DIENTES

(heb., shen, gr., odous) Lit., dientes (Gen 49:12; Exo 21:24); crujir de dientes puede indicar ira (Job 16:9), remordimiento (Mat 8:12) o furor despectivo (Lam 2:16; Act 7:54).

Fuente: Diccionario Bíblico Mundo Hispano

Esta palabra es usada en diversas expresiones bí­blicas. Entre otras:

1. †œOjo por ojo, d. por d.†, para expresar que al emitir juicio sobre daños a personas el castigo debí­a ser proporcional al daño realizado (Exo 21:24; Deu 19:21).

. †œCrujir los d.†, para expresar la actitud de odio de un enemigo que ataca como una fiera (Job 16:9; Sal 35:16; Sal 37:12; Isa 5:29; Lam 2:16; Hch 7:54).

. †œCon sólo la piel de mis d.† (Job 19:20), para expresar un escape en el cual uno se salva a duras penas.

. †œA d. limpio†, para expresar una hambre extrema (Amo 4:6).

. †œLloro y crujir de d.† (Mat 8:12; Mat 13:42, Mat 13:50; Luc 13:28), para expresar el sentimiento de miedo de los que son lanzados a †œlas tinieblas de afuera†, donde tiemblan de temor.

Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano

Cuerpos duros implantados en ambos maxilares que desempeñan un papel fundamental en la masticación y que, en el caso de los animales, también son un medio de defensa.
Cuando Job, el fiel siervo de Dios, escapó por muy poco de la muerte, dijo: †œEscapo con la piel de mis dientes†. (Job 19:20.) Parece que Job querí­a decir que cuando escapó de la muerte, no tení­a pertenencia alguna o casi ninguna; escapó con la †œpiel† de lo que al parecer no tení­a ni siquiera piel.

El crujir de los dientes se utiliza con frecuencia para denotar furia (Job 16:9; Hch 7:54) o angustia y desesperación. (Mt 8:12; 13:42, 50; 22:13; 24:51; 25:30.) Tal crujir puede estar acompañado de palabras amargas y de acción violenta contra el objeto de la cólera.
En Amós 4:6 la expresión †œlimpieza de dientes† está en paralelo con †œfalta de pan†, por lo que parece indicar una situación de hambre.
Los dientes también simbolizan el poder destructivo de una nación o de un pueblo. (Da 7:5, 7, 19; Joe 1:6; Rev 9:8.) David asemeja a los inicuos, enemigos de los justos, a leones feroces, y le pide a Dios que les golpee en la mandí­bula y les quiebre los dientes, de modo que los deje indefensos. (Sl 3:7; 58:6.) A los falsos profetas de Israel se les representa como codiciosos y voraces, †œmordiendo con los dientes† y santificando la guerra contra cualquiera que no los alimenta. (Miq 3:5; compárese con Eze 34:2, 3; Mt 7:15; Hch 20:29.)
En los dí­as anteriores a la destrucción de Jerusalén se habí­a extendido el dicho: †œLos padres fueron los que comieron el agraz, pero fueron los dientes de los hijos los que tuvieron dentera†. (Jer 31:29; Eze 18:2-4.) Con estas palabras intentaban exculparse de las condiciones adversas que le habí­an sobrevenido a la nación por su iniquidad, diciendo que lo que ellos experimentaban era el resultado de lo que sus padres habí­an hecho.

Fuente: Diccionario de la Biblia