Biblia

CRISTIANOS ESPIRITUALES CARNALES

CRISTIANOS ESPIRITUALES CARNALES

La iglesia que estaba en Corinto, cayeron en una forma de vivir la vida cristiana, más carnal que espiritual. Pablo les exhortaba continuamente que se apartaran de ciertas prácticas pecaminosas.

Los pecados que practicaban muchos de ellos no les impedían que por sus manos se hicieran ciertos milagros poderosos, pero ellos mismos no agradaban a Dios con sus vidas.

Muchos cristianos tienen que descubrir lo que Dios les pide por medio de problemas y crisis muy fuertes.

Cuando insistimos en pecar y no escuchamos la voz de Dios, Él no nos pasará por alto esta actitud.

Delante de los grandes debemos aprender a guardar silencio.

La soberbia ciega los ojos de los hombres para que no vean a Dios. La mayoría de los creyentes son espirituales-carnales y deberían ser espirituales-sobrenaturales.

Dice el apóstol Juan que nuestra mejor medida para saber nuestro estado, es nuestro corazón.
Nuestro corazón nos da testimonio de lo que hacemos o dejamos de hacer.

Por la ley era tan difícil cumplir con la obediencia a Dios que solo Cristo pudo cumplir la obediencia perfecta al Padre.

Con mente humana es imposible digerir lo que de Dios nos viene. Somos vestidos de nuestro hombre interior por medio de las transformaciones que vivimos en el caminar con Cristo.

Muchos no pueden entender que teniendo conocimiento, obras que sorprenden a muchos, dones que obran a través de sus manos, sean personas que Dios no reconoce.

Vida nueva es la vida de Cristo, en nuestro espíritu. La vida vieja es todo lo que hacíamos antes de ser revestidos de su naturaleza.

El creyente maduro que vive en lo sobrenatural, es siempre elegante. Pues discierne que ante su Dios deben estar sus ropas purificadas.

Donde no hay santidad, pero hay religiosidad, todo lo que se dice y se oye suena a ofensa y castigo.

El Espíritu Santo es elegante y se mueve dentro de la belleza de las escrituras.

Donde hay soberbia no hay elegancia y abunda la maldad. Ninguna religión salva a nadie.
Todos están reconociendo mundialmente que Jesús es el único Camino.

La espiritualidad viene cuando dejamos la naturaleza vieja atrás y nos inundamos de la Presencia de Dios.

En lo natural un miembro de un equipo de futbol, puede ser que gane un partido, pero para ganar un campeonato se necesita un equipo entero. En la congregación el Pastor puede vencer una batalla pero para ganar una guerra en nuestra ciudad, se necesita una iglesia entera que interceda.

La salvación de los creyentes naturales les viene de su conocimiento, de sus prácticas religiosas etc. Pero la salvación de los espirituales les viene de lo alto.

Pensar en las cosas de la carne, significa pensar en las cosas de la vida vieja.

Romanos 8:1

8:1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

Dios es el único capacitado para humillar a los que proceden con soberbia.

Daniel tenía ciencia, sabiduría y gracia. Era un ejemplo de ser espiritual-sobrenatural.

El rey David, el error que cometió fue dejar de alabar a Jehová. Pasó de ser un cantor y adorador a ser un hombre de guerra. La guerra y los tesoros que conquistó le enturbiaron su visión de Jesús.
La elegancia viene cuando desterramos la soberbia de nosotros.

“La venida de Jesús es un regalo para los que aman al Señor con intensidad”.