Yo era ciego, y ahora veo

Sermones Cristianos | Predicas Cristianas

Texto Bíblico: Juan 9:22-25

22 Sus padres (DEL CIEGO), contestaron así por miedo a los judíos, pues ya éstos habían convenido que se expulsara de la sinagoga a todo el que reconociera que Jesús era el Cristo. 23 Por eso dijeron sus padres: «Preguntádselo a él, que ya es mayor de edad.» 24 Por segunda vez llamaron los judíos al que había sido ciego, y le dijeron: —Júralo por Dios. A nosotros nos consta que ese hombre es pecador. 25 —Si es pecador, no lo sé —respondió el hombre—. Lo único que sé es que yo era ciego y ahora veo.

INTRODUCCION:

“La historia no la hacen los cobardes, solo la leen.” Bajo esta reflexión daré inicio a mi sermón, y es que el texto que hemos utilizado como base, para exhortar la palabra del señor, nos enseña cómo se manifiestan los líderes religiosos de la época, en contra del milagro asombroso de los tantos que realizo el maestro (Jesús), a lo largo de su ministerio en la tierra.

Vemos como se enfrentan a la cruda realidad de aceptar que el hombre que estaba delante de sus ojos era ciego de nacimiento y ahora sus ojos fueron abiertos y los de ellos permanecen cerrados (espiritualmente), para que viendo no vean y oyendo no oigan. Lucas 8:10.

Y es que ellos ocupan el lugar de los que solo pueden leer la historia del que las hace. En este caso Jesús, como decía un gran predicador conocen la historia de Cristo no al Cristo de la historia.

Voy dividir mi sermón en tres puntos, en los que espero dar luz a través de la revelación del Espíritu Santo:

1. Era ciego de nacimiento.
2. Era una derrota, para los adversarios de Cristo.
3. El ciego se convirtió en un abanderado de la causa.

1. Era ciego de nacimiento.

La historia del ciego es un de las mas fascínate y extremadamente sobrenaturales de los tantos episodios en los que se vio envuelto Jesús en su estadía en la tierra. Los estudios bíblicos nos enseñan que se encuentra con un personaje ciego de nacimiento, de una humilde familia del pueblo judío, que se habían resignado a lidiar toda su vida, con su vástago, en esa condición de discapacidad óptica. Todos en el pueblo le conocían, eso da más veracidad y más importancia al episodio que estaban a punto de presenciar los líderes judíos.

Un hombre que nunca en su vida había visto la luz del sol, ni poder contemplar, las maravillosas riquezas visuales que adornan el planeta tierra creado por Jehová de los ejércitos (Genesis.1:1), estaba compelido a vivir sin la oportunidad de desarrollarse como ente productivo, ya que en esa época no existían los métodos científicos que existen hoy día, donde los discapacitados tienen a su alcance oportunidad de aprender a leer, a ejecutar un trabajo y tener una vida semi normal. Y es lo que más me impacta de esta historia, que de lo imposible, de lo que no se podía hacer nada, Cristo lo hizo. (Génesis 1:2).

Acarreando sobre si una persecución atroz, sobre si, a causa de sus enemigos legalistas los rabinos judíos y los fariseos, que no querían aceptar que en realidad había llegado la manifestación en la tierra de Jehová Rafa (el sanador), (Exodo15:26). Por medio de su hijo hecho carne, para redimir y salvar lo que se había perdido.

El mismo del que hablan las escrituras por medio del profeta Isaías, por sus llagas fuimos nosotros curados, (Isaías 53:5).

Era imposible para ellos creer que alguien a quien ellos consideraban un vil pecador, trastornador, revolucionario, usurpador, fuera capaz de realizar tal milagro. (Lo acusaban de echar fuera demonios en nombre de Belcebú). (Lucas 11:15). Y menos en un día tan sagrado para ellos como el día de reposo, estaban impidiendo por todos los medios que esa verdad absoluta y contemplada por testigos oculares, sea dada a conocer al pueblo, acarreando serios problemas en el liderazgo eclesiástico y en las creencias arraigadas sobre la ley establecida.

