puede tratar de mellar la fe de aquellos que buscan el bien. Entonces: ¿Por qué buscamos enaltecer un mundo sobrenatural si seremos felices si vivimos dando gloria por el mundo natural y bello de la adoración única y verdadera a Dios?
Había un hombre santo y fiel llamado Job que es probado en su fidelidad a Dios y le sobrevienen toda suerte de desgracias y penas que difícilmente soportaríamos cualquiera de nosotros, es tentado a claudicar y llega a sentir debilidad ante la prueba, más se fortalece y en su gran fe confiesa ”Oye, te ruego, y hablaré; Te preguntaré, y tu me enseñarás. De oídas te había oído; Más ahora mis ojos te ven. Por tanto me aborrezco, Y me arrepiento en polvo y ceniza….”(Job. 42:4-6). Después de la gran prueba, Job es bendecido multiplicando todo lo que antes había tenido, la abundancia y la dicha lo acompañan hasta el final de sus días. ¿Qué esperas tu que suceda en tu vida? ¿Crees que tus penas son una injusticia o acaso has forjado tu propio mal?, Si Dios hoy te hablará y te dijese: “¿Qué has hecho de lo que te entregue el día que llegaste a la vida…..?” ¿Tú que le dirías?, ¿Tendrás el valor de decirle que has corrido en pos de dioses ajenos y los has adorado poniendo tu fe en ellos?, o ¿Acaso podrás decirle que es un Dios sordo que te dejo a tu suerte en manos del enemigo? ¿Qué tantas justificaciones podrías inventar para finalmente reconocer que has sido débil y sobre todo cobarde para reconocer tu error y enfrentar las consecuencias del pecado con valor? ¿Por qué ante ese pecado que te avergüenza cierras los ojos y simplemente te dejas llevar porque consideras que todo esta perdido, que es muy difícil conseguir enmendarte, conseguir el perdón y la misericordia divina? ¿Qué clase de Padre crees tu que es Dios que olvida a sus hijos en el sufrimiento?
Te ruego que abras tu corazón y sueltes las ataduras que te mantienen como barco anclado en alta mar, expuesto a toda clase de tempestades y peligros, y que en este momento extiendas las velas de la fe y la adoración única a Dios para que corras veloz con los vientos de la renovación, de ese renacer en la vida eterna. Renazcamos pues por la fe en la felicidad de una vida libre de ataduras, libre para decidir que por amor seguiremos a Dios, por amor verdadero. Alabemos su nombre y su gloria que no tiene fin, cantemos alabanzas y sintamos renacer la felicidad en nuestras vidas, ninguna pena lo es cuando en el día de la prueba el Padre nos acompaña y nos da la mano. Vivamos confiados porque el mundo es el estrado de sus pies.
Bendito seas por siempre..Señor.