Biblia

Aférrese a la verdad

Aférrese a la verdad

Es muy posible que muchos de los que leen estas palabras estén siendo actualmente víctimas de las falsas acusaciones de alguien. Eso puede ser una angustiosa cruz y muy difícil de llevar. Yo sé lo que es eso, por mi amarga experiencia. Puesto que esto es un asunto que siempre estará presente para muchos de nosotros, sería útil describir ciertas pautas a seguir, basadas en la manera como Job se enfrentó a sus acusadores.

Escuche lo que están diciendo de usted y considere el carácter de su crítico. ¡Mantenga la calma! Sentirá la tentación de precipitarse y de reaccionar imprudentemente en la carne, diciendo cosas que después lamentará. Procure escuchar lo que están diciendo. Y mientras lo hace, recuerde el carácter de la persona de quien ha surgido la acusación. Escuche todo con calma. Job hizo eso, lo cual lo preparó para responder después.

Responda con hechos ciertos e información precisa, conociendo la naturaleza de su acusador. ¡Diga la verdad! Aférrese a lo cierto, cueste lo que cueste. Es posible que la otra persona haya sido su esposa o esposo. Pudiera ser su jefe anterior o actual, un empleado, un vecino, un pastor o un amigo. No importa quién sea la persona. Si usted está siendo acusado, tiene que concentrarse sólo en los hechos. No reaccione ni piense en la manera de tomar la revancha. Si usted cede a la tentación, terminará pareciéndose a su acusador. Dios honra la integridad. Quizás no de inmediato, pero finalmente usted será reivindicado. Recuerde la oración de David: “Hazme justicia, oh SEÑOR, porque yo en mi integridad he andado” (Salmo 26:1). La verdad prevalecerá entre las personas que se ocupan de ella, y toman sus decisiones basadas en ella.

Una vez le dijeron a Abraham Lincoln que tenía que despedir a su director general de correos. Al hombre lo acusaban de todo. Lincoln sospeso los rumores con las evidencias, y el 18 de julio de 1864 le escribió al Secretario una carta diciéndole que no iba a hacerlo, porque la información estaba basada en rumores, no en hechos ciertos. En esa carta, Lincoln termina diciendo correctamente: “La verdad es generalmente la mejor reivindicación contra la difamación.» Una sabia respuesta.

Aférrese a la verdad. No la exagere, no la niegue y no vacile en decirla.

La verdad es generalmente la mejor reivindicación contra la difamación.—Charles R. Swindoll

Tomado del libro Buenos Días con Buenos Amigos (El Paso: Editorial Mundo Hispano, 2007). Con permiso de la Editorial Mundo Hispano (www.editorialmundohispano.org). Copyright © 2010 por Charles R. Swindoll Inc. Reservados mundialmente todos los derechos.