Predicas Cristianas | Sermones Cristianos
“Y se decían el uno al otro: ¿No ardía nuestro corazón en nosotros cuando nos hablaba en el camino y nos abría las Escrituras? En la misma hora se levantaron y se volvieron a Jerusalén.” Lucas 24:32
Introducción
Esta hermosa historia de los albores del cristianismo se ha conservado en la mente y en el corazón de millones de creyentes y deberíamos conservar cada detalle porque guarda poderosas enseñanzas para todos los que al igual que esos dos viajeros de Emaús, sentimos que llega a nuestra vida el peso del desaliento.
El cuadro que pinta Lucas es impresionante: En medio de los dos discípulos se incrusta ese extranjero y entonces la charla gira entorno a lo que ha sucedido en esos días. Vemos los tres el entrar en la casa, y al sentarse para cenar, a la hora de partir el pan, entonces los ojos de los dos discípulos se abren; reconocen que su compañero del camino es Cristo, y en el mismo momento, ante ese reconocimiento, se levantan y regresan a Jerusalén a pesar de lo avanzado del día.
¿Qué LES HACE ACTUAR DE UNA MANERA TAN IRREFLEXIVA Y POCO COMÚN? El fuego que está quemando sus corazones, La energía que se desprende de un corazón ardiendo, es el amor apasionado, y es la MAYOR FUENTE DE PODER (+ E Atómica) capaz de influenciar y expandir por todo el mundo nuevos ideales y provocar en las naciones un cambio de la conducta, eso es posible como resultado del fuego que emana del corazón.
Solo dos ejemplos, uno más lejano y positivo que el otro: La pasión de Madre Teresa por los pobres de la India y la PASIÓN POR UN BALÓN DE FÚTBOL
Una marca distintiva de cristianismo en sus días más tempranos ha sido la manera extraordinaria de la cual el Evangelio alcanzó a los hombres en su generación, lo que mas nos impresiona en los Hechos de los Apóstoles no es el heroísmo ni el recurso de los primeros predicadores, sino el fuego apasionado que los impulsaba, Esteban frente a sus detractores, Pedro ante el Sanedrín, Pablo ante el rey Agripa, de ellos se desprende un ardor que brilla intensamente, mas que una filosofía moral, o la iluminación del intelecto lo que esos hombres transmitían en el Evangelio era un toque que hacía arder el corazón.
Vemos esta característica distintiva del Evangelio con más claridad y entendamos: Cual es el secreto para tener un corazón ardiente
1. Cristo, con su amor y sacrificio, encendió ese fuego, el mismo lo declaró en Lc. 12:49 “Yo he venido para encender fuego en el mundo. ¡Y cómo me gustaría que ya estuviera ardiendo! En todo lo que nuestro Señor hizo estuvo presente SU PASIÓN, no solo en los días de la Semana Mayor, al enseñar, al sanar, incluso al reprender a sus adversarios, fue evidente ese apasionado fuego que brotaba de su corazón, y que motivó mayor que la salvación de las almas, y esto es el reflejo del AMOR APASIONADO DEL PADRE: PORQUE DE TAL MANERA AMÓ DIOS AL MUNDO QUE HA DADO A SU HIJO para que nadie se pierda
2. Era el contacto inmediato con el señor Jesús Cristo que hizo que sus corazones ardan mientras que viajaron a Emaús. El ardor de la cristiandad, su vida y su entusiasmo, sus esfuerzos incontables, sus convicciones se arraigan, no en cualquier credo, pero en la presencia inmediata de un Cristo vivo. Aun nuestra aceptación de la Obra
Salvadora de Jesús, solo de esa manera Aprendemos:
1. Que él murió para que seamos perdonados, y que hay perdón para nuestro peor pecado en esta misma hora.
2. Que para cada batalla tendremos equipo nuevo, y para cada tentación la fuerza necesaria, y nada será demasiado difícil de intentar, y nada será demasiado doloroso de llevar si el consuelo procede de la convicción de los dos que van a Emaús, “¿No ardía nuestro corazón en nosotros cuando nos hablaba en el camino”.
3. La clave del Secreto. En la primera aparición de Jesús a sus discípulos, incluyendo los dos de Emaús, encontramos una sorprendente revelación, LEAMOS 24:36-45 Al verlo estaban, ATERRORIZADOS Y ASOMBRADOS, TURBADOS, era tal su asombro que NI CON LA EVIDENCIA FÍSICA DE SUS MANOS Y PIES TRASPASADOS PODÍAN CREER. Éste es el PRIMER SECRETO que quema el corazón-nada ESPECTACULAR, MISTERIOSO NUEVO O ALARMANTE O REVOLUCIONARIO, El verdadero prodigio se dio cuando Cristo 45 LES ABRIÓ EL ENTENDIMIENTO PARA QUE COMPRENDIESEN LAS ESCRITURAS, Aun los dos que estaban en Emaús lo reconocieron por lo mismo, ellos explican el fuego de sus corazones así: 32 Y se decían el uno al otro: “¿No ardía nuestro corazón en nosotros cuando nos hablaba en el camino y nos abría las Escrituras?”
