Biblia

Viviendo de Apariencias

Viviendo de Apariencias

Hay personas que han usado tantos disfraces a lo largo de sus vidas, tratando de ganar la aprobación o el cariño de otros, que ya no pueden definir quienes son en realidad.

Las apariencias son nuestro mecanismo de defensa ante los problemas de la vida pero cuando esto se torna en nuestra forma de vivir, aunque el exterior se vea pleno de vida nuestro interior se va marchitando, secando hasta la muerte.

El problema de vivir de apariencia no solo era mal de los de afuera de la iglesia. Por eso Jesús les habla a todos, los de afuera y a los de adentro. V 1 “Entonces habló Jesús a la gente y a sus discípulos, diciendo:”

Una persona que vive de apariencias muchas veces dice algunas verdades, el problema es que no vive conforme a lo que dice, y corre el riesgo de dañar la vida de los demás. V 3 “Así que, todo lo que os digan que guardéis, guardadlo y hacedlo; mas no hagáis conforme a sus obras, porque dicen, y no hacen.” Un padre fumador le puede enseñar a su hijo que fumar es malo para la salud; el hijo va a aprender que fumar es malo…pero va a fumar.

Una persona que vive por apariencias exige a los demás lo que él no es capaz de hacer. V 4 “Porque atan cargas pesadas y difíciles de llevar, y las ponen sobre los hombros de los hombres; pero ellos ni con un dedo quieren moverlas.” Es incumplido pero le molesta que a él le hagan esperar, nunca paga el dinero que pide pero le molesta que a él no le paguen.

Una persona que vive de apariencia hace las cosas solo por figurar. V 5-6 “Antes, hacen todas sus obras para ser vistos por los hombres. Pues ensanchan sus filacterias, y extienden los flecos de sus mantos;  23:6 y aman los primeros asientos en las cenas, y las primeras sillas en las sinagogas,” el día en que alguien no le reconoce su trabajo se frustra y se desanima de seguir trabajando.

Consecuencia de una vida de apariencias:

1. Se convierte en un estorbo y no en ayuda. V 13 “Mas ¡ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque cerráis el reino de los cielos delante de los hombres; pues ni entráis vosotros, ni dejáis entrar a los que están entrando.” Nosotros no debemos ser parte del problema debemos esforzarnos por ser parte de la solución.

2. Se acostumbra hacer las cosas por interés. En lo espiritual tapan su maldad con oraciones. V 14 “¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque devoráis las casas de las viudas, y como pretexto hacéis largas oraciones; por esto recibiréis mayor condenación.” Y en lo secular engañan a la gente con sus palabrerías, son unos charlatanes.

3. Arrastran a otros en su error. V 15 “¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque recorréis mar y tierra para hacer un prosélito, y una vez hecho, le hacéis dos veces más hijo del infierno que vosotros.” La boca de un cristiano hipócrita habla de las maravillas de Dios y lleva a los demás a creer en Cristo, pero su vida los lleva al infierno.

4. Se vuelve superficial y materialista. V 16 “¡Ay de vosotros, guías ciegos! que decís: Si alguno jura por el templo, no es nada; pero si alguno jura por el oro del templo, es deudor.” Piensa que una vida de bendición solo es hablar de dinero.

5. Pierde el equilibrio de las cosas. V 23 “¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque diezmáis la menta y el eneldo y el comino, y dejáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe. Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello.” Hay personas que por hacer algo dejan de hacer otra cosa. Por estar con la familia se alejan de Dios, o por pretender estar con Dios se olvidan de la familia.  La palabra dice que para todo hay tiempo

6. Se cree el mejor, siempre piensa que él lo hubiera hecho mejor, el problema es que nunca hace algo. V 30 “y decís: Si hubiésemos vivido en los días de nuestros padres, no hubiéramos sido sus cómplices en la sangre de los profetas.” Hoy nosotros decimos si hubiéramos estado en el tiempo de Jesús no lo hubiéramos matado.

En conclusión un hipócrita solo se preocupa por lo externo, así por dentro se pudra cada día mas. V 27 “¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque sois semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera, a la verdad, se muestran hermosos, mas por dentro están llenos de huesos de muertos y de toda inmundicia.” Sabe que lo que está haciendo está mal, pero prefiere seguirlo haciendo.

Una persona que vive de apariencias gasta más de lo que gana, vive endeudado, es pobre pero prefiere no reconocerlo y engañarse a si mismo.

Seamos auténticos, aun con el riesgo de no gustar o de no ser aprobados por los demás. Conocer nuestras capacidades y limitaciones nos permitirá aceptarnos y trabajar en nosotros mismos para fortalecer las primeras y superar las segundas, solo así podremos sentirnos a gusto con nosotros mismos.

1 Pedro 1: 15 Sed Santo, como yo soy Santo y santo en TODA VUESTRA MANERA DE VIVIR.

El creyente es un Sacerdote en el sentido que tiene Libre acceso a la presencia de Dios, y es responsable de proclamar el mensaje de Salvación a cada vida que necesita de Jesús. Ahora no tenemos ropas especiales para ejercer el sacerdocio, ni un tiempo especifico y determinado, o efectuar algún tipo de ritual u holocausto como en el tiempo antiguo, !NO! , toda nuestra vida tiene que estar rendida a Cristo y vestirnos de santidad y obediencia a su palabra para ser pregoneros del Mensaje de Vida.

COMO SACERDOTES HEMOS DE OFRECER SACRIFICIOS ESPIRITUALES.

El primer sacrificio será nuestro propio ser Romanos 12:1, debemos de ofrecer a Dios siempre sacrificio de alabanza, es decir frutos de labios que confiesen su nombre (Hebreos 13:15).

Ofrenda al Señor, obras que testifiquen que somos de Cristo, hemos de llevar un sacerdocio santo, con la seguridad que nuestra vida es agradable al Sumo Sacerdote que es Cristo Jesús.

III) NACIÓN SANTA

Nación santificada, apartada en Cristo para Dios, como debió serlo Israel; pero nunca lo fue.

Nación: Es comunidad formada por quienes tienen una cultura y un territorio en común, y poseen en mayor o menor grado conciencia de pertenecer a ella.

La Biblia dice que somos Ciudadanos del Reino de los cielos, por lo tanto somos una nación.

Somos una comunidad llamada a testificar al mundo, de lo que Dios ha hecho en nuestras vidas, (Salvación, Sanidad, Restauración, etc.), somos una nación diferentes al resto porque hemos sido separados por Dios y vivir de manera diferente al mundo exclusivamente para EL [Dios].

IV) PUEBLO ADQUIRIDO POR DIOS

Pueblo altamente estimado de posesión de Dios, recipiente de su misericordia.

Esta nueva relación con Dios y el mundo encierra una nueva misión anunciar la luz, y en esta divulgación hay que pregonar a Cristo.

1. Por nuestros hechos. 2. Amándonos unos a otros. 3. Dando mas de lo que se recibe. 4. Por nuestras palabras.

La bendición es el resultado de la obediencia. eres un Ministro de Cristo, separado del mundo para vivir de forma diferente, hablar diferente, los que somos iluminados debemos hacer brillar la luz de la redención.

CONCLUSIÓN:

Somos Ministros y Sacerdote de un NUEVO PACTO, y este pacto contiene demandas, exigencias y bendiciones a nuestra vida personal.

Toda posición de privilegio requiere esfuerzo, sacrificio y Disciplina.

Fuente: www.centraldesermones.com