Predicas Cristianas | Estudios Biblicos
2ª Corintios 4:7-8
INTRODUCCIÓN:
Alguien dijo alguna vez, “Para lograr calidad, se necesita tener calidad” Es algo con lo que estoy completamente de acuerdo, pero es necesario que entendamos que la calidad no es originalmente de nosotros sino de Dios a través de nosotros. Pero, ¿qué es Calidad? Conjunto de cualidades o propiedades que constituyen la manera de ser o estar de una persona o cosa. El día de hoy analizaremos sobre la Vida de Calidad que es precisamente, el tipo de vida que Dios desea para sus hijos (Jn.10:10) Yo he venido para que tengan vida y para que la tengan en abundancia. ¿Como es la vida de calidad de acuerdo a las expectativas de Dios en nosotros?
I. UNA VIDA DE CALIDAD ES AQUELLA QUE ES SOMETIDA A PRUEBA (v.8-9)
Recuerdo en un trabajo que tuve existían catadores de vino, los cuales después de varias PRUEBAS que le realizaban al producto emitían un veredicto calificativo, y separaban los vinos con Reserva X o Calidad Exportación. Todos eran de calidad a decir de ellos pero Unos lo eran más que otros y los mejores eran llevados a otros países de acuerdo a sus características. Dios desea que poseamos ese tipo de Calidad.
a) La que es sometida a prueba. (v,8-9) Tribulación… Pero No angustiados En apuros… Pero no desesperados Perseguidos… Pero no desamparados…
b) Solo la que cumple los estándares de calidad requisitados son dignos de ser exportados al reino celestial (Heb.12:10-11) – Disciplina / Sumisión – la Sumisión y disciplina producen Fruto apacible (Un misterio espiritual)
II. UNA VIDA DE CALIDAD ES AQUELLA QUE CONSERVA LA ESTRUCTURA DEL MOLDE INICIAL (V.10-11)
Los estándares de calidad exigen que las piezas sean perfectas y reúnan ciertas características acordes a lo requerido, de tal manera que un pedido se realiza en base a el molde establecido.
a) Imitadores de Dios nuestro Padre. (Efesios 5:1) – Como Hijos amados de Dios – Imitadores de nuestro Padre
b) Imitadores de Cristo (Efesios 5:2) – Amando como Cristo Amó y ama – Como una Ofrenda y Sacrificio a Dios siendo como olor fragante.
c) Siendo de acuerdo a su Imagen, semejantes a El “en todo” (Romanos 8:29) – Su amor – Su paciencia – Su Paz – Su manera de Perdonar – Su compasión – Su capacidad para comprender el sufrimiento humanidad.
III. UNA VIDA DE CALIDAD ES LA QUE CRECE, DEJANDO A DIOS OBRAR, HASTA LLEGAR A LA EXCELENCIA (2ª Corintios 4:7 ) ….( v.7)
Para que la Excelencia del poder de Dios sea de Dios. Muchos piensan que ser excelentes es algo humanamente posible de acuerdo a sus propias fuerzas y afanes. El Escritor M. A. Cornejo en su Libro de Excelencia manifiesta algunos consejos prácticos, (Algunos Útiles y Otros NO tanto, pues excluye a Dios presumiendo que el hombre es su propio dios). Algo que me hace pensar en esto es Los Hoteles y sus estrellas, alguien sabe porque le dan categoría de 2,3,4 ó 5 estrellas? Si efectivamente… Es por la calidad que se va agregando, los lujos y demás de tal manera que uno que tiene alberca, Coffé-break, Shampoo, jabón, toallas etc..lobby bar, Restaurante, y otras cosas. alcanza la categoría más alta. Si los Hoteles requieren cierta calidad para ser considerados excelentes, cuánto más el Hombre que ha de buscar ese grado delante de Dios?
a) Debemos dejar que Dios os perfeccione (1 Ped 5:10) (Nótese dice Dios y no nosotros) – Perfeccione – Afirme – Fortalezca – Establezca … Siendo estrictos en Esto, el que nos llamó es El, entonces porque querer tomar las riendas si hemos comprobado que sin El, al mando, nuestro barco se desvía a la deriva?, Sin El al frente, nuestra vida puede perderse e ir sin rumbo? -….El problema de muchos creyentes es que no hemos comprendido que el dueño, el único capaz de hacernos obtener el rango de Cristianos de 5 estrellas es Dios.
b) Recordemos que El Que comenzó la obra en nosotros la terminará (Filipenses 1:6) – La perfeccionará, nos habla de Un proceso, No que la salvación sea en partes, ni la gracia, pero sí nuestro perfeccionamiento Rumbo a la Excelencia en Cristo, para que la Excelencia del poder de Dios sea de Dios y no de Nosotros.
