El tiempo de Dios ha llegado

Génesis 50:24,25; Éxodo 2:24,25; Romanos 13:11

Introducción:

Dios todo lo tiene bajo control; Él tiene un tiempo señalado para cada uno. Cuando hablamos que el tiempo de Dios ha llegado, nos referimos a aquel momento en el que Dios da cumplimiento a aquello que en un día habló, por cualquier medio, con respecto de nosotros; y ahora lo hace una realidad. El tiempo de Dios demanda despertar, diligencia, entrega y disposición; de manera que cuando el tiempo de Dios se hace presente, nuestra reacción debe ser pronta y muy convincente. El tiempo de Dios llega para bien, y bendición de manera amplia: de modo personal, trae un despertar, y de manera congregacional, provoca un grande avivamiento que puede impactar toda una nación.

1.  Dios habiendo mostrado su amor a la humanidad hizo un plan benéfico levantando a Israel.

Primero hubo llamado a Abraham, y le habla de una gran familia que le nacería, la cual habría de conquistar la tierra de Canaán (Gén. 12:1-9).

Vino una palabra de parte de Dios para Abraham con respecto a su descendencia y aquella tierra que habrían de poseer. Lea Gén. 15:13-21.

Consideremos tres puntos claves de lo que Dios habló a Abraham:

La prueba: cuatrocientos años en Egipto bajo esclavitud (ver. 13)
La liberación: “visitaré” (ver. 14,16) refiriéndose al éxodo
Bendición: poseer la tierra (ver. 18-21).

2. Nace Isaac que fue padre de Esaú y Jacob. Jacob forma en sí la propia nación de Israel con doce hijos varones (1 Cr. 2:1,2).

A partir del capítulo 37 de Génesis, comienza con detalles la propia historia de la familia de Jacob (Gén. 37:2). Acontecimientos recalcables:

José es vendido, lo hacen muerto a su padre, y es prosperado en Egipto (caps. 37-41)

José es hecho gobernador de Egipto (cap. 41:37-57)

Hay gran hambre en la tierra y los hijos de Jacob van en busca de alimentos en Egipto, donde gobierna José, hermano de ellos, al que vendieron (cap. 42)

José se da a conocer a sus hermanos (cap. 45)

Jacob se entera de que su hijo está vivo y lo va a visitar (Gén. 45:28)

Al ir a Egipto Dios habla con Jacob y le dice: “no temas de descender a Egipto, porque allí Yo haré de ti una gran nación.  Yo descenderé contigo a Egipto, y Yo te haré volver; y la mano de José cerrará tus ojos” (Gén. 46:1-4)

Entraron en Egipto 70 personas (Gén. 46:27)

Allá en Egipto Jacob bendice a sus hijos, y a sus nietos Efraín y Manasés hijos de José (Gén. 48:1—49:27)

En Egipto muere Jacob y lo embalsaman  (cap. 50:1-11)

José también murió en Egipto (Gén. 50:26). Pero antes de morir, José recordó unas palabras muy verdaderas: yo voy a morir; mas Dios ciertamente os visitará, y os hará subir de esta tierra a la tierra que juró a Abraham, a Isaac y a Jacob (Gén. 50:24). Además hizo jurar al pueblo (los 70 que entraron a Egipto y que ya habitaban la fértil tierra de Gosén, ver. 8), diciendo: Dios ciertamente os visitará, haréis llevar de aquí mis huesos (Gén. 50:25).

Aquella visitación se refería a la intervención sobrenatural de Dios de sacarlos de Egipto y retornarlos a Canaán; la tierra prometida por Dios. Pero él no quería quedar excluido de aquel obrar de Dios para con su pueblo, que pidió ser enterrado en Canaán. Sus huesos se irían con ellos en aquel visitar. ¡Qué hermosa escena!

La prueba como tal toma inició luego de la muerte de José; y se levanta un nuevo faraón en Egipto que desconocía de José, y oprimió duramente a aquel pueblo (Éx. 1:8-22).