Investigaron con sus familiares, con sus vecinos, con todo él que ellos pudieron, y no encontraron la verdad que ellos buscaban, sino la verdad latente. Era ciego de nacimiento, ¡no había ninguna duda! Pregúntenle a él, ya es mayor, exclamaban sus padres, pero se parece a él se oía decir a los vecinos, había una gran consternación entre los lideres judíos, eso no era lo que ellos querían que sucediera, pero “una cosa piensa el hombre, y otra la piensa Dios”, como dice el dicho popular.

¡Yo no sé, si Él es pecador o no, yo solo sé, que era ciego, y ahora veo!

2. Era una derrota para los adversarios de Cristo.

Esa aseveración puso la tapa al pomo a los líderes fariseos y judíos. Ocurrió un milagro, él lo hizo, es un gran problema que nos ha ocasionado este hombre ahora (me imagino, que ellos decían). Están a las puertas de una gran realidad que los confronta, frente al pueblo, ¿es o no este el Mesías el hijo de Dios prometido?, ¿o es un mago cualquiera enviado del mismo infierno, para romper con los parámetros religiosos que hemos inculcado a este pueblo?, ¿o quizás un lunático que le ha dado con hacer magia o brujería, para conquistarlo e imponerse como rey?

Y es ahí donde se dificulta la situación para ellos, ya que estaban frente a frente al todopoderoso, que había llegado con un firme propósito de cambiar la atmosfera totalmente, y libertar a los cautivos de mente, y de espíritu. Había llegado el Mesías, no como ellos lo esperaban, ¡no! Era como un siervo, el mismo que relatan las profecías, que habría de venir y entrar en un pollino, a la gran ciudad, (Zacarías 9:9). Eso era demasiado para ellos, no lo podían aceptar era una pesadilla, cuanta confusión, que gran expectación, o creer que era el Mesías sanador y milagroso, o seguir persiguiéndolo hasta darle muerte, no había de otra. Pero ahí es que radica el problema, era una derrota incalculable para ellos, si el pueblo creía que él había sanado al ciego, que él era el hijo de Dios, entonces habría que cambiar seriamente el modo doctrinal y darle una vuelta de 180 grados a esas enseñanzas religiosas y legalistas.

Me parece ver en el rostro de esos líderes, esa preocupación y esa clara convicción de que había que hacer algo, que había que acusar de algo a este hombre para que no siga haciendo cosas como esas que contrastan con sus creencias, y con su forma constreñida de guiar al pueblo.

Definitivamente era la cruda realidad. Habían perdido esa batalla, ellos no podían cambiar el curso de la situación, o creían o arreciaban su campaña en contra de este hombre especial. Y por último, lo más impactante:

3. El ciego se convirtió en un abanderado de la causa.

Los estudios bíblicos nos enseñan que el ciego salió a pregonar lo que había sucedido.

Yo solo sé que, él agarro lodo lo puso en mi ojos y ahora veo, no sé si es pecador, pero también sé que Dios no oye a los pecadores pero si alguno es temeroso él lo oye, ¿acaso ustedes también quieren ser sus discípulos?.

Eran algunas de las palabras que salían de boca del hombre agradecido, en defensa del que le cambio su vida para siempre, el que le dio la luz estando en obscuridad, el que del barro de la tierra soplo vida, y luz en el ciego. Es impresionante lo que pasa cuando un creyente es tocado por Cristo y recibe un milagro, se cambia la atmosfera, ¡se vuelve un caos de alegría, se cambia la vida amarga por la dulce, hay oleo en lugar de cenizas!

En conclusión, el ciego fue un gran abanderado de Jesús por haberle dado vida, es lo mismo que pasa cuando alguien viene a Él.

Cuando alguien deja que Él le guie, cuando alguien deja que su vida este guardada en él, el ciego lo pregono, hay alguien que me sano, alguien que me devolvió la vida, ese alguien es Jesús el Rabí, el que me ama, el que vino a buscar a muertos para darles vida, para bendecirlos, para llenarlo, para saciar su sed, este Cristo es la bandera del ciego y la tuya.

¡Pregona a cuatro vientos! ¡Él me dio la vida! ¡Habla de sus grandezas y conviértete en un multiplicador de su gracia!

¡SHALOM!

Fuente: www.centraldesermones.com