Filipenses 4:6-7
“Por nada estéis afanosos, sino presentad vuestros pedidos a Dios en oración, ruego y acción de gracias. Y la paz que supera todo entendimiento, guardará vuestro corazón y vuestros pensamientos en Cristo Jesús”.
Había una vez un niño que tenía grandes deseos de tocar en la banda de música de su escuela. Un día, el niño regresando de la escuela les pidió a sus padres que si le podían comprar un instrumento musical e inscribirse en la banda de música de la escuela. Los padres no dijeron ni sí, ni no. Le contestaron: “Tenemos que pensarlo.
Pasaron varios días y los padres de este niño no decían nada, por lo que el niño decidió preguntar otra vez. Y Los padres del niño no dijeron ni sí, ni no. Simplemente le contestaron: "Todavía estamos pensándolo" Días después, saliendo de la escuela y en camino a su casa, el niño decidió entrar a la tienda de música y ver los instrumentos musicales. Cuando entró a la tienda, la primera cosa que cautivó su vista fue una hermosa y brillante trompeta. No era nueva, pero estaba en muy buenas condiciones. Tenía además un estuche curioso hecho de piel de cocodrilo. ¡Era justo lo que quería!
Esa noche, durante la cena, el niño le dijo a sus padres: "Fui a la tienda de música después de la escuela y vi allí una trompeta muy bonita. Es exactamente como la quiero y solamente cuesta 1000BF
El papa, mirando a la mamá le dijo: "Creo que debemos echarle un vistazo a esta trompeta o seguiremos escuchando sobre la misma cosa hasta el cansancio". Al día siguiente, el niño fue a la tienda de música con sus padres y ellos le compraron la trompeta.
El niño se unió a la banda de música y se mantuvo fiel a su intención. Tocó en la banda durante todos sus años escolares, y cuando fue a la Universidad decidió entrar en el programa de música. Cuando se graduó se convirtió en un maestro de música.
Mi pregunta es… ¿qué hubiera sucedido o cuán diferente hubiera terminado la historia si este niño hubiera decidido pedirles a sus padres por el instrumento musical una sola vez y listo ya nunca más?
DIOS ESCUCHA ATENTAMENTE La Biblia nos enseña que de la misma manera en que nuestros padres quieren lo mejor para nosotros y nos dan lo que pedimos…
Algunas veces le pedimos algo a Dios una vez, y nunca más lo mencionamos o se lo volvemos a pedir.
Tal vez esta actitud demuestra nuestra impaciencia.
Cuando le pedimos algo a Dios queremos que él nos conteste con un SÍ, y queremos escuchar su respuesta al momento.
Jesús nos dice que debemos orar y no desmayar o sea, no darnos por vencidos.
Tal vez, Dios quiere que le demostremos que sí estamos tomando en serio lo que le estamos pidiendo y que de verdad lo queremos y lo anhelamos
Eso se llama PERSISTENCIA
Cuando Jesús estuvo en la tierra nos dio muchas lecciones a través de parábolas. Jesús había estado hablando sobre las dificultades que pasarían sus seguidores en el periodo antes de su segunda venida. Por lo que les decía que debían “orar siempre, y no desmayar”
Leamos Lucas 18:1-7 También les refirió Jesús una parábola sobre la necesidad de orar siempre, y no desmayar, 18:2 diciendo: Había en una ciudad un juez, que ni temía a Dios, ni respetaba a hombre. 18:3 Había también en aquella ciudad una viuda, la cual venía a él, diciendo: Hazme justicia de mi adversario. 18:4 Y él no quiso por algún tiempo; pero después de esto dijo dentro de sí: Aunque ni temo a Dios, ni tengo respeto a hombre, 18:5 sin embargo, porque esta viuda me es molesta, le haré justicia, no sea que viniendo de continuo, me agote la paciencia. 18:6 Y dijo el Señor: Oíd lo que dijo el juez injusto. 18:7 ¿Y acaso Dios no hará justicia a sus escogidos, que claman a él día y noche? ¿Se tardará en responderles?
TAMBIEN LEEMOS EN:LUCAS 11:5-13
5 Les dijo también: — Supongamos que uno de vosotros tiene un amigo y va a él a la medianoche y le dice: “Amigo, préstame tres panes, 6 porque ha llegado a mí un amigo de viaje, y no tengo nada que poner delante de él.” 7 ¿Le responderá aquél desde adentro: “No me molestes; ya está cerrada la puerta, y mis niños están conmigo en la cama; no puedo levantarme para dártelos”? 8 Os digo que, aunque no se levante a dárselos por ser su amigo, ciertamente por la insistencia de aquél se levantará y le dará todo lo que necesite. 9 Y yo os digo: Pedid, y se os dará; buscad y hallaréis; llamad, y se os abrirá. 10 Porque todo aquel que pide recibe, y el que busca halla, y al que llama se le abrirá. 11 ¿Qué padre de entre vosotros, si su hijo le pide pescado, en lugar de pescado le dará una serpiente? 12 O si le pide un huevo, ¿le dará un escorpión? 13 Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenos regalos a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que le pidan?