Fueron 430 años de agonía, de opresión, de maltrato, pero también de multiplicación; cumpliéndose así la palabra dicha a Jacob: no temas descender a Egipto, porque allí yo haré de ti (descendencia) una gran nación (Gén. 46:3). ¡Crecieron bajo aflicción!

Allá el pueblo clamaba a Dios por auxilio; y aquel gemido llegó a la presencia de Dios (Éx. 2:24,25).

Entonces llegó el tiempo de Dios. Se levanta Moisés como libertador y Dios permite el éxodo de Egipto; sacándolos con mano poderosa (Éx. 12: 40, 41).

El tiempo de Dios cuando llegó fue notable, y se presentó como cumplimiento a las promesas divinas. Veamos en resumen:

1.  Dios levantó a un tartamudo: Moisés

2. Diez plagas de Egipto: vieron convertirse el agua en sangre, ranas por doquier, piojos en las cabezas de las egipcias, granizo caer del cielo, tinieblas en todo el país, la muerte de los primogénitos de los egipcios, etc.

3. Por medio de una vara vieron la gloria de Dios con milagros y prodigios sobrenaturales.

4. Salen de Egipto; Faraón dice que sí.

5. Cruzan el mar Rojo

6. Caminan por la arena de la profundidad de la mar, sin sufrir daños en la salud. Por allí también pasaron los huesos de José.

7. El caballo y el jinete egipcio que los perseguían se ahogaron en el mar, cuando éste volvía a su sitio.

8. María y Moisés entonan un cántico profético.

A partir de aquí no cesaron de ver la gloria de Dios.

Estas fueron evidencias que el tiempo de Dios había venido.

Conclusión:

Cuando llegaron a Canaán y tomaron posesión de ella, sepultaron los huesos de José, quien les dijo que Dios ciertamente los visitaría; y esa palabra ahora se había cumplido (Jos. 24:32).

Estamos en el tiempo de Dios. Los que Dios habló de nosotros, lo que haría con nosotros, lo estamos viendo; sus promesas hacia la iglesia se están cumpliendo, cuando levantó profetas hablando de los tiempos glorioso sobre la iglesia; lo estamos viendo. ¡El tiempo de Dios ha llegado! ¡Veremos su gloria como nunca antes!

Si estás tendido en lo pasajero, y ves que el tiempo ha llegado y es firme, hoy te invito a que te levantes  y hagas parte del tiempo de Dios (Rom. 13:11).

c) Lo vió. Sus pasos no se alejaban, se acercaban. Este se dirigió con paso firme hacia él. Lo vió porque lo buscaba.

d) Fue movido a misericordia. Misericordia significa que …. Si hubiera estado en un barranco de allí lo habría rescatado.

Pasos del Rescate

1. Acercándose. La distancia impide la realización de los rescates.

2. Vendó sus heridas. Eran muchas y considerables, porque requirieron vendajes.

3. Echándoles aceite y vino.

4. Lo puso en su cabalgadura.

5. Lo llevó al mesón

6. Cuidó de él. El personalmente se ocupó de sus cuidados. Cuando alguien herido llega a estar bajo su cuidado, él mismo se ocupa de brindar los cuidados de emergencia. ¿Cuántos sabían que él es el médico divino? Lo puso bajo su abrigo, como dice Luz E. Ríos en su famoso himno: El que habita al abrigo de Dios

El que habita al abrigo de Dios Morará bajo sombras de amor Sobre él no vendrá ningún mal Y en sus alas feliz vivirá

a) Este es un cuidado extenso. Es un cuidado que lo prorroga hasta que nos recuperamos y sobrepasamos el peligro de muerte. “Mas ya ha pasado de muerte a vida…”

b) No es cuestión de horas. El nos dedica días. El pasaje no dice al otro día, dice “otro día”. Teniendo millones de casos qué atender él no tiene prisa y sabe reanimarnos.

