Logrando un Milagro – Predicacion

Mateo 8-9

Sea creyente o no todos de alguna manera queremos un milagro, así diga que no cree en los milagros divinos como lo expresamos los cristianos anhela que en su vida suceda algo que sea fuera de lo normal, así después lo llame casualidad. U obra del destino.

Cuando ocurre algo asombroso y excepcional para lo que no hay una explicación racional, se dice que ocurrió un milagro. Se le llama también milagro a aquello que, por medio de la intervención divina, se manifiesta en tu vida para mejorarla. A veces, se le llama milagro a algo que simplemente te hace sentir que la vida tiene magia y misterio. 

Aunque las definiciones varían, muchas religiones y culturas de ayer y de hoy poseen algún concepto de lo que es un milagro y reconocen los milagros como una realidad.

Origen y significado de la palabramilagro

La palabra milagro viene del latín miraculum, que significa "mirar" .Miraculum a su vez proviene de mirari, que significa "contemplar con admiración, asombro o estupefacción". En la antigüedad se le llamaba miraculum a todo aquello que no se podía comprender. Con el tiempo, la palabra milagro ha llegado a ser definida, según el Diccionario de la Lengua Española, como un "hecho no explicable por las leyes naturales y que se atribuye a intervención sobrenatural de origen divino".

Lo que necesitamos para lograr un milagro:

1. Creer en lo sobre natural: es muy difícil que alguien llegue a recibir algo de lo cual no cree. Para recibir algo se necesita estar dispuesto a recibirlo.

2. Aceptar la voluntad de Dios: V 1-2 “Cuando descendió Jesús del monte, le seguía mucha gente. 8:2 Y he aquí vino un leproso y se postró ante él, diciendo: Señor, si quieres, puedes limpiarme.” ¿Qué nos motiva a orar? Por lo general todos los seres humanos oramos mientras tenemos una luz de esperanza de recibir lo que estamos pidiendo. Jesucristo oraba y a pesar de estar desesperado al final de su clamor decía “Señor hágase tu voluntad mas no la mía” Mateo 26: 39. Nosotros los cristianos hacemos todo lo contrario oramos para que se haga nuestra voluntad, tanto que al no recibir el milagro que estábamos esperando tildamos a Jehová como un Dios injusto, y muchas veces hasta nos enojamos con él y según nosotros le pagamos con el látigo de la indiferencia y ya no volvemos a la iglesia.

3. Debo creer que Dios puede hacerlo. 9: 28 “Y llegado a la casa, vinieron a él los ciegos; y Jesús les dijo: ¿Creéis que puedo hacer esto? Ellos dijeron: Sí, Señor.” Muchas veces creemos y hasta predicamos sobre un Dios que hace milagros, pero Jesucristo quiere que nosotros creamos específicamente que él puede hacer lo que yo necesito.

4. Debo tener una fe activa: 8: 7-8 “Y Jesús le dijo: Yo iré y le sanaré.

 8:8 Respondió el centurión y dijo: Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo; solamente di la palabra, y mi criado sanará.” La fe no debe ser solo de teoría debemos reflejarla en cada momento de nuestra vida.

5. Cada uno recibe a la medida de lo que espera: 8: 13 “Entonces Jesús dijo al centurión: Ve, y como creíste, te sea hecho. Y su criado fue sanado en aquella misma hora.” Mateo 9: 29 “Entonces les tocó los ojos, diciendo: Conforme a vuestra fe os sea hecho.”Un hombre estaba orando en el reclinatorio, desesperado decía Dios mío dame tres mil pesitos para poder comer algo en este día, junto a el estaba otro varón desesperado porque él no se paraba rápido para el poder elevar su oración. Ya cansado de esperar se mete la mano en el bolsillo y le dice al que estaba arrodillado, necesitas tres mil pesos tómalos, pero no le quites tiempo a Dios yo necesito pedirle diez millones.

6.  Visualizar el Milagro: Hebreos 11: 1“Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.” Convicción es la capacidad de estar tan seguro de algo que es como si lo pudiera ver antes de que suceda.