DIOS SIEMPRE CUMPLE LO QUE OFRECE
¿Acaso Dios no hará justicia a sus escogidos, que claman a él día y noche?”
SALUDOS DESDE PUERTO CABELLO-VENEZUELA
Génesis 17: 5 – 6. (BT) “Y no se llamará más tu nombre Abram, sino tu nombre será Abraham, porque te he constituido padre de una multitud de pueblos. Te haré fecundo en gran manera, haré naciones de ti, y de ti saldrán reyes”.
Génesis 17: 15 – 16. (BT) “Dijo también ’Elohim a Abraham: A tu mujer Saray no la llamarás Saray, sino que su nombre será Sara, y la bendeciré y también te daré un hijo por medio de ella. Sí, la bendeciré y haré de ella naciones, y reyes de pueblos procederán de ella”.
Es allí donde el Padre te cambia el nombre para que comience a crearse un ambiente. Las palabras crean ambientes.
Repite: La multiplicación demanda una preparación de mi vientre espiritual a través de una palabra que engendra algo en mi vientre espiritual y me prepara para una multiplicación sobrenatural.
7. La importancia de la promesa de los hijos.
Génesis 18: 10. (BT) “Y dijo: Volveré a ti sin falta según el tiempo de la vida, y he aquí que tu mujer Sara tendrá un hijo…”.
El líder multiplicador debe tener hijos. Nadie puede entender mejor a un padre que el hijo.
El hijo tiene seguridad. Cuando el Eterno quiere saber si verdaderamente eres hijo te corrige. Proverbios 13: 24. (BT) “El que escatima el castigo aborrece a su hijo, El que lo ama, temprano lo corrige”.
A veces el no corregir es no amar. Como líder debes corregir y es allí donde descubres quienes son los hijos. Nunca vas a conocer un hijo verdaderamente hasta que no lo disciplines. Hebreos 12: 5 – 8. (BT) “Y habéis olvidado la exhortación que como a hijos se os habla, diciendo: Hijo mío, no tengas en poco la disciplina del Señor, Ni desmayes cuando seas reprendido por Él. Porque el Señor al que ama disciplina, Y azota a todo el que recibe por hijo. Permaneced bajo la disciplina, pues Dios os está tratando como a hijos; porque, ¿qué hijo es aquel a quien su padre no disciplina? Pero si quedáis sin disciplina, de la cual todos han llegado a ser partícipes, entonces sois bastardos y no hijos”.
Un hijo nunca se va de la casa. Si quieres tener paz debes llorar al comienzo.
8. La importancia del valor de la intercesión profética por las naciones para la multiplicación.
Génesis 19: 29. (BT) “Así, cuando ’Elohim destruyó las ciudades de la llanura, ’Elohim se acordó de Abraham, por eso sacó a Lot de en medio del derrumbamiento de las ciudades en que Lot se había establecido”.
El eterno salva a Lot y a su familia solo por la intercesión profética de Abraham.
9. La importancia de cuidar el matrimonio apostólico de los ataques del enemigo que frenan la multiplicación.
Génesis 20: 1 – 2. (BT) “Desde allí Abraham viajó hacia la tierra del Neguev, acampó entre Cades y Shur, y habitó como forastero en Gerar. Y decía Abraham respecto a Sara, su mujer: Es mi hermana. Así que Abimelec, rey de Gerar, mandó a tomar a Sara”.
El ataque de satanás contra el vientre de Sara, porque es el vientre de la multiplicación. Los ataques en el matrimonio son para distraer el ministerio de la verdadera multiplicación.
Si te quieres multiplicar debes velar mucho por tu matrimonio y por la familia. El matrimonio debe estar en orden para cuidar la multiplicación.
Es difícil tener un ministerio de multiplicación y vivir peleando en casa.
10. La importancia de que el líder multiplicador sobrenatural aprenda a sembrar su mejor hijo para cosechar las naciones.
Génesis 22: 1 – 2. (BT) “Aconteció después de estas cosas que ’Elohim probó a Abraham, y le dijo: ¡Abraham! Él respondió: Heme aquí. Y dijo: Toma ahora a tu hijo, tu único, a Isaac, a quien amas, y ve a tierra de Moriah, y tú mismo sacrifícalo allí en holocausto sobre uno de los montes que Yo te diré”.
En Génesis 12 el Eterno hace una promesa Abraham. Génesis 12: 4. (BT) “…y en ti serán benditas todas las familias de la tierra”. Al sacrificar a su hijo Abraham pasa a una dimensión mayor. Génesis 22: 18. “y en tu simiente serán benditas todas las naciones de la tierra…”.
