La vida en colores vivos
Algo que siempre he apreciado en la Biblia es que cuando se da gran verdad, Dios con frecuencia encarna la verdad en vidas con las cuales podemos identificarnos. Él no se detiene en la teoría al enseñar en cuanto a la importancia abstracta de la fe. Menciona Abraham como modelo, que «tampoco dudó, por incredulidad, de la promesa de Dios.»
Dios no meramente habla de estar solos y ser personas de carácter y perseverancia; nos da a Elías. Nos muestra a los profetas porque tenemos mucha mayor dificultad al identificarnos con la verdad abstracta. Podemos, sin embargo, identificarnos con las personas. . . .
Dios no se limita a decir, «Ustedes deberían perdonar.» Nos da a José, que perdonó a sus hermanos por la forma en que lo maltrataron. Dios pinta a sus héroes ‘con verrugas y todo.’ Puesto que hay cicatrices y un lado oscuro en toda vida, no se nos escuda de los Jonás y Sansón, del orgullo de los reyes Saúl o del adulterio de los reyes David. Lo vemos todo en colores crudos, vivos.
En la Biblia, Dios encarna la verdad en vidas con las cuales nos identificamos.
Tomado del libro Sabiduría Para el Camino (Nashville: Grupo Nelson, 2009). Copyright © 2016 por Charles R. Swindoll Inc. Reservados mundialmente todos los derechos.