7.  Declararlo: si puedo verlo en mi mente lo puedo declarar. 9: 20-21 “Y he aquí una mujer enferma de flujo de sangre desde hacía doce años, se le acercó por detrás y tocó el borde de su manto; 9:21 porque decía dentro de sí: Si tocare solamente su manto, seré salva.” antes de  tocar el borde del manto que para ella era el punto de contacto entre su fe y el poder sobre natural de Dios, al igual que para el rey Ezequías la masa de higos o para Naamán las aguas del rio Jordán. Ella lo estaba declarando en su mente. Porque el milagro comienza en la mente: debemos llamar lo que no es como si fuera. Romanos 4: 17; Joel 3: 10.

8. El milagro es una profecía: 8: 17 “para que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo: El mismo tomó nuestras enfermedades, y llevó nuestras dolencias.” Esta profecía al igual que todas solo se cumple en la vida de los que la creen.

9.  Debo querer un milagro: Juan 5: 6 “Cuando Jesús lo vio acostado, y supo que llevaba ya mucho tiempo así, le dijo: ¿Quieres ser sano?” esta pregunta parecería ilógica, quien que esté enfermo no quiere ser sano, o quien que este pobre no quiere salir de la pobreza. Pero muchas veces caemos en el conformismo cristiano, y nuestras palabras no ayudan a conseguir un milagro: “con lo que tengo es suficiente, la plata daña, quiero una casita en cualquier lugar. con tal que sea propio así sea un rancho. Etc.”

10.  Debo creer de corazón: Marcos 9: 22- 23 “Y muchas veces le echa en el fuego y en el agua, para matarle; pero si puedes hacer algo, ten misericordia de nosotros, y ayúdanos.  9:23 Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible.” Si nosotros podemos creer, Jesucristo puede hacer el milagro. Juan 11: 39-40 “Dijo Jesús: Quitad la piedra. Marta, la hermana del que había muerto, le dijo: Señor, hiede ya, porque es de cuatro días.  11:40 Jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios?”

Dios está dispuesto hacer milagros, pero necesita personas que le crean ciegamente, sin dudar. Solo confía en él no te preguntes como lo hará pero si crees veras la gloria de Dios. Para el que cree todo es posible.

Iglesia cuando Ud. esta frente al pecado, este tiene cara de atracción, de placer, de dicha, pero coloque eso que es momentáneo en una balanza, contra lo que sería una vida de servicio en Cristo, contra lo que sería una  vida en la eternidad.  

Cuando uno  hace sacrifico y deja todo pecado por más placentero que le parezca, habrá separación e ira camino a verse cara a cara con Dios.

Iglesia, Sin sacrificio no puede haber separación, y sin separación, no habrá santidad y sin santidad nadie verá a Dios.

2. NO HAY SEPARACIÓN SIN VISIÓN DE FUTURO. 1ra Samuel 2:21

Si Ud. sabe cuánto pesa su balanza, Ud. podrá tener visión de futuro.

Era honra para la familia tener hijos y aunque Elcana  comprendía la situación y la amaba, ella puso su mirada en el futuro.   Ana no deseaba  vengarse de Pinina cada vez que era fastidiada, sino complacer a su esposo dándole  hijos, y al hacer esa balanza,  ella puso su mirada en el futuro, por que comprendió que pesaba más el que su esposo fuese bendecido con hijos.

A Ana le causo un profundo dolor prometer entregar  su hijo a Dios y seguramente antes de hacer la promesa sintió el dolor de tener que separarse, pero ella sabia que su dolor se convertiría en gloria POR QUE ESA SEPARACIÓN ABRIÓ SU MATRIZ.

Ana tuvo revelación y visión de futuro.  Al darle hijos a Elcana, su amor sería ratificado aún más, sus hijos le honrarían y también, quizás por añadidura, recuperaría el dominio de casa, por que  la cosa con hijos era a otro precio.

El ver en el futuro este escenario, le dio accionar para sacrificar y de esta forma pudo separarse del niño. 

