¿Te estás guardando las Buenas Nuevas de Salvación?
Base Bíblica: 2 Reyes 7:1-15
Introducción:
En mundo necesita las Buenas Nuevas de Salvación. Es un imperativo que las proclamemos, no una opción. ¿Qué estamos haciendo para proclamar a Cristo entre quienes nos rodean? Dios necesita hombres y mujeres con un corazón dispuesto a emprender la tarea. En el día de hoy veremos de qué manera el Señor utilizó a cuatro personas enfermas de lepra para llevar el mensaje a una ciudad que estaba expectante y se creía al borde del abismo. Si abrimos nuestro corazón para el Señor, Él nos utilizará en Su obra.
I.- No podemos callar el mensaje de las Buenas Nuevas que tenemos con nosotros
1.- Al igual que los leprosos, ¿estamos siendo egoístas (v. 9)?
2.- ¿Nos estamos quedando callados con las Buenas Nuevas?
3.- Dios utiliza a las personas que disponen su corazón para llevar las Buenas Nuevas:
a.- Utilizó a los leprosos (vv. 3, 4)
b.- Si estamos en el Plan de Dios, donde quiera que vamos nos veremos confrontados con las Buenas Nuevas
4.- Dios no usa a gente capaz y elocuente sino a hombres y mujeres dispuestos de corazón.
II.- Fuimos escogidos por Dios para llevar las Buenas Nuevas al mundo
1.- Somos portadores de las Buenas Nuevas en medio de la incredulidad del mundo (v. 2)
a.- Dios hace posible lo imposible
b.- Quien no recibe las Buenas Nuevas acarrea las consecuencias por su actitud
2.- Fuimos llamados por Dios para anunciar las Buenas Nuevas (1 Pedro 2:9, 10)
a.- Somos linaje escogido por Dios
b.- Fuimos rescatados por Dios del mundo de las tinieblas en el que nos encontrábamos
3.- Todos tenemos algo especial que compartirle al mundo. Dios sigue obrando en medio de su pueblo (2 Reyes 7:10, 11)
III.- Estamos llamados a asumir el compromiso con las Buenas Nuevas
1.- Somos testigos de las Buenas Nuevas de Dios para Su pueblo (mateo 5:1)
2.- Debemos asumir compromisos y determinación de cumplir nuestra misión, como lo hicieron los cuatro leprosos (1 Reyes 7:12-15)
3.- Si nos “guardamos” las Buenas Nuevas de Jesucristo y no las compartimos, “no estamos haciendo bien” (Mateo 28:18-20)
4.- No podemos seguir callando el mensaje que tenemos y que, sin duda, puede transformar a las personas
Conclusión:
Los cuatro leprosos tenían un mensaje que llevar. Provisión de Dios para todos. Sin duda estuvieron tentados de quedarse con las Buenas Nuevas; sin embargo, les remordió la conciencia. Y decidieron llamar a todos para que recibieran la bendición. Igual debemos hacer nosotros con el mensaje de Jesucristo. No podemos quedarnos con esa bendición para nosotros sino para la humanidad. ¡No podemos detenernos!