LA BENDITA MESA DEL SEÑOR
1. La SANTA CENA fue establecida por nuestro SEÑOR JESUCRISTO la última noche de su existencia terrenal (Mt.26.26–29; Mr.14.22–25; Lc.22.14–20).
2. El día después, el pueblo judío iba a matar un cordero para celebrar la pascua. Pero nuestro SEÑOR se adelanta y lo celebra la noche antes. Pues se entiende que él mismo iba a ser el Cordero de Dios que iba ser sacrificado en el tiempo en que se mataba el cordero pascual tradicional (Jn.1.29; 2.4; Mt.26.45).
3. Más de mil años atrás, Dios había ordenado, en vísperas de la salida de Egipto, que cada familia matase un cordero y que lo comieran de prisa (Ex.12.6-8). De la sangre derramada de ese cordero debía aplicarse sobre la puerta de las casas para evitar que el ángel de la muerte los matara (Ex.12.13).
4. Lo hecho en Egipto fue un sacrificio y una cena. Lo que se hace en el Nuevo Testamento es repetición simbólica de lo que se hizo en Egipto. Lo celebrado en Egipto era sombra. Apuntaba a lo que iba ocurrir en el cumplimiento del tiempo, que se da en el Nuevo Testamento.
5. En Egipto se mató corderos para salvar la vida de unos pocos miles de primogénitos. En el Nuevo Testamento se sacrifica al UNIGENITO CORDERO DE DIOS para salvar a toda la humanidad que crea en ese evento magno.
6. Una lectura detenida de Lucas 22 arroja luz sobre cómo fue que se celebró la Cena. Y qué aspecto especial se añadió. Además, nos ayuda a entender qué terminaba y qué seguía. Qué cosa llegaba a su fin y qué otra cosa superior tenía su nacimiento allí.
7. Partamos del hecho que Lucas menciona copa de vino dos veces esa noche:
(1) Lc. 22.17 “Tomando la copa…” y
(2) Lc.22.20 “….después de haber cenado, tomó la copa…” .
Entre uno y otro momento hay espacio de tiempo y hay una carga espiritual diferente. En el primer caso, CRISTO bendice la copa común, igual que nosotros oramos por la comida. La segunda copa es una copa “después de la cena”. No como parte de la cena, sino que una copa “…después…” de la cena.
8. De la primera copa se dice que Jesús “…dio gracias…”, oración común que se hace para bendecir los productos de la Tierra que sustentan la vida. Pero, para la segunda copa de vino (Luc.22.20) nuestro SEÑOR invoca unas palabras poderosas y especiales nunca antes pronunciadas: “Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre”. Dice: “…esta copa…”, y refiere a la segunda copa.
9. De manera que en Lucas queda claro que esa noche Jesús hizo uso de dos copas. Una para la cena común y otra especial para la institución de LA CENA. De aquí podemos concluir, que hubo dos momentos históricos: El momento de la cena pascual y el momento de institución de LA CENA centrada en ÉL mismo. Es posible que los hermanos en Corinto no habían entendido esta diferencia, y hacían todo como si fuera un solo momento (1Cor.11). Pues es fácil confundirse.
10. Igual debe haber ocurrido con el pan, digo debe porque en Lucas el texto no es tan explícito con el pan como lo es con el vino, pero es natural suponerlo.
11. Hasta aquí nos queda claro que JESÚS celebró con sus discípulos una cena común de pascua. Y al final de esa cena común de pascua, instituyó LA CENA. Como algo aparte, especial, una nueva revelación.
12. Ninguna otra religión del mundo realiza lo que la iglesia cristiana realiza. Esas religiones no poseen esos poderosos signos de fe y esperanza en el retorno del GRAN SALVADOR.
14. Debe quedar claro que la SANTA CENA es infinitamente superior en su carga espiritual que la cena común que Jesús hiciera con sus discípulos esa misma noche. Y que regularmente se hace con sus elementos vitales que son pan y vino.
15. La cena común llegó a representar la socialización, a nivel humano entre los hermanos. Mientras la CENA INSTITUIDA representa la manifestación de fe y esperanza colectiva, en la dimensión vertical, en o hacia DIOS. Aun cuando se argumente que la cena común era para Israel, no por eso deja de verse valor social en ello para hoy.