CONCLUSIÓN:
Hablar de Calidad es hablar de Exigencias, En este mundo tan competitivo donde nos ha tocado vivir,, existen muchos hombres y mujeres que se dicen buenos, que dicen ser salvos por sus obras, hay quien dice muéstrame tu Fe y te muestro mis obras. Usted y Yo sabemos que no es por obras, pero si Cristo esta trabajando en nosotros que tanto hemos avanzado?, Seguimos siendo el mismo edificio de 1 estrella cuando debería de ser tiempo que fuéramos de 5 estrellas?. En fin cada uno dará cuentas a Dios de sus actos, mientras tanto, es mi deber como su pastor terrenal, que todos reflexionemos en esto. La excelencia Cristiana no es igual a la excelencia Humana, Sin embargo por nuestros méritos jamás podremos alcanzarla, es necesario dejar a Dios Obrar, y su poder se perfeccionará en nuestras debilidades. Si deseamos ser calidad exportación con destino al cielo, dejémosle Obrar.
Fuego y azufre cayó de los cielos, destruyendo las ciudades y a sus moradores; las llanuras y todo aquello bueno y hermoso que produce la tierra. En este juicio, el Eterno una vez más, vuelve a desatar su ira sobre un “mundo” atestado de maldad; de hombres que cometían actos vergonzosos, contaminando sus propios cuerpos, mudando el uso natural contra naturaleza (Romanos 1:24-27). Solo tres almas justas se lograron salvar, ya que aun la mujer de Lot, por haber mirado hacia la ciudad; cosa que no debió haber hecho (Génesis 19:17), se convirtió en estatua de sal; también murió. También los yernos de Lot se pudieron haber salvado, solo que por incrédulos, no lo lograron: pues no creyeron a la palabra de Lot (verso 14).
Los habitantes de Sodoma fueron y son los responsables de la existencia, de toda la depravación sexual que hoy en nuestros días conocemos: el “homosexualismo”. A este género pecaminoso, la biblia lo identifica como “sodomía” (Deuteronomio 23:17), y es un pecado que tiene que ver con todo lo relacionado a la sexualidad; tanto de los seres humanos, como a la de los animales. Técnicamente, por esta razón, el Eterno hizo juicio sobre estas cuatro naciones, aunque es posible que hayan sido mas de cuatro ciudades las que redujo el Señor a cenizas (Deuteronomio 29:23). No obstante, lo que si podemos asegurar es, que el castigo que sobre vino a Sodoma, Gomorra, Adma y Zeboim, queda como ejemplo, para todos aquellos que han de vivir, sin temor y sin reverencia delante de Jehová 2ª Pedro 2:6: y para que por medio de este juicio, toda la humanidad reconozca el poder, y la ira del Todopoderoso; y pueda por medio de esta experiencia, volverse de su mal camino, olvidando toda maldad; dejando todo el pecado.
JUICIO CONTRA ISRAEL
Éxodo 19:3-6; Levítico 26:21. Después de la cautividad de Egipto: Israel libre y soberano, fue conducido del Eterno al Monte Sinaí para recibir su ley y ser regidos por medio de ella. Allí el Señor le dijo, que si andaba en sus decretos y guardaba sus mandamientos y los pusiere por obra: seria su especial tesoro, y que derramaría sobre ellos y sobre todo lo que poseyera todas sus bendiciones: pero también le dijo; que, si no los ponía en práctica y los abominaba, invalidando su pacto: traería sus juicios sobre ellos; hasta una entera consumación (Levítico 26).
No paso mucho tiempo para que Israel se olvidara de las instrucciones del Eterno, pues a los pocos días estaba haciéndose un ídolo: un becerro de oro Éxodo 32:7-9. En ese momento, el Señor pensó hacer juicio, destruyendo a todo su pueblo Israel, pero por la súplica hecha por Moisés, el Eterno detuvo su mano de hacerlo (verso 10-14). No obstante, a causa de aquella maldad, aquel día, murieron como tres mil (3000) hombres, los cuales cayeron bajo la espada de los levitas (verso 27-28). ¿Acaso fueron los únicos que estaban adorando al becerro de oro? No, pero fueron los únicos que no se arrepintieron de su pecado.
Otros juicios que el Eterno ejecutó sobre Israel, fue por haber ofrecido incienso extraño y por murmurar. El castigo fue tan grande, que en una ocasión, murieron más de 14,000 almas, sin contar los que murieron por la rebelión de Coré Números 16:49-50. En otra ocasión, el Eterno uso de serpientes venenosas, cuya mordedura mato a muchos de los judíos rebeldes. Todos, estos castigos vinieron sobre Israel, no por ser idolatra, sino por haber murmurado y por haber hablado mal del Señor y de su siervo Moisés Números 21:4-6.
