La Doctrina de la Gracia: (11/23) – La Fe que Dios Exige es un Don Suyo

" Respondió Jesús y les dijo: Esta es la obra de Dios, que creáis en el que él ha enviado." (JUAN 6:29.)

 

" Y queriendo él pasar a Acaya, los hermanos le animaron, y escribieron a los discípulos que le recibiesen; y llegado él allá, fue de gran provecho a los que por la gracia habían creído." (HECHOS 18:27.)                                                                     

                                   

" Y cuál la supereminente grandeza de su poder para con nosotros los que creemos, según la operación del poder de su fuerza." (EFESIOS 1:19.)                                      

 

" Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros pues es don de Dios." (EFESIOS 2:8.)                                                                         

                                   

" Por tanto, es por fe, para que sea por gracia, a fin de que la promesa sea firme para toda su descendencia; no solamente para la que es de la ley, sino

también para la que es de la fe de Abraham, el cual es padre de todos nosotros."  (ROMANOS 4:16.)

 

" Y por quien recibimos la gracia y el apostolado, para la obediencia a la fe en todas las naciones por amor de su nombre." (ROMANOS 1:5.)                                             

 

" Puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios." (HEBREOS 12:2.)                                    

                                   

" Y mediante el cual creéis en Dios quien le resucitó de los muertos y le ha

dado gloria, para que vuestra fe y esperanza sean en Dios." (1ª PE. 1:21.)                 

" Para lo cual también trabajó, luchando según la potencia de él, la cual actúa poderosamente en mi." (COLOSENSES 2:29.)                             

                                   

" Porque a vosotros os es concedido a causa de Cristo, no sólo que creáis en él sino también que padezcáis por él." (FILIPENSES 1:29.)                             

                                   

" Amados, por la gran solicitud que tenía de escribiros acerca de nuestra común salvación, me ha sido necesario escribiros exhortándoos que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos." (JUDAS 1:3.)