Iglesia, Debemos colocar los ojos en nuestro futuro,  vea con ojos de fe, pídale al Espíritu Santo que le revele donde va a pasar el resto de sus años,   Y tendrá la seguridad que pesa más su futuro que un placer temporal atado al lastre del pecado.

Todo sacrificio que tú y yo hagamos abre  la matriz para embarazarnos del fruto del Espíritu Santo y del poder de Dios, fruto que trae avivamiento y  promesas para nuestras vidas y nos hace alcanzar nuestra promesa en Cristo y mantener la salvación para verlo cara a cara.

Ana conocía la palabra y por ende sus promesas,  por esto,  pudo separarse; ella sabía que había una promesa escrita en Deuteronomio 28:4  : Bendito el fruto de tu vientre, el fruto de tu tierra, el fruto de tus bestias, la cría de tus vacas y los rebaños de tus ovejas.  Por esto, se atrevió a hacer planes con Dios y con Samuel. Ana tenia certeza de su futuro porque conocía la palabra.

Tiene Ud., hoy planes para presentarle a Dios? Ve tu futuro.

3. NO HAY SEPARACIÓN SIN REVELACIÓN DE VOTO O PACTO. V. 24

Le dije  al comienzo que la ofrenda de Elcana y Ana le permitía sentarse a la mesa y comer con Dios, por esto se llamaba de paz u ofrenda por el bienestar y la buena salud.  Para este punto, Ana ya sabía que le deparaba su futuro, ya sabía cuál era el fruto de su sacrificio por que tuvo visión de futuro, y al momento de entregarlo, en el momento de la separación,  Ana ya no lloraba.  Su ofrenda fue acompañada con vino, ya había gozo en su corazón.  Pero como iba a estar feliz?   Ella sabía que entregaba a Samuel pero venían más hijos para ella y de esta forma honraría a su esposo.  

Dice la palabra que Ana  trajo tres becerros,  un becerro por cada hijo que vio en su futuro.  Tres varones y dos hijas.   Hizo pacto.

CONCLUSIÓN

Ana tuvo separación pero esa separación fue  sellada con un pacto que le fue revelado por visión de futuro.

Sacrificio, visión de futuro, pacto, para experimentar la separación verdadera de todo camino que me aleja de Dios.

Tienes seguridad de que verás a Dios una vez seas llamado a su presencia?

Es tiempo de provocar separación,  corta el cordón umbilical, sé santo; presenta sacrificio de eso que te estorba y podrás tener visión de futuro donde tus promesas en Dios son cumplidas, en especial cuando provocas pacto.

Espere la continuación de este estudio, donde hablaré de Conducta y Relación.

        Desde la rebelión en el Jardín del Edén, la raza humana ha insistido en hacer su propia voluntad y pisotear la voluntad de Dios. Son muchos los hombres que aparecen en la Biblia que en algún momento fueron desobedientes a Dios, salvo José y Daniel, que la Biblia no menciona ninguna falta, sino más bien cita que no se contaminaron con su entorno, y por supuesto Nuestro Señor Jesús. Todos en algún momento desobedecieron o siguieron su propio pensamiento en lugar de aceptar lo que Dios decía en ese momento, por poner algún ejemplo citaremos a Sansón al que Dios le dijo que no se contaminara con ninguna cosa inmunda (Jue 13:4), y desobedeció comiendo la miel que esteba dentro de un cadáver de un león, y en ese tiempo los animales muertos eran inmundos (Jue 14:8-9), y al Rey Saúl, lo citaremos como ejemplo de rebeldía, porque el Señor lo mandó destruir por completo al pueblo amalecita (1S 15:2-3), esa orden implicaba exterminarlo todo, desde hombres hasta animales del campo, pasando por mujeres y niños, es decir todo lo que poseían los amalecitas (1S 15:19-23), y dejo con vida al Rey Agag, y las ovejas y vacas de buen parecer.