La fornicación es otro de los pecados que el Eterno aborrece, y por este pecado, una vez más Israel vuelva a sentir la ira de Jehová Números 25:1-9. Aunque en esta ocasión, también el pecado consistió en la idolatría, ya que las mujeres moabitas movieron a los varones de Israel a sacrificar a sus dioses. De manera que, la rebelión, la idolatría la murmuración, y la fornicación y otros pecados, fueron la causa de todos los sufrimientos de Israel, por los juicios de Jehová.
Pero sin duda alguna, el peor juicio que pudieron haber recibido todos los repatriados de Egipto, fue, que no hayan entrado a la tierra prometida Números 14:27-35. El Señor ya estaba cansado de las quejas, de las murmuraciones y de todos los pecados de su pueblo, al grado que ya no los soporto mas. A pesar de todo, el castigo al que fueron conminados los hijos de Israel, no les quito la vida en ese mismo instante, sino que les dio cuarenta años todavía, hasta que no quedara con vida, ninguno de aquellos que se rebelaron por haber murmurado.
El Eterno siempre cumple su palabra. A Israel le dijo que si no ponía en práctica sus mandamientos y los invalidaba, el también los haría sufrir por ello. El Señor amó mucho a Israel, pero no podía permitir que ese amor lo cegara. Por eso, el Eterno con todo y su dolor tuvo que castigarlos, aunque por amor de los justos no los destruyo del todo; además, porque él mismo es un ser paciente: “…lento para la ira, y grande en misericordia” Salmos 103:8.
Jeremías 25:1-11; Ezequiel 33:29. El Eterno es un ser que no se aíra tan fácilmente sobre el pecador (Salmos 86:15), sino que a todos les da un tiempo para que se arrepientan. Y así como a las naciones les dio una oportunidad; un tiempo: así también lo hizo con su pueblo, dándoles la oportunidad de que se arrepintieran. Todavía en los días de Isaías (siglo VIII), el Eterno decía a un pueblo cargado de maldad: “¿Para qué habéis de ser castigados aun? Todavía os rebelareis…” Isaías 1:5.
Fue en los días de Moisés, cuando el Eterno le comunico a Israel: que si no oía su voz y abominaba sus decretos, y no guardaba sus mandamientos menospreciando, e invalidando así su pacto: Él traería muchos males sobre ellos, hasta que fuesen consumidos todos los hombres de todas las ciudades de Israel a causa de su pecado (Deuteronomio 28:45-58). El profeta así como Israel, sabían lo que sobrevendría sobre ellos, sino se sometían a los mandamientos del Todopoderoso.
Según la lectura bíblica, unos años antes de que Israelfuese llevado cautivo a Babilonia, el profeta Jeremías madrugaba diciendo, a Israel: que dejaran todo el pecado, porque si no, el Eterno traería gentes de otros lugares, para ser destruidos. Además, les recordó que el Eterno no tan solo por medio de él, les ha comunicado esto: sino también por medio de todos sus santos profetas que a él le antecedieron (verso, 3-4). No obstante, Israel nunca inclino su oído para escuchar las palabras del Todopoderoso, recibiendo así el juicio del Eterno: un castigo jamás visto entre los hijos de Israel: pues fueron malditos por Jehová, por setenta años (verso 11).
El Eterno, por más de siete centurias, soporto los pecados de su pueblo Israel. La desobediencia, la fornicación, el cohecho, la infamia, la idolatría y otros muchos pecados, saturaron la paciencia de Jehová. Según Isaías (1:4,6), Israel era un pueblo lleno de maldad; era una generación de malignos, e hijos depravados: que nada ileso había en él, sino que “…desde la planta del pie hasta la cabeza, todo era una herida: una hinchazón y podrida llaga,…” cuyos pecados, fueron motivo del juicio en los 70 años de cautiverio Jeremías 30:15.
Durante 70 años Israel no gozo de los sábados, ni de las solemnidades del Eterno. La alegría se torno en tristeza, y la honra en vergüenza. El olor que antes había sido muy agradable en ellos por los perfumes aromáticos, ya no los tendrían más, sino ahora solo hediondez (comparar con Isaías 3:16-24). Todo lo bello, y todo lo hermoso que había sido Israel, ahora estaba puesto en muladar Lamentaciones 4:5.
CONCLUSION:
En este juicio que hizo el Eterno contra Israel, lo sometió a los más crueles de los castigos. Sus mujeres fueron violadas, sus niños estrellados a causa del hambre, “…la piel de ellos se pegaba a sus huesos,… y las manos de las mujeres piadosas cosieron a sus hijos; fuéronles comida en el quebrantamiento de la hija de mi pueblo” Lamentaciones 4:8-10.
Nunca en la historia del mundo se ha visto jamás, que un pueblo haya padecido tanto como el pueblo Israel; aunque todo esto fue por causa del pecado: pues el señor le había dicho: “Y si anduviereis conmigo en oposición, y no me quisiereis oír, yo añadiré sobre vosotros siete veces más plagas según vuestros pecados”. Levítico 26:21.