Cómo papá conoció a mamá
por No Aplica
Seguramente usted siempre pensó que el aniversario de casamiento era algo únicamente para adultos; la noche para llevar los niños a los abuelos y salir con su cónyuge. No hay nada malo en esto y mucho de riqueza para el matrimonio, pero al mismo tiempo, a los niños les interesa saber cómo comenzó todo. Y necesitan ejemplos positivos de cómo se encuentra la pareja para el resto de la vida.
Seguramente usted siempre pensó que el aniversario de casamiento era algo únicamente para adultos; la noche para llevar los niños a los abuelos y salir con su cónyuge.
No hay nada malo en esto y mucho de riqueza para el matrimonio, pero al mismo tiempo, a los niños les interesa saber cómo comenzó todo. Y necesitan ejemplos positivos de cómo se encuentra la pareja para el resto de la vida.
Seguramente, lo que ocurrió con ustedes es mejor ejemplo de lo que ellos pueden ver en la televisión o en las revistas de hoy en día.
Así que, en la noche en familia más cercana al aniversario, mi sugerencia es que tengan una cena «especial» en familia. Además, no sólo es el aniversario del matrimonio sino de la familia toda.
Durante la cena, cuenten cómo se conocieron, en qué interesantes circunstancias, qué creía el uno del otro al comienzo, los altos y bajos del noviazgo, qué pensaban de los posibles suegros y cómo se fueron dando cuenta (si estaban escuchando a Dios en aquellos días) que esta era la persona a quién Dios había elegido para ti. Si no eran creyentes en esos tiempos o estaban en desobediencia, confiesen y muestren cómo Dios obró a pesar de esto.
Dejen que sus hijos vean cómo se emocionan al recordar esos meses y años tan especiales. Describan su compromiso. Muestren las fotos del casamiento y cualquier cosa que aún conserven.
Pueden mencionar que Dios llama a algunas personas a ser solteras, y que esto está bien. El apóstol Pablo, lo recomendó para aquellos que querían dedicarse totalmente a la obra del Señor (ver 1 Cor. 7.29-35).
Por otro lado, seguramente sus hijos se casarán. Díganles que en este momento, en algún lugar del mundo, hay un niño, o niña, más o menos de su edad, que el Señor tiene en mente para ser su marido o esposa. Y que si se mantienen cerca de Jesús, cuando fuere el tiempo, Él los guiará hacia esa persona como lo hizo con ustedes.
En alguna ocasión sería tal vez bueno que tomaran tiempo para orar por esos futuros esposos desconocidos, por su educación, protección, su caminar con Cristo y su madurez. De esta manera estarán formando una idea del futuro y una dependencia de Dios sobre la formación de la pareja. También estarán dando una alternativa a los mensajes engañosos del cine y televisión acerca del amor y del matrimonio.
Lecturas recomendadas: Sal. 37.4 y Prov. 3.5, 6
Los temas de Apuntes Pastorales. Volumen 1, número 3. Todos los derechos reservados