        He citado estos ejemplos para hacer comprender el grado de obediencia de Jesús, los ejemplos citados fueron personas puestas por Dios para un objetivo en concreto tenían poder, fama, dinero, es decir todo, pero terminaron de la siguiente manera:

·    Sin éxito, no hay éxito fuera de la voluntad de Dios.

·    Endureciendo su corazón.

·    Molestos con Dios.

·    Con un conflicto en la mente.

·    Con actitud de rebeldía espiritual.

·    Muertos en pésimas condiciones.

        Jesús en este momento concreto, podía haberlo hecho lo que cualquier humano pero entonces de haberlo hecho, no tendríamos victoria contra la rebelión, por eso cuando Jesús pronunció la oración: "No se haga mi voluntad, sino la tuya", oró en nuestro lugar, tal como lo hace un sacerdote, representando a la gente ante Dios, dándonos la victoria total sobre la rebelión por medio de Su Sangre.

2.   Victoria sobre el pecado: Jesús derramó Su Sangre a través de la corona de espinas.

        Entendamos claramente que la Biblia no creó el problema del pecado. El pecado estuvo en el mundo mucho antes que la Biblia fuera escrita.Si la Biblia no hubiera sido escrita, o si no fuera verdad, aun así tendríamos el problema del pecado en nuestras manos. Los hombres pueden hasta culpar a Dios y decir que el pecado fue culpa suya, pero eso no elimina el problema. La maldición del pecado todavía está sobre nosotros por la culpa de Adán, (Ro 5:12): Por tanto, tal como el pecado entró en el mundo por un hombre, y la muerte por el pecado, así también la muerte se extendió a todos los hombres, porque todos pecaron.

        La espina era un símbolo de la maldición de Dios sobre el pecado, (Gn 3:17-18): Entonces dijo a Adán: Por cuanto has escuchado la voz de tu mujer y has comido del árbol del cual te ordené, diciendo: "No comerás de él", maldita será la tierra por tu causa; con trabajo comerás de ella todos los días de tu vida. Espinos y abrojos te producirá, y comerás de las plantas del campo.Jesús cuando estaba sufriendo en la cruz por nuestro pecado, llevó en su frente el símbolo de esa maldición, es decir, la corona de espinas (Mt 27:29): Y tejiendo una corona de espinas, se la pusieron sobre su cabeza, y una caña en su mano derecha; y arrodillándose delante de Él, le hacían burla, diciendo: ¡Salve, Rey de los judíos!Y de esa manera indicó que llevaba la maldición en sí mismo. La Sangre derramada te dice que eres libre de la maldición del pecado.

        Jesús se hizo maldición por nosotros para que viniera la bendición a nosotros (Ga 3:13), y sufrió como humano la vergüenza del pecado en su carne, Él fue separado de Dios para que nosotros podamos tener una relación con Dios nuevamente, Él fue al infierno para que nosotros vayamos al cielo.

En la cruz, Jesús cumple la santidad y la justicia de Dios:

        Pagando el precio del pecado, y desde la cruz hasta nuestros días se abre la puerta del templo, del tabernáculo y la puerta del Edén para que tú y yo tengamos acceso al paraíso, tengamos acceso a la presencia de Dios en el tercer cielo (Ap 22:1-3): Y me mostró un río de agua de vida, resplandeciente como cristal, que salía del trono de Dios y del Cordero, en medio de la calle de la ciudad. Y a cada lado del río estaba el árbol de la vida, que produce doce clases de  fruto, dando su fruto cada mes; y las hojas del árbol eran para sanidad de las naciones. Y ya no habrá más maldición; y el trono de Dios y del Cordero estará allí, y sus siervos le servirán.

        El árbol de la vida aparece en la Biblia antes de pecar, y ahora cuando no hay pecado otra vez aparece el árbol de la vida y la pregunta es ¿Porqué?

        Porque en el principio con Adán esteba el árbol de la vida, pero cuando Adán y Eva son expulsados del huerto del Edén por el pecado el árbol queda custodiado por querubines y una espada que girada en todas direcciones, esto significaba la Santidad y la justicia de Dios, para guardar el camino del árbol de vida, porque hasta que la justicia y la santidad de Dios no se cumpliera nadie podía regresar al huerto del Edén (Gn 3:22-24).

