Bosquejos Biblicos – Bosquejos para Predicar
Salmos 68:18-19; Mateo 12:38-42
Las señales, todos buscamos señales, queremos señales en el cielo, en la tierra, para confirmar y para confirmar la confirmación, así es el ser humano, y en los judíos no fue la excepción, le empezaron a decir:
Mateo 12:38 “entonces respondieron algunos de los escribas y de los fariseos, diciendo: Maestro, deseamos ver de ti señal.
Que más señal querían les hablaba con autoridad, levantaba muertos, convirtió el agua en vino, multiplico los peces y los panes, que más señal querían, pero el Señor les contesta que no tendrían señal.
Mateo 12:39 El les respondió y les dijo: la generación mala y adultera demanda señal pero señal no les será dada, sino la señal del profeta Jonás.
v. 40 Porque como estuvo Jonás en el vientre del gran pez tres días y tres noches, así estará el hijo del Hombre en el corazón de la tierra tres días y tres noches
Él hablaba claramente de la señal mas importante que iban a recibir, y que tenían que estar apercibidos, ellos conocían la historia de Jonás, miles de veces la habían compartido, tal vez lloraban al leer la oración de Jonás, pero no era solo un cuento, tenían que vivirla, era la GRAN SEÑAL que se les estaba dando…. Tú que estas pidiendo señal, déjame decirte que la SEÑAL MAS GRANDE se llama JESÚS.
Se quedaron sin entender, sus sentidos estaba entenebrecidos como dice la palabra, en Marcos 4:12 para que VIENDO, VEAN PERO NO PERCIBAN, Y OYENDO, OIGAN PERO NO ENTIENDAN, NO SEA QUE SE CONVIERTAN Y SEAN PERDONADOS
Cuando Jesús murió, recordaron las palabras del Señor, y fueron a decir que iban sus discípulos a robarse el cuerpo y enviaron a custodiar la tumba (mateo 27:62-66) una guardia completa pusieron, pero nada de eso iba a impedir que se cumpliera al pie de la letra lo que el Señor declaro.
Querían una señal… Dios les estaba dando la señal, Jesús estaba descendiendo a los infiernos…
Que descendió??? Su cuerpo estaba en la tumba… su espíritu se lo había entregado al padre… su alma descendió al infierno… y a que descendió???
Imagino al ir bajando al centro de la tierra, como se empezaron a estremecer el infierno, como los demonios daban aullidos de pavor al ver al ser, que hacia apenas unas horas habían matado, habían celebrado que mataron al hijo de Dios, aquel que había revolucionado la tierra estaba ahora de “visita” en el infierno, muchos demonios se preguntarían, va a ser nuestro preso o que? Pero al llegar, al lugar en donde estaba Satanás, este se arrodilla, la Biblia dice que ante el Nombre de Jesús se dobla toda rodilla, de los cielos, de la tierra y aun debajo de la tierra y toda lengua confesara que Jesucristo es el Señor Filipenses 2:10-11
Satanás se arrodillo, los demonios se arrodillaron, ellos conocían al hijo de Dios, ellos habían sido parte de las huestes celestiales, ellos reconocían la autoridad del hijo de Dios.
Satanás por miles de años se llevaba a la gente al infierno, solo los que Dios elegía como justos se los llevaba al seno de Abraham, y Satanás tenia el Seol repleto de almas, gentiles y judíos, según el tenia el dominio total, no había dones, no había ministerios, todo el lo tenia, la humanidad no merecía nada, era una humanidad pecadora, se mofaba al subir al cielo y decirle al padre lo que pasaba, toda la gente hacia lo que el decía, el era el príncipe del mundo… pero ante su cara en sus dominios estaba el Rey de Reyes y señor de Señores… estaba arrebatándole todo lo que el consideraba suyo, los dones, los talentos, los ministerios, la misma autoridad que el se había adjudicado, era ahora arrebatada porque ya había alguien que redimió, ya había alguien que pago el precio por el pecado, ya habían pagado el precio!!!!! Ahora ya la humanidad estaba libre de la condenación eterna, solo tenían que lavar sus vestidos, quitarse la inmundicia.
Vemos con gozo el trabajo completo de nuestro Señor Jesucristo, no había nada que pudiera impedir, ni la guarda, ni la tierra, ni el sepulcro, ni los demonios, ni los ángeles, ni los principados ni las potestades ni las huestes, ni los escribas, ni los fariseos, nadie podía impedir la labor que el padre le había encomendado a su Hijo… con Dios estamos en victoria a través de su hijo amado Jesucristo..
Oremos