7. Encarga a alguien como responsable. Este es el mesonero. El mesonero representa todo ministerio o iglesia cristiana. Quien relató esta parábola es Cristo. Oh, cuánto sentimiento de bondad, amor y misericordia hay en su historia por cuanto él mismo no fue dado a luz en un mesón, pero, él al pensar en un pecador dice que éste debe ser llevado a un mesón y ser bien atendido.

a) Le paga por adelantado. Le da dos denarios. Un denario era el equivalente al salario de un día de un jornalero en los tiempos de Jesús. Algunos equivocadamente interpretan que los dos denarios significan dos mil años y luego el señor regresará. Los dos denarios son la garantía de pago.

b) Todo iba a su cuenta. Le dice cuídamele.

1. Lo que gastes de más. Esto implica la inversión de nuestras propias vidas, posesiones, tiempo, sacrificios, rendición de nuestro ser. Lo que se hace yendo más allá del deber. Lo que hacemos más allá del cuidado de nuestra propia alma. Lo que no hace un profesional de la conducta humana, lo que no hace un socorrista de la cruz roja, lo que no hace un agente del orden público, lo que ellos no hacen debe estar dispuesto a hacerlo cualquier miembro de la iglesia por un alma a nuestro cuidado. En la iglesia nada de lo que conforma una necesidad puede soslayarse.

2. Hay una confianza en que el mesonero será diligente, fiel, honesto. El pago fue por adelantado y fue calculado para que nada falte, pero por si acaso empeñó la palabra. Hizo una promesa solemne bajo la gravedad de la responsabilidad que pone bajo el mesonero. En alguna de las promesas de Dios está la reposición a todo lo que gastamos de más.

3. Te lo pagaré cuando regrese. El viene con pago y retribución en sus manos.

Conclusión:

¿Cuándo fue la última vez que fuiste asaltado por Satanás? ¿Qué te robó? ¿Estás sano de tus heridas? La forma más convincente de saber que una herida sanó es cuando deja de dolerte. En este momento quiero que todos bajen sus cabezas y cierren sus ojos para el momento reverente de oración que vamos a tener. Cristo está de nuevo pasando por este camino de encuentro que es la iglesia. ¿Cómo crees que él te ve hoy? ¿Algo o alguien te ha despojado? ¿Herido? ¿Abandonado? ¿Te ha quitado las ganas de seguir adelante, el gozo de vivir? No hay tiempo que perder. Tus heridas deben ser vendadas. El aceite y el vino de la oración debe ser derramado sobre ti. Si este mensaje ha hecho alguna referencia a tu situación actual te pido levantar tu mano y ponerte de pie en este momento. Si fuiste invitado a venir a esta iglesia y todavía no has tenido un encuentro con Cristo, te doy la buena noticia de que él está aquí y está viéndote a ti también con ojos de misericordia. Levanta tu mano y ponte de pie tú también.

Estaba el apóstol Pedro pescando y Jesús se le acerco cuando el no había pescado nada y le dijo: “voy al mar adentro, métete adentro por que acá en la orilla no pescaste nada, pero ándate a las profundidades que ahí vas a descubrir”. Cuando una mujer se queda en la orilla de la vida, son esas mujeres que dicen: “aunque sea voy a la reunión y escucho” “aunque sea una vez por semana oro”, con esa actitud se quedan en la orillita y no se meten en las profundidades que vienen de parte del Señor. Quieren ser extraordinarias y no quieren pagar el precio de meterse en las profundidades de Dios.

Llega un momento donde Dios te dice: “deja la barca y metete en las profundidades deja lo seguro, córrete de la comodidad y empezá a moverte y entra a lo profundo a buscar lo que yo tengo para vos”. Dice que en una casa grande no solo hay vasos de oro y plata, si no también de madera y de barro. Los distintos tipos de vasos que había en la época en que fue escrita la palabra. Hoy en día también te encontrás con distintos tipos de recipientes, todos pueden contener líquido o algún tipo de materia, pero no todos los recipientes pueden ser usados en todas las ocasiones.

Vasos de oro

La Biblia no solo hablaba que había vaso de oro y de plata, también de madera y barro que iba conteniendo en su momento distintos alimentos o distintas materias.

El vaso de oro, es el vaso que nos pertenece tener a nosotras, es el vaso que usaban los reyes, era el vaso que usaban para servirse sus bebidas, era un vaso destacado. No era un vaso para retener el aceite, no era un vaso para retener la sal, no era para contener el agua, el vaso de oro era para uso noble.

Dios te dice que vos podes contener las cosas más sencillas, pero él te ha preparado para que además de las cosas más sencillas, contengas las cosas más nobles que están en su reino y las ha preparado para tu vida.

Los contenidos más nobles en vos

Toda la fe, todo el poder, todos los dones que vienen de parte de Dios están disponibles para todas aquellas que cuidan sus vidas como un vaso noble por que Dios no ha hecho acepción de personas. Dios no elige a quien darle lo mejor, Dios dice que para todas sus hijas tiene un lugar como vaso noble o como vaso destacado.

Nos da esa posibilidad si nosotras queremos, podemos utilizarlo. Para el Señor, cada una de nosotras somos tesoro, somos el tesoro del señor. A veces te lo dicen o te lo decís, pero tenes que hacerte esta pregunta: “¿Yo realmente creo que soy un vaso de oro precioso en la mesa de mi Dios, en la casa del Señor?”

Date el valor que te corresponde por herencia

Hay mujeres que no necesitan que la menosprecien porque ellas solas a si mismas se sacan valor, dicen: “yo por lo menos un vaso de plata soy”, por que creen que sus vidas no tienen valor, creen que sus vidas son comunes.

Dios te ha llamado para que seas un vaso de oro, dentro tuyo esta todo lo necesario para que vos puedas entender, puedas mostrarte al mundo como es ese vaso de honra que Dios ha dicho que sos a través de Jesucristo.

Como hija de Dios no podes pasar desapercibida, por que una mujer de Dios, es una mujer de victoria, no permitas que la circunstancias de tu alrededor te hagan ser una mujer común y corriente que vive como victima, que vive quejosa, que vive viendo lo negro en vez de ver la vida maravillosa que Dios nos da para vivir cada día. Tenés que declarar: “Soy una mujer extraordinaria que va a marcar lo extraordinario donde quiera que me mueva”.

Si notan en el pasaje el obejetivo de nuestro crecimiento y desarrollo es la santidad sin la cual nadie vera a Dios.

Por eso hermano yo quiero  que te preguntes personalmente ¿Estoy creciendo en santidad? ¿Es mi vida un reflejo cada vez más exacto de la imagen de Cristo?

No debemos dejarnos engañar por cosas superficiales y algunas mentiras que el enemigo quiere hacerte creer para mantenerte aislado de un crecimiento sano, hermanos no vale de nada ninguna acción por piadosa que parezca es valiosa  si eso no repercute en hacerte crecer en santidad, de manera practica puedes evaluar que cosas te convienen o con esa sencilla evaluación, me ayuda a ser mas santo o mas mundano, hay conversaciones que no te convienen, hay programa de tv que no te convienen, hay personas con las que no te conviene estar; y como lo sabes por que no te ayudan a crecer en santidad y todo lo que no te ayuda a crecer te estanca y finalmente te hace retroceder.

Mira esto cualquier actividad por provechosa que te parezca que te impida estar el domingo en la iglesia donde nos reunimos en el día del señor para adórale y ser expuesto a la predicación de su palabra, cualquier actividad que impida que tu estés aquí es una obra del enemigo o de tus propios deseos pero no de Dios, entiende esto si mi exposición de la palabra se ciñe de una manera estricta a lo que dicen las escrituras ya no son mis palabras sino las de Cristo y en este momento yo no soy mas que un vocero de Nuestro señor Jesús  entonces si hay algo en tu vida mas importante que lo que Cristo tiene que decirte para animarte y para fortalecerte entonces revísate por parablemente el no es tu señor. 

Hay pastor usted como que esta exagerando tome un papel y un lápiz y apunte para que estudie estos textos en su contexto:

Luc 10:16  El que a vosotros oye, a mí me oye; y el que a vosotros desecha, a mí me desecha; y el que me desecha a mí, desecha al que me envió.

1Ts 4:7-8  Pues no nos ha llamado Dios a inmundicia, sino a santificación. 8  Así que, el que desecha esto, no desecha a hombre, sino a Dios, que también nos dio su Espíritu Santo.

Jua 12:48  El que me rechaza, y no recibe mis palabras, tiene quien le juzgue; la palabra que he hablado, ella le juzgará en el día postrero.

Los cristianos como individuos y en la unidad que forma la iglesia van creciendo de una manera armoniosa en santidad y el principal método que Dios usa para ello es la predicación de su palabra.

Finalmente el apóstol cierra esta especie de conclusión en cuanto al tema de la unidad y la obra reconciliadora de Cristo haciendo una declaración poderosa en quien vosotros también sois juntamente edificados para morada de Dios en el Espíritu si tu has rendido tu vida a Cristo no debe quedarte la menor duda que Dios esta trabajando en tu vida el te esta convirtiendo progresivamente en parte un templo santo en el que el va a morar posicionalmente ya eres parte de ese templo pero aun Dios esta trabajando en tu vida y en la mía y si de algo puedes estar seguro es de que el terminara su obra  dice Flp 1:3-6 Doy gracias a mi Dios siempre que me acuerdo de vosotros, 4  siempre en todas mis oraciones rogando con gozo por todos vosotros, 5  por vuestra comunión en el evangelio, desde el primer día hasta ahora;  1:6  estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo

Conclusión

Hermanos si tu hoy estas en Cristo esta es tu realidad eres ciudadano de reino de los cielos con todos los derechos legales que eso amerita, eres parte de la familia de Dios y por lo tanto hermano de nuestro señor Jesucristo heredo y coheredero con el, eres parte de este gran edificio perfecto y majestuoso que es la iglesia de Cristo beneficiaria de todas la bendiciones espirituales y materiales que Dios ha prometido a los hombres.

Ahora bien si tu estas hoy sin Cristo espero que hayas sido tocado por el poder del evangelio y que alla en tu corazón a partir de este día el deseo de caminar en una nueva vida dejando a tras las cosas pasadas y rindiéndote a Cristo.

Pero esa barrera fue derribada Cristo hizo en el de ambos pueblos una unidad espiritual inquebrantable, sigue diciendo el texto aboliendo en su carne las enemistades, la ley de los mandamientos expresados en ordenanzas, para crear en sí mismo de los dos un solo y nuevo hombre, haciendo la paz.  Vemos entonces que ese muro divisorio era la ley, pero no debemos entender en ninguna manera esta ley como los diez mandamientos o la ley moral de Dios realmente aquí apunta a la ley ceremonial dado que los judíos se extraviaron he hicieron de la ley ceremonial un requisito indispensable para tener comunión con Dios y agregaron a la misma mandamientos establecidos por ellos mismo haciéndose practicante de mandamientos tradicionalistas y no los verdaderos preceptos que Dios había establecido.

Jesús se refirió duramente a esta condición de los judíos cuando dijo Mat 15:7  Hipócritas, bien profetizó de vosotros Isaías, cuando dijo: 8.  Este pueblo de labios me honra;  Mas su corazón está lejos de mí. 9  Pues en vano me honran,  Enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres. Jesús vivió una vida totalmente apegada a las leyes establecidas por moisés incluyendo las leyes ceremoniales y rituales pero una vez que muere en la cruz del calvario el se lleva en si mismo el objetivo principal de aquellas leyes las cuales eran sombra de lo que habría de venir esto es Cristo por eso el apóstol dice que el abolió en su carnes las enemistades que había entre judíos y gentiles, logro la unión donde siempre había reinado la desunión, uno de los rasgos característicos de su cuerpo que es la iglesia es la unidad de hecho lo hemos visto como una evidencia de una conversión genuina, usted no puede tener unidad con Cristo sino tiene unidad con su hermano por quien Cristo murió bien es cierto que somos diferentes y que tenemos diferencias pero somos parte de un mismo cuerpo y eso debe de ser mas que una unidad conceptual una unidad practica.

Cristo hizo de dos partes antagónicas una unidad de  dos hizo un hombre nuevo dice MacArthur “Espiritualmente en Cristo ya no hay judíos, ni gentiles sino solo cristianos”

Cualquier barrera que antes pudiera separarnos hermanos a sido derribada en el señor todos somos iguales el no hace distinción de personas por eso no existe tal cosa como iglesias para negros o para  blancos para chinos o para americanos para ricos o para pobres solo existe la iglesia de Cristo compuestas por hombres que a pesar de sus diferencias se esfuerzan por mostrar el amor de Cristo a coherederos con el de la gracia de Dios.

Cristo hizo la paz, Cristo es la paz el logro una reconciliación total del hombre con el hombre en el.

En segundo lugar vemos en el texto una reconciliación en un sentido vertical dice el texto 16. y mediante la cruz reconciliar con Dios a ambos en un solo cuerpo, matando en ella las enemistades. Esa unidad creada en Cristo que son todos los hombres y mujeres redimido por su sangre su cuerpo, su iglesia, fue reconciliada por el con Dios por medio del sacrificio en la cruz del calvario donde pago el precio de sus transgresiones y de esa manera cumplió con la justicia de Dios.

Irónicamente esa cruz que para los judíos es piedra de tropiezo y para los gentiles locuras llego a ser para los que se salvan tanto judíos como gentiles el medio de reconciliación entre ellos y para ambos con Dios. Cristo acabo con su muerte en la cruz las enemistades que mantenías separados a judíos y gentiles el con su muerte logro unir lo que estaba separado.

Continúa el texto 17. Y vino y anunció las buenas nuevas de paz a vosotros que estabais lejos, y a los que estaban cerca; 18. porque por medio de él los unos y los otros tenemos entrada por un mismo Espíritu al Padre. Tanto gentiles los que estaban lejos como judíos los que estaban cerca fuimos hechos participes de la gloriosa verdad del evangelio las buenas nuevas de paz ese mensaje de salvación que transforma la vida de personas y les une entre si y  a su vez con Cristo.

Una vez que se consuma la obra de Cristo en la cruz del calvario y su asenso a la presencia del padre el espíritu santo descendería y habitaría en su iglesia como arras de nuestra herencia. Así la presencia del espíritu santo en tu vida y en la mía nos garantiza un acceso libre y continuo a la presencia del trono celestial lo que nada en el mundo podía conseguir ni las religiones  ni los esfuerzos de la voluntad humana Cristo lo consiguió en la Cruz y su obra se hace evidente con la presencia del espíritu santo en nuestras vías.

Conclusión

Después de haber presentado estas gloriosas verdades  en las vemos la condición en que nos encontrábamos nosotros los gentiles sin Cristo y ver como Dios nos saco de ahí formando una unidad inquebrantable que es su iglesia tanto de judíos como de gentiles  como ahora hemos sido reconciliados con Dios y tenemos un acceso libre continuo y gratuito a la presencia del padre yo le invito a disfrutar de todos esos privilegios que Cristo gano para usted y aprenda a disfrutar de estar a los pies de sus padre celestial.

Fuente: www.centraldesermones.com