16. De todas formas, es fácil sacar la conclusión de que la cena común pascual no es obligado para nosotros. Es así porque todos sus aspectos teológicos ya se cumplieron todos. Esto lo entiendo más así por una conclusión a la que llegué, que digo que Dios me lo hizo entender y es esto: JESUS celebra, como judío, la cena judía. Como judío, debía insertarse en la esperanza judía, para desde allí darle su más plena realización. Una realización más completa, más amplio, más universal. Como el cumplidor de esa esperanza, ÉL pone fin a ese “rito simbólico”. Por eso termina la cena pascual y da comienzo a otra CENA mayor, a SU CENA que Lucas narra.
17. Por no entender, desde los primeros días de la iglesia, los creyentes tanto judíos como gentiles, celebraban con énfasis la primera cena (la pascual). Hacían especialmente la primera parte de la cena común que nuestro SEÑOR realizó aquella noche. Y debilitaban la segunda parte que tenía una importancia mayormente infinita.
18. Pablo dice, refiriéndose al hábito de la iglesia de Corinto de celebrar con énfasis la cena común que: “…eso no es comer la CENA del SEÑOR” (1Cor.11.20) y luego procede a poner orden, pues él ha entendido la cuestión y su punto de vista es la que ha prevalecido hasta nuestros días, pues fue revelación de Dios: “Yo recibí del SEÑOR…” nos dice Pablo (1Cor.11.23).
19. El desorden en Corinto se daba, entre otras cosas, porque ellos no estaban dando el valor apropiado a la Mesa del Señor. Pues no es lo mismo la Mesa del Señor que la mesa común. En la Mesa del Señor se sirven solo el “cuerpo” y “la sangre” de Cristo en sus símbolos respectivos (pan y vino 1Cor.11.28). Y no se sirven para saciar el hambre literal del creyente (1Cor.11.34).
20. La Mesa del Señor era un acto solemne dirigido a renovar la esperanza, la fe y el amor a nuestro SALVADOR (1Cor.11.26). La mesa común, aunque obsoleta, era para afianzar compañerismo, de generar un ambiente para la socialización, para dar algo de comer a los hambrientos si era el caso. En fin, era para compartir alimentos comunes y promover el solidarismo entre los cristianos (Hechos 2.42).
21. Bueno es decir que la fuerza no está en el pan ni en el vino, sino en las manos benditas de nuestro SEÑOR que bendijo esos elementos y los convirtió en poderosos símbolos de su propia fuerza vital: su carne y su sangre. O digámoslo de esta manera: La fuerza del pan y el vino que usamos no consiste en el pan y el vino en sí mismos, que son materia común, sino en la fuerza del símbolo que lo cargan. El elemento básico sigue siendo pan, sustentador de la vida y vino, el elemento vital que representa la sangre, fuerza vital de la existencia humana.
22. Al unirse ambos elementos en la mano todopoderosa de CRISTO, se convierten en símbolos perfectos de la completa provisión que el alma humana necesita para entrar en la plena comunión con el HACEDOR. Así, al participar del pan y del vino que solo CRISTO ofrece, entramos en SU comunión. Comunión que trae paz al alma llena de sed, pero sed de Dios y de justicia. Sed de esperar solo en ÉL.
23. Canta Mejía Godoy en “El Niño Negro”: “Aleluya, pan para los pobres; Aleluya, para los ricos cabuya y tenedor”. Pero el pan que Cristo da es para todos, no solamente para los pobres. En los asuntos espirituales no existen ricos. Así que Cristo dice: “Bebed [y comed] de ella todos…” invita CRISTO (Mt.26.27).
24. CRISTO invita, pero nótese que la invitación la hace a aquellos que ya están sentados con ÉL en La Mesa. ¿Estas ya tú sentado dignamente con Él en Su Mesa? Si es así, puedes comer y beber del pan y de la copa de la NUEVA ALIANZA con toda confianza; pero si no es así, hoy mismo te invito con toda solicitud, que entres a cuentas con el SALVADOR, mientras aun brilla el Sol en lo alto por ti.
25. Si vives mal siendo cristiano, deja pasar el pan, deja pasar el vino, véalo de lejos, no alargues tu mano para tomar del pan y del vino que no estas honrando. El pan y el vino es para aquellos valientes que, humildes, están sentados en paz en la mesa de su Salvador. Participar viviendo mal, trae consecuencias de parte de Dios sobre nuestras propias vidas (I Cor. 11).