         (Vs. 3) Y ya no habrá más maldición: Cuando vivamos en el milenio habrá muertes y reproducción sexual, pero en estos versículos estamos hablando después del milenio, después del milenio ya no habrá muerte, la muerte es último enemigo que será vencido (1Co 15:54), y ya no habrá maldición y que es la maldición:

·    Que las mujeres no darán a luz con dolor.

·    Que el hombre no va a sudar para trabajar para Dios.

·    Que los árboles y las flores del campo no van a producir veneno ni espinas.

·    Que no habrá ningún animal venenoso.

·    Que no habrán ni bacterias ni virus.

·    Que todo será regenerado, es decir al plan original de Dios.

        Él podría haber creado seres inocentes, no caídos, sin capacidad de errar; pero si deseaba almas redimidas, purificadas por la Sangre del sacrificio y obtenidas a un precio infinito, la expresión de tal amor y el ejercicio de tal sacrificio sólo eran posibles si el pecado estaba presente en el mundo, Jesús siendo Dios se hizo maldición para que tuviéramos vida eterna por medio de su sacrificio y a través de su Sangre.

3.   Victoria sobre la enfermedad: La Sangre de los azotes o latigazos.

         (Is 53:5): Más Él fue herido por nuestras transgresiones, molido por nuestras iniquidades. El castigo, por nuestra paz, cayó sobre El, y por sus heridas hemos sido sanados.

         (Mt 27:26): Entonces les soltó a Barrabás, pero a Jesús, después de hacerle azotar, le entregó para que fuera crucificado.

        Esta Sangre fue derramada de la espalda de Jesús, y dice que por estas llagas o heridas, somos sanados. Esta es una sanidad total para espíritu, alma, y cuerpo, incluyendo nuestras actitudes y relaciones. Enfermedad y aflicción son el resultado del pecado, pero la Sangre de Jesús nos redime de la maldición de ese pecado, entre estos dos versículos hay más o menos 750 años de diferencia, pero para nosotros más de 2000 años después, la promesa sigue vigente por medio de la Sangre de Jesús.

        Cuando Dios hizo el hombre y lo puso en el huerto del Edén, no había enfermedad en su cuerpo, Dios no tenía la intención que el hombre estuviera enfermo jamás, pero el hombre pecó, y la enfermedad entró en el género humano, por eso entendemos que la enfermedad viene del diablo:

         (Stg 1:17): Toda buena dádiva y todo don perfecto viene de lo alto, desciende del Padre de las luces, con el cual no hay cambio ni sombra de variación.

         (1Jn 3:8): El que practica el pecado es del diablo, porque el diablo ha pecado desde el principio. El Hijo de Dios se manifestó con este propósito: para destruir las obras del diablo.

        Dios quiere la sanidad para la humanidad, su sanidad está prometida para ti en su palabra: “porque yo soy:Jehová [Rapha] soy tu sanador” (Ex 15:26). Dios a provisto en Jesucristo nuestra sanidad. El ministerio de Cristo se trataba de un ministerio de sanidad, Él iba a todas partes sanando a los enfermos y echando fuera demonios (Lc 4:40-41), y también le dio el poder de sanar a sus discípulos y también a nosotros, los creyentes:

·    En (Mt 10:1) Jesús llamó a los doce y les dio el poder para sanar.

·    En (Lc 10:9) Jesús llamó a los setenta y les envió adelante para sanar a los enfermos.

·   En (Mr 16:18) Jesús dijo que creyentes pondrán sus manos sobre los enfermos y sanarán. Esta promesa nos incluye a nosotros hoy.

        Los latigazos crueles de aquellos romanos, tomaron pedazos de carne de la espalda de Jesús mientras que cortaron surcos profundos, pero cada vez que el látigo venía hacia abajo significaba que toda la humanidad podía ser librada de cualquier enfermedad o dolencia que el diablo podría infligir, Jesús murió por esa liberación nuestra es la mayor dispensación en la que el hombre ha vivido jamás, la dispensación de la gracia. ¡Gracias a Dios por Jesús! Porque Cristo llevó tus pecados, ya no necesitas sufrir por ellos. Puesto que Cristo llevó tus enfermedades y cargó tus dolencias, ya no necesitas estar afligido.

     (Is 53:4): Ciertamente El llevó nuestras enfermedades, y cargó con nuestros dolores; con todo, nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y afligido.

        (1P 2:24): Y El mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre la cruz, a fin de que muramos al pecado y vivamos a la justicia, porque por sus heridas fuisteis sanados.

        Dios quiere destruir el pecado y la enfermedad en tu vida, y esa victoria la gano Jesús en el patio donde los romanos lo estaban azotando, el castigo de aquella época de los romanos era dar 39 latigazos, o sea 40 menos 1, y en la actualidad existen 39 enfermedades, las demás son ramificaciones de estas 39, un latigazo en la espalda por cada una de las enfermedades que pueda contraer el cuerpo humano para que se cumpliese la palabra que dice: Ciertamente El llevó nuestras enfermedades, y cargó con nuestros dolores, (Is 53:4a). Jesús se podía haber revelado y no dejar que lo azotaran, poco antes cuando lo prendieron, un Discípulo que estaba con Él, le corto la oreja a un siervo del sumo sacerdote, Jesús dijo: (Mt 26:52-54): Vuelve tu espada a su sitio, porque todos los que tomen la espada, a espada perecerán. ¿O piensas que no puedo rogar a mi Padre, y El pondría a mi disposición ahora mismo más de doce legiones de ángeles? Pero, ¿cómo se cumplirían entonces las Escrituras de que así debe suceder?, si en ese momento Jesús no se hubiese dejado azotar, o se hubiese revelado, la sanidad, los dolores y lo que ello conlleva, no hubiera recaído sobre Él, por tanto no se hubiera cumplido la escritura y no tendríamos victoria sobre la enfermedad, por esa sangre que derramó Jesús tenemos la victoria ganada, por medio de la Sangre de Jesús.

4.   Victoria total, la victoria que da la salvación: La sangre de Jesús fue derramada en la cruz del calvario.

        Los clavos en las manos y pies de Jesús que le sujetaron a la cruz, derramaron sangre que era, es y  será suficientemente poderosa como para salvarnos y redimirnos eternamente del pecado y la condena de Dios en él:

(Ro 8:1-2): Por consiguiente, no hay ahora condenación para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne sino conforme al Espíritu. Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús te ha libertado de la ley del pecado y de la muerte.

(Ef 2:8-9 y 13): Porque por gracia habéis sido salvados por medio de la fe, y esto no de vosotros, sino que es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.13 Pero ahora en Cristo Jesús, vosotros, que en otro tiempo estabais lejos, habéis sido acercados por la sangre de Cristo.

        Recuerda a nuestro Señor Jesús clavado en aquella cruz, ¿merecíamos su perdón? Entonces ¿Por qué lo hizo? Lo hizo por amor, fue el acto de amor más grande jamás conocido por la humanidad, Jesús siendo el hijo de Dios, unos simples clavos no lo hubieran retenido en esa cruz, Jesús se dejo clavar para volver las cosas al plan inicial de Dios. Esta sangre que derramó cuando aquellos romanos lo estaban clavando sus manos y sus pies en aquella cruz, es la que borra el expediente, la que cancela la deuda, la  que permite que Dios te acepte de nuevo, la que hace que Dios te vuelva a perdonar, es la que hace posible la reconciliación con Dios, obteniendo la salvación y la Vida Eterna. Y lo hizo por amor.

 

CONCLUSIÓN

        Cuando el Señor Jesús, fue sentenciado a muerte en una cruz; los hombres impíos, pensaron que ejecutaban a un hombre que estaba trastornando por  su manera de vivir. No entendieron que en esa cruz, estaba el plan de Dios; preconcebido, desde el mismo principio del mundo. Ahora, invita al hombre, a que conozca, lo que ocurrió en la cruz. Ese día el Señor Jesús, estuvo en su máxima debilidad humana; había sido azotado y la espalda todavía estaba sangrante. Había sido herido en la frente, con una corona de espinas. De seguro, su rostro estaba también lleno de sangre y muy hinchado. A causa de la sed, de los golpes y del dolor, su rostro estaba totalmente desfigurado.

        ¿Qué cosas ocurrieron allí mientras Él estaba desangrándose, sintiendo que sus fuerzas se escapaban, con el corazón latiendo cada vez con menos fuerza?

        ¿Qué cosas ocurrieron allí, aparte de lo que los hombres veían como un espectáculo sangriento, terrible y atroz?

        Al finalizar ese largo tormento, el Señor Jesús entrega su vida diciendo: “Consumado es” (Jn 19:30). También enseña la Escritura, que el velo del templo se rasgo de arriba, hasta abajo. Luego vinieron tinieblas sobre la tierra, hubo un terremoto, los sepulcros se abrieron y muchos muertos resucitaron. ¡Cosas extrañas sucedieron, el día, que El murió en una cruz! Por eso tenemos un pacto con DIOS, sellado con la sangre de JESÚS:

        (He 9:11-14): Pero cuando Cristo apareció como sumo sacerdote de los bienes futuros, a través de un mayor y más perfecto tabernáculo, no hecho con manos, es decir, no de esta creación, y no por medio de la sangre de machos cabríos y de becerros, sino por medio de su propia sangre, entró al Lugar Santísimo una vez para siempre, habiendo obtenido redención eterna. Porque si la sangre de los machos cabríos y de los toros, y la ceniza de la becerra rociada sobre los que se han contaminado, santifican para la purificación de la carne, ¿cuánto más la sangre de Cristo, el cual por el Espíritu eterno se ofreció a sí mismo sin mancha a Dios, purificará vuestra conciencia de obras muertas para servir al Dios vivo?

         Cuando Jesús clamó: “Consumado es”, la palabra que El usó fue [tetelestai]. Esto era el grito de un general romano mirando una batalla desde una colina. Cuando él miraba que su lado definitivamente ganaba, él gritaba esto para hacer saber a sus tropas que habían ganado la batalla, todo estaba hecho, que se volvían a casa.

        Muchos soldados romanos estaban alrededor de la cruz. Un soldado que escuchó este grito dijo: “Verdaderamente este era el Hijo de Dios”.El no podía entender como un hombre muriendo en la cruz podía dar un grito de victoria como un general romano. Por esto él lo afirmó y  lo vemos en la Biblia: (Mt 27:54) El centurión, y los que estaban con él guardando a Jesús, visto el terremoto, y las cosas que habían sido hechas, temieron en gran manera, y dijeron: Verdaderamente éste era Hijo de Dios.En ese momento, Jesús ganó la batalla:

·    Todo lo que faltaba era pasar tres días y tres noches en el infierno.

·    El sabía que había ganado.

·    El podía gritar la victoria porque Él había cumplido exitosamente su trabajo.

·    Jesús había ganado nuevamente al hombre de regreso para Dios.

        (He 9:24-28): Porque Cristo no entró en un lugar santo hecho por manos, una representación del verdadero, sino en el cielo mismo, para presentarse ahora en la presencia de Dios por nosotros, y no para ofrecerse a sí mismo muchas veces, como el sumo sacerdote entra al Lugar Santísimo cada año con sangre ajena. De otra manera le hubiera sido necesario sufrir muchas veces desde la fundación del mundo; pero ahora, una sola vez en la consumación de los siglos, se ha manifestado para destruir el pecado por el sacrificio de sí mismo. Y así como está decretado que los hombres mueran una sola vez, y después de esto, el juicio, así también Cristo, habiendo sido ofrecido una vez para llevar los pecados de muchos, aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvación de los que ansiosamente le esperan.

Fuente: www.centraldesermones.com