ELLOS eran judíos, y habían leído profundamente cada libro de la Torá. Cuando eran pequeños niños en sus hogares de la aldea, de rodillas alrededor de su padre en el Sabbath, y habían escuchado las historias de Moisés y de David y Daniel con la impaciencia que nuestra propia gente joven exhibe. Habían estudiado a Jeremías más atento que cualquiera de nosotros, y habían oído las exposiciones en la sinagoga. La Escritura era un libro familiar a ellos. Él tomó el libro que habían estudiado todas sus vidas. Él dio vuelta a las páginas que sabían tan bien. Él los condujo por los viejos textos familiares, PERSONALIZÓ EL TEXTO Y DE EL BROTÓ tal abundancia del AMOR, y de él irradió el MISTERIO PROFÉTICO y así iluminó su oscuridad con su luz, Cuando el texto cobra esa vida, cuando sientes que SE ABRE TU ENTENDIMIENTO Y ESE PASAJE ES PARA TI ENTONCES, tu corazón de hielo se empieza a entibiar y se derrite y pronto un fuego lo hace arder apasionadamente desbordándote de amor: A Dios, a tu prójimo, a ti mismo. Es un toque de gloria que alcanza todo lo que es absolutamente familiar
4. Solo a partir del día de Pentecostés, ese fuego se extendió a sus discípulos, simbólicamente se describe sobre ellos lenguas de fuego, que era un eco de nuestro texto, “¿no ardía un fuego que quemaba el corazón dentro de nosotros?” A partir de ahí se extendió como fuego en un pastizal, comenzando en libro de los Hechos los hombres reconocieron a su hermano en las calles, y el resplandor de esa gloria llegó a los cielos donde hay fiesta por cada alma rescatada.
Ese es el Evangelio de Cristo Jesús que lo ha hecho, ¿Por qué hay hombres que están trabajando en zonas de guerra a costa de sus vidas para predicarlo? ¿Por qué nuestras hermanas están predicando en el corazón de la India, y están viviendo y están sufriendo en África central? ¿Por qué hombres resueltos están despreciando su propia base de seguridad y aferrándose a todo lo que es puro y todo el que es noble? Pregúnteles y dirán, “Cristo ha muerto por mí y con gusto doy mi vida por Él Si nuestro señor está conquistando al mundo y si su Evangelio va a ser un Evangelio universal, es porque él ha tocado ese resorte en la vida humana incendiándolos con su PASIÓN. No hay motivo como el amor de Cristo en el mundo. Ése es el secreto del corazón ardiente, y con el corazón ardiente uno puede hacer cualquier cosa
Conclusión
Dos hombres deprimidos regresaron con el corazón marchito a Emaús, Jesús llegó y prendió fuego en su corazón.
Once hombres temerosos, escondidos y con la esperanza muerta, Jesús llegó y prendió fuego en su corazón.
Ciento veinte orando unánimes, el Espíritu Santo llegó y prendió fuego en su corazón.
Esta mañana Jesús está aquí y quiere tocar y prender nuestro corazón, solo tenemos Lc. 24.29-30.
Ministerio: Centro Cristiano de Renovación, Compañerismo y Compasión
Sí, tenemos la esperanza segura de la vida eterna en el cielo…pero a veces todavía nos quedamos confusos en cuanto a los problemas de este mundo ¿verdad? “Sé que tengo la vida eterna, pero todavía no entiendo por qué pasan todos estos problemas en mi vida.” Y vemos en el texto que los dos discípulos de Emaús, así como nosotros, fueron hombres débiles, y se quedaban confusos…y por eso apareció Cristo, para quitar toda confusión…
II. Nuestro Señor resucitado quita toda confusión.
Antes que todo, Cristo les regañó, ¿verdad? Les dijo: ¡Qué torpes son Ustedes, y qué tardos de corazón para creer todo lo que han dicho los profetas! ¿Acaso no tenía que sufrir el Cristo estas cosas antes de entrar en su gloria? Pues, la verdad es que estos discípulos debían haber sabido. Ellos habían estudiado Moisés y los profetas los cuales profetizaron muy claramente de lo que iba a hacer el Mesías. El profeta Isaías 700 años antes de Cristo escribió en cuanto al sufrimiento y muerte de Cristo: Despreciado y rechazado por los hombres, varón de dolores, hecho para el sufrimiento…Maltratado y humillado…como cordero fue llevado al matadero…y él murió entre los malhechores. Debían haber sabido que iba a morir. Y Job más que mil años antes de Cristo, predijo su resurrección al decir: Yo sé que mi redentor vive, y que al final triunfará sobre la muerte.
Y entonces, Cristo en su misericordia y paciencia divina, explicó otra vez todo lo que dice el Antiguo Testamento en cuanto a él. Les mostró que todo esto aconteció según el plan y la sabiduría de Dios. Y por medio de la Santa Palabra de Dios, Jesús quitó toda confusión…pues casi podemos ver el foco prender sobre sus cabezas ¿verdad? “Aaaah, ya entiendo!” Pues, después de que se abrieron sus ojos cuando estaban en la mesa con Cristo, se decían el uno al otro: ¿No ardía nuestro corazón mientras que conversaba con nosotros en el camino y nos explicaba las Escrituras?
Y fíjense que esto es lo que hace Cristo para con nosotros también. Por medio de las Sagradas Escrituras, o sea, la Biblia, quita toda confusión. Porque en esta Palabra vemos que todos nosotros somos pecadores condenados a la muerte eterna, pero que Dios en su misericordia prometió a un Mesías, un Salvador de los pecados. Y en el momento justo, Cristo, el Hijo de Dios, vino a este mundo para cumplir con esta promesa. De su buena voluntad, Cristo se sometió al castigo que nosotros merecemos, y en nuestro lugar sufrió los golpes de los soldados, los azotes, los clavos de la cruz, y aún más duro, sufrió el infierno por todos nuestros pecados. Pero tres días después Cristo resucitó de entre los muertos, confirmando nuestra esperanza de la vida eterna. La Biblia lo dice muy claramente: la salvación es nuestra por medio de la fe en Cristo Jesús. No hay confusión.
Pero ¿qué tal los problemas de este mundo? Pues, la Biblia habla de esto también. Dice que Cristo, nuestro Señor resucitado, tiene todo dominio sobre todo (aún sobre el diablo y la muerte). Y dice también que Cristo sabe todo de lo que está pasando en nuestra vida y de lo que nos espera en el futuro. Pues, podemos decir que Cristo es el verdadero “sabelotodo,” pero en el buen sentido, porque él sí sabe todo. Y dado que tiene todo poder, que sabe todo, y que nos ama tanto que dio su propia vida por nosotros…bueno, podemos confiar en lo que dice en Romanos 8:28.
Sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman, los que han sido llamados de acuerdo con su propósito. A veces lo que sufrimos aquí en este mundo es un prueba para fortalecer nuestra fe o la fe de otros, y Dios aún a veces nos permite ver en misericordia como los problemas sirven para nuestro bien. Mi mamá es un muy buen ejemplo. Hace unos años supimos que mi mamá tenía cáncer del pecho. Era muy difícil para toda mi familia…no podíamos entender por qué. Pero gracias a Dios mi mamá se recuperó y después ella empezó de ayudar a otras mujeres en la comunidad que se contrajeron el cáncer. Las apoyaba, les explicaba lo que estaba pasando, y más que todo les dio el consuelo del evangelio. Y hace un poco más de un año una de estas mujeres falleció, pero dado que mi mamá tenía cáncer, esta Señora escuchó la buenas nuevas que es el evangelio y ahora está en el cielo. Todo…todo lo que pasa en este mundo es para nuestro bien, aunque a veces no vamos a entender cómo hasta que lleguemos en el cielo. No tenemos que estar en la oscuridad de confusión…porque sabemos porque acontecen los problemas, tal vez no específicamente, pero sabemos que es para nuestro bien. Mejor que lo dejemos todo en las manos de Dios ¿verdad? Y entonces, ¿cómo nos vamos a reaccionar ante estas noticias tan buenas? Tenemos un muy buen ejemplo en los dos discípulos de Emaús. Después de que se abrieron sus ojos y reconocieron a Cristo, regresaron inmediatamente a Jerusalén. No dijeron, “Bueno, mañana,” sino en la misma recorrieron rápidamente los once kilómetros para decirles a los demás lo que había pasado. “Es cierto, Cristo ha resucitado.”
Y entonces, ¿cómo te vas a reaccionar tú ante estas noticias? “Bueno, mañana. Después. Luego.” Espero que reacciones con gozo por todo lo que ha hecho Dios por ti. Yo sé que siempre les digo que comparten estas cosas con los demás ¿verdad? Y también sé que muchas veces es difícil para Ustedes saber que decir a sus amigos y familiares. Y entonces, dinos a nosotros los pastores. Pastor Getka, Ben, Ryan, o yo—uno de nosotros puede acompañarte con unos amigos o amigas, con tu mamá, o con quien sea, para hablar con ellos. Lo importante es que escuchen este mensaje tan importante ¿verdad? Y si tienes ganas de aprender mejor como hablar de tu fe, pues dinos también. Porque no es tan difícil, podemos sentarnos para practicar y para ver lo que dice la Biblia. Nosotros los pastores estamos aquí para servirles a Ustedes y a todos con la Palabra de Dios.
Porque todos nosotros aquí tenemos la esperanza segura del cielo. Y tenemos esta seguridad por medio de nuestro Señor resucitado el cual ganó los cielos por nosotros. Por medio de su Palabra, Cristo saca la desesperación de nuestros corazones y quita toda confusión…Pues, tal vez llueva hoy. Quizás ganen los empacadores. Pero siempre vamos a ir a los cielos porque es una esperanza segura en Cristo Jesús. Amén.
Ministerio: Divine Savior Lutheran Church