Cada vez que siembras un hijo el Eterno te hace parte de una nación. Todo el que siembra un hijo en el ministerio cosecha una nación. Aquí el Eterno te entrega una unción de gobierno.
Jesús fue un líder multiplicador sobrenatural.
Mateo 9: 35 – 38. (PDT) “Jesús recorría todos los pueblos y aldeas, enseñando en las sinagogas proclamando el nuevo mensaje del reino y sanando toda clase de enfermedades y dolencias. Cuando Jesús veía a todos los que lo seguían, sentía compasión por ellos, pues estaban agobiados e indefensos. Eran como ovejas que no tienen pastor. Entonces Jesús les dijo a sus seguidores: La cosecha es mucha, pero los trabajadores son pocos. Por eso, pidan al Señor dueño de la cosecha que envíe trabajadores para recogerla”.
Mateo 10: 1. (PDT) “Jesús llamó a sus doce seguidores y les dio el poder de expulsar los espíritus malignos y de sanar toda clase de enfermedades”.
Recorría; es andar de un lugar ida y vuelta. Es un volver continuo, no soltar un lugar.
Los líderes multiplicadores deben aprender a mantenerse en lugares estratégicos por cierto tiempo. Existen lugares más fuertes donde no va a bastar con ir una vez, sino que vas a tener que estar más tiempo.
Recorrer es mantenerse en un lugar sin soltarlo. Fue lo que hizo Josué para tomar Jericó, recuerda que pisar nunca es inocente. Josué 1: 3. (BT) “Como dije a Moisés: todo lugar que pise la planta de vuestro pie lo he entregado a vosotros”.
Entiende esto: La guerra del reino de las tinieblas contra el Reino de la Luz es básicamente por almas. El que gana almas, por consecuencia toma territorios, porque una casa es un territorio.
Ahora la guerra espiritual que libra el ganador de almas es en su corazón por compasion. La iglesia no evangeliza cuando no hay compasion por las almas.
La guerra espiritual del reino de las tinieblas en el creyente es por la compasión.
Todo líder recibe compasión cuando comienza a recorrer una región. La compasión es la clave para la evangelización.
Compasión; es la habilidad de sufrir con alguien, tomar su dolor y hacerlo tuyo, y como tengo la respuesta voy y te doy lo que necesitas para salvarte.
Jesús recorría sanando y predicando. Tú debes dar vueltas, pero también predicas y sanas. Eso es lo apostólico y lo profético junto, no se pueden separar.
Presta atención: Puede ser que te guste orar bastante, pero también debes ganar almas, consolidar y ganar territorios. Puede ser que seas bueno para ganar almas, consolidar y conquistar territorios, pero también debes orar, es decir, operar en lo profético. No puede separar una cosa de la otra.
Si el enemigo logra anular la compasión el evangelismo es un fracaso. Cuando Jesús veía a todos los que lo seguían, sentía compasión por ellos… ¿Qué ves en las personas? Esto tiene que ver con visión profética. Ves el huérfano, la mujer divorciada, el dolor, la enfermedad, la angustia. Pero también puedes ver la mujer de Reino, el hombre poderoso en el Espíritu, cuando lo ganas.
¿Sabes? Es trágico cuando Jesús tiene que aparecérsele a una persona para predicarle. Ejemplo: Pablo. Por temor de la iglesia.
Repite: Necesito multiplicación de compasión.
Conclusión.
Concejos prácticos para el líder multiplicador sobrenatural:
El poder y el valor de ser enviado. Debes pedir concejo para ser enviado. Donde siente la cobertura que debes ir y decir; amen. Solo cuando eres enviado caminas en lo apostólico, si vas por tu cuenta lo apostólico no está activo en ti.
Debes operar en un espíritu de humildad hacia la gente y agresivo contra el enemigo. Si quieres ver más poder desatado en tu vida, solo tienes que caminar en humildad. Un corazón humilde, nunca arrogante, nunca soberbio. No independiente, sino humilde. Puedes perder todo por falta de humildad.
Debes entender que el enemigo va a atacar lo más que pueda el área de los argumentos, rebeldía y desobediencia. El Reino espiritual solo respeta una cosa n tu vida y la autoridad.
El enemigo te arruina trayendo un desacuerdo, y el discípulo se enoja, se molesta y se le crea un argumento, el argumento crea rebeldía (la rebeldía no es exterior) y luego al manifestarse viene la desobediencia. 2 Corintios 10: 4 – 6. (BT) “Porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para destrucción de fortalezas; destruyendo razonamientos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia del Mesías; estando dispuestos a castigar toda desobediencia, cuando vuestra obediencia sea completa”.
Debes operar en obediencia total.
Fuente: www.centraldesermones.com