LOS TIEMPOS DIFICILES EN QUE VIVIMOS
No podemos hacernos dueños de ningún ministerio, pues son de Dios. Muchos se cuidan y miman a sí mismos; y cada vez que
Dios quiere fortalecerte podrás pasar por presiones y dificultades pero no pienses que es para destruirte, sino para hacerte más
fuerte.
Desecha la auto lástima porque eso te hará ver más cosas de los que verdaderamente hay. Desecha las simplezas y se fuerte,
levántate y esfuérzate.
A nadie le saldrá bien todo lo que haga para huir de la presencia de Dios. No hay vejez ni tercera edad para el espíritu. Los siervos
de Dios no tienen retiro. Dios va a cumplir toda su palabra sea buena para ti o no.
1ª Timoteo 1:19
La iglesia de Cristo no pertenece al mundo. No se puede jugar con la palabra de Dios. Mantengamos la fe y la buena conciencia,
desechando todo lo demás. No sea que naufraguemos por la fe de algunos.
Dios ha puesto al siervo para corregir lo deficiente de la iglesia. Estamos viviendo en el mundo entero la última apostasía.
2ª Timoteo 4:4
y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas. No somos hijos de la ira, por ello no estaremos en lo más difícil de la
Gran Tribulación.
La hechicería, la homosexualidad, cuando se extiende cada vez más, reconoced que son los últimos tiempos.
Ahora estamos en el tiempo de la gracia por eso busca a Dios primero que todas las cosas. Somos salvos por la gracia, la gracia y
el Espíritu serán quitados de la tierra cuando la iglesia sea arrebatada. Necesitamos más que nunca recoger aceite, y llevar
nuestras lámparas llenas de aceite. No pertenecemos a este mundo. Somos a hechura de Cristo. Cristo viene pronto hemos de
estar preparados. Mira que no te pille sin aceite. Se luz para que puedas marchar con Cristo. Cristo viene a por sí mismo “ a por la
iglesia que ha alcanzado la plenitud en Jesús”.
No os dejéis llevar fácilmente de vuestra forma de pensar, porque será en un abrir y cerrar de ojos, la partida con Jesús. Será como
en los días de Noé, Dios quiere que hagamos todo lo que Él quiere, no lo que nos apetezca a nosotros.