Opinión: «El poder persuasivo del sometimiento» Por Desarrollo Cristiano
por Desarrollo Cristiano
La respuesta natural a la opresión es la rebelión
La respuesta natural a la opresión es la rebelión. Sin embargo, en el contexto doméstico, una conducta de agresión y confrontación solo moverá a una mayor reprensión, lo cual al final perjudicará a mujeres que no luchan desde una posición de poder. Para las esposas, abrigar hostilidad y rencor o mostrar actitudes antagónicas resultaría contraproducente. Como conducta alternativa, el apóstol Pedro aconseja el tipo de sometimiento que influenciará a los maridos que no son creyentes de tal manera que «puedan ser convencidos, sin necesidad de palabras» (1 Pedro 3.1).
Tanto el ejemplo de Cristo citado en el mismo contexto como la consiguiente conversión de los maridos ayudan a definir la naturaleza de este sometimiento. Un sometimiento que es mera obediencia o exigida conformidad a la autoridad no causará la conversión de nadie. Simplemente se supone o se da por sentado como un hecho de la vida. [Bilezikian, El lugar de la mujer en la iglesia y la familia, Nueva Creación, 1985:190–191].
¿Cuál será, entonces, el sometimiento que sí produciría conversión?
¿Qué pasos le marca el ejemplo de Cristo a una mujer oprimida (1P 2.21)?
¿Qué marca la gran diferencia entre el sometimiento en obediencia y el sometimiento en servicio?
¿Qué le aconsejaría usted a una esposa oprimida?
¿Qué opina al respecto?