LAPIDACION

Ver apedreamiento. Lappidot esposo de Débora, que era profetisa y juez en Israel, Jc 4, 4. Lasa ® Lesa.

Diccionario Bí­blico Digital, Grupo C Service & Design Ltda., Colombia, 2003

Fuente: Diccionario Bíblico Digital

Era la manera común de aplicar la pena capital prescrita por la ley hebrea. La lapidación era la pena para la blasfemia (Lev 24:16), la idolatrí­a (Deu 13:6-10), la desecración del sábado (Num 15:32-36), los sacrificios humanos (Lev 20:2) y el ocultismo (Lev 20:27). Acán y su familia fueron apedreados por su deslealtad a Israel (Jos 7:16-26). Jesús reprendió a Jerusalén por apedrear a los profetas (Mat 23:37; Luk 13:34). Esteban fue apedreado (Act 7:58-59). Las ejecuciones por lapidación tení­an lugar fuera de la ciudad (Lev 24:14; 1Ki 21:10, 1Ki 21:13; Act 7:58).

Fuente: Diccionario Bíblico Mundo Hispano

(matar a pedradas).

Era la forma más común, entre los judí­os, de ejecutar la pena de muerte: Lev 20:2.

– Por blasfemia, idolatrí­a, violación del sábado, ocultismo: (Lev 24:16, Deu 13:32-36, Lev 20:27).

– Los hijos rebeldes y los adúlteros eran apedreados en la plaza pública, para escarmiento de Israel, Deut,Lev 21:21, Jn. 8.

– A San Esteban, Hec 7:58.

Diccionario Bí­blico Cristiano
Dr. J. Dominguez

http://biblia.com/diccionario/

Fuente: Diccionario Bíblico Cristiano

†¢Apedreamiento.

Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano

Véase APEDREAMIENTO.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado

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Apedreamiento hasta la muerte de una persona, condenada judicialmente o no.

En la Biblia aparece como una forma de pena de muerte, reservada para los blasfemos, sacrí­legos, adúlteros o asesinos (Lev. 20.27; Deut. 7.2-5; Num. 15.35; Deut 21.21; 1. Rey 21.13). En el Nuevo Testamento a Jesús le quisieron apedrear (Jn. 10.31; Jn 11.8) y Esteban murió apedreado (Hech 7.58). Pablo fue apedreado en una ocasión hasta darle por muerto (Hech. 14.18; 2 Cor. 11. 25). A medida que se romanizó la sociedad, se sustituyó por la crucifixión para los esclavos y por la espada para los romanos.

La cultura mahometana sigue aplicado en la sharia, o ley sagrada, este pena en los paí­ses más integristas, aludiendo al deber coránico de castigar a los asesinos y criminales. Interpretando el Corán de una forma rigurosa y material, inadmisible para las culturas modernas, a la mujer adúltera (no al varón) se la emparedaba hasta la muerte. (Azora IV, aleia 19). Otros más liberales interpretaban que se las encerraba en su casa (del marido o de los padres). La Sunna (o tradición) fue la que cambió la pena por la flagelación (100 azotes) y destierro para las solteras y la lapidación para las casadas. El Corán no habla de lapidar.

Pedro Chico González, Diccionario de Catequesis y Pedagogí­a Religiosa, Editorial Bruño, Lima, Perú 2006

Fuente: Diccionario de Catequesis y Pedagogía Religiosa

EN LA ESCRITURA

Siendo Palestina un país muy rocoso, la abundancia de piedras hizo natural que las usaran como misiles. El lanzamiento de piedras puede ser simplemente una señal de odio y desprecio (2 Sam. 16,6-13), o el medio de efectuar intenciones homicidas contra las que se tuvo que hacer provisión en la Ley (Éx. 21,18; Núm. 35,17). La muerte por lapidación fue al principio una expresión de furia popular análoga al “linchamiento”; luego se convirtió en un método de ejecución natural y legalmente reconocido. Éste fue regulado por la ley como el medio designado para el castigo capital (Deut. 17,5-7; Hch. