Prueba el Ayuno y la Oración
Prueba el Ayuno y la Oración
“…AYUNAMOS Y ROGAMOS A DIOS…” (Esdras 8.23 DHH)
La misión de Esdras fue reconstruir el templo de Jerusalén, y hubo momentos en que se sintió abrumado. Esto es lo que hizo: “…Ayunamos y rogamos a Dios por todo esto, y Él nos atendió” (Esdras 8:23 DHH).
Cuando estás dispuesto a privarte de comida y sacar tiempo para buscar a Dios con todo tu corazón, Él te va a responder. ¿Cuándo deberías ayunar? Observemos tres cosas por las que Esdras ayunó y oró:
1) “…Para pedirle que nos llevara con bien a nosotros…” (v.21 DHH).
Sin la guía de Dios, estás abandonado a tus propios criterios y eso te puede llevar a problemas difíciles de solucionar más tarde. Dios no quiere que te adentres en el futuro a ciegas, esperando sin más que las cosas vayan bien. Su promesa es: “Clama a mí y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces” (Jeremías 33:3).
2) Para pedirle por “nuestros pequeños” (v. 21 LBLA). Puesto que Dios es Padre, puedes estar seguro de esto: cuando le pides por tus hijos, Él va a intervenir en sus vidas. Samuel fue moldeado para ser uno de los mejores profetas de Israel gracias a las oraciones de una madre piadosa llamada Ana.
3) “…Por nuestras posesiones” (v.21 DHH). Si tenemos en cuenta la tasa de desempleo, los embargos y la volatilidad de la Bolsa, deberías consultar a Dios antes de tomar decisiones de índole financiera. ‘¿Ha prometido Dios bendecirme en mis finanzasí’ Sí, pero sólo si tu corazón está en armonía con Su voluntad y tu deseo es hacer lo que a Él le agrada.