Bendito, pues, el pan que CRISTO nos dio, y bendita la sangre con que nos bendijo. Sean benditos los elementos que Cristo tomó para simbolizar Su presencia completa entre nosotros.
“HACED ESTO…” Así fue ordenado, así fue escrita, así se ha de hacer hasta el fin de los tiempos. Mientras tanto, ¡qué anhelo más grande que se cumpla pronto Mateo 26.29!
“Os digo que desde ahora no beberé más de este fruto de la vid hasta aquel día en que lo beba nuevo con vosotros en el reino de mi Padre”.
Por ahora… solo podemos decir: “El Espíritu y la Esposa dicen: «¡Ven!». El que oye, diga: «¡Ven!». Y el que tiene sed, venga. El que quiera, tome gratuitamente del agua de la vida”
El que da testimonio de estas cosas dice: «Ciertamente vengo en breve». ¡Amén! ¡Ven, Señor Jesús!” (Apoc. 22.17, 20).
¡Vengamos y tomemos de la MESA DEL SEÑOR que en este día ÉL nos bendice!
2. Un estilo de vida fundado en el esoterismo.
El esoterismo es una práctica muy antigua venida fundamentalmente de distintas culturas del oriente que creen en la reencarnación (por eso son vegetarianos, ni matan insectos), creen en las “regresiones a otras vidas”, y que el hombre puede llegar a conocer el futuro por distintos medios. Están los que enseñan a salirse del cuerpo y hacer las llamadas “traslaciones espirituales”.
Hay en este plano, los que creen en el horóscopo, los que creen en las runas, los que se ven el tarot, los que se ven la suerte, los que ven el futuro por las hojas de té, etc.
Nunca antes en nuestro país se han visto tantos esotéricos como ahora. Ponga una piedra azul en su casa y tendrá buena suerte, ponga una piedra de tal mineral y tendrá dinero. Ponga una pirámide sobre un billete y no le faltará la plata. Ponga una pirámide sobre su cama y no envejecerá. Ponga un elefante oriental de losa y tendrá felicidad…
Lo triste es que la Palabra dice que Dios prohíbe todo esto (Isaías 47:11-15):
“Vendrá una destrucción sobre ti; caerá sobre ti un quebrantamiento que nos podrás evitar. Una destrucción que no podías suponer vendrá de repente sobre ti. Persiste tú ahora en tus encantamientos y en la multitud de tus hechizos, en los cuales te fatigaste desde tu juventud. ¡Quizás podrás mejorarte! ¡Quizás te fortalecerás!. Te has fatigado en tus muchos consejos. Comparezcan ante ti y te defiendan los contempladores de las estrellas, los que cuentan los meses, para pronosticar lo que vendrá sobre ti. He aquí serán como el tamo; el fuego los quemará, no salvarán sus vidas del poder de la llama; no quedará brasa para calentarse ni lumbre a la que arrimarse. Así te serán aquellos con quienes te fatigaste, los que traficaron contigo desde tu juventud; cada uno irá por su camino, no habrá quien te salve”.
Esas palabras duras y tremendas son sólo a causa de una verdad Dios no comparte su gloria con nadie: “Yo Jehová ese es mi nombre y a ninguno daré mi gloria ni a los ídolos mi alabanza” Isaías 42:8.
3. UNA RELIGIOSIDAD SIN COMPROMISO
Es fácil descubrir que muchos hombres y mujeres de nuestro tiempo buscan tener su conciencia religiosa y a Dios mismo bajo control por medio de actos religiosos que aparentan ser suficiente como para salvarnos cuando en verdad nos alejan de Dios.
Los judíos viven y en tiempos del nuevo testamento se nos dice que vivían de acuerdo a pautas religiosas externas pero que mantenían sus corazones lejos de Dios: “este pueblo de labios me adora, más su corazón está lejos de mi”.
La palabra religión viene del latín RE _LIGARE que significa volver a ligar, volver a unir al hombre con Dios. Es decir, la religión es el esfuerzo humano por unir al hombre con Dios. Es el esfuerzo de una persona por tener sus relaciones con Dios en buenas condiciones. La manera de que la religión sea tal es por medio de actos religiosos, por medio de ritos, de costumbres, tal como la celebración de ciertas fiestas, de ciertas actos humanos.
La religión es y siempre será un esfuerzo humano por alcanzar el corazón de Dios. Lo lamentable de ella es que casi siempre es un acto, antes que una relación personal con Dios.
Muchos celebran mandas con la finalidad de alcanzar a Dios y rompen sus rodillas, quebrantan sus cuerpos, se castigan a si mismos, sufren y se torturan de manera atroz.
Muchos creen que a Dios se la agrada haciendo largas y repetidas oraciones, que una y otra vez se dicen sin saber por qué y con qué objetivo.
La religión produce ídolos de construcción humana que tal como dice el salmista tienen ojos y no ven, tienen boca y no hablan, tienen pies y no caminan. Son solo construcciones humanas que parten en las manos del hombre y terminan allí.
Cuantos amados hermanos pueden estar aquí solo por un propósito religioso, con una buena motivación pero errada. Buscan alcanzar a Dios por medios humanos cuando Dios dice que Él “está buscando adoradores que le adoren en espíritu y en verdad”.
Venir al culto por cumplir una tradición religiosa te tranquiliza la conciencia pero no te da vida eterna. Ofrendar y diezmar por tradición es solo un acto de dadivosidad pero no puede comprar la salvación. Cantar con alegría puede ser solo un acto de felicidad y enajenación si lo haces como un esfuerzo humano por alcanzar a Dios.
III. CRISTO ES EL ÚNICO CAMINO VERDADERO
¿Sabes cuál es el problema? que el Apóstol Pedro nos enseña que NO HAY OTRO MEDIADOR ENTRE DIOS Y LOS HOMBRES SINO A JESUCRISTO (Hechos 4:12) y Juan relata que Jesús mismo enseñó que “ÉL ES EL CAMINO, LA VERDAD Y LA VIDA Y NADIE VA AL PADRE SI NO ES POR MEDIO DE ÉL” (Juan 14:6)
Los que piensan que creer en Dios es falta de evolución. Que es falta de madurez y por lo tanto falta de crecimiento interior, déjame decirte que la Biblia dice que los necios piensan en su corazón que no hay Dios y que los hombres creyéndose sabios se hicieron necios. Hoy día quiero decirles que yo prefiero ser un necio para el mundo antes que ser un necio para Dios. Por eso predico esta palabra que parece locura a los que se pierden pero que es salvación para los que en ella creen.
Los que están fundando su vida en creer que cualquier camino es viable, que cualquier camino es suficientemente bueno, que cualquier alternativa es eficaz, deben escuchar hoy que solo CRISTO SALVA.
No te sirve creer que hay Dios, que hay ángeles, que hay eternidad, lo que necesitas saber, entender y aceptar es que SOLO CRISTO TE PUEDE DAR VIDA ETERNA.
Los que están queriendo conocer el futuro y vivir una vida que mezcla a Dios con la suerte, con la adivinación, con los actos mitológicos, solo están evidenciando una terrible confusión espiritual. SOLO CRISTO ES EL CAMINO y no hay nada ni nadie que pueda ayudarte a encontrar la felicidad.
Si quieres saber el futuro yo te puedo decir que los cristianos verdaderos, los cristianos comprometidos con Cristo conocemos el futuro y no andamos buscando en el horóscopo, en algunos médium, en brujos lo que la Palabra de Dios dice. “El que cree en Cristo tiene vida eterna. El que rechaza a Cristo está condenado” y nadie puede jugar el partido a dos bandas. Nadie puede querer servir a Dios y al mismo tiempo seguir las prácticas esotéricas. SOLO CRISTO ES LA VERDAD.
Los que están intentando vivir una vida religiosa, ser buenos cristianos, ser muy religiosos y al mismo tiempo muy vacíos en su espíritu, necesito decirle que Jesús enseño que al final de los tiempos habrán algunos que le dirán Señor, Señor y le añadirán que en su nombre hicieron cosas religiosas, dijeron cosas religiosas y hasta enseñaron cosas religiosas, pero todo fue un simple entretenimiento religioso.
Por eso es que hoy, en esta mañana, queremos hacerte el llamado de Pablo: No te hagas como los del mundo, no te conformes según el evolucionismo y el sincretismo religioso de este mundo, sino deja que el espíritu transforme tu vida
Conclusión:
HACER SU LLAMADO A ABANDONA TU ESTADO DE CONFUSIÓN Y TÓMATE DE CRISTO HOY MISMO. NO HAY OTRA POSIBILIDAD PARA TI SI DE VERDAD QUIERES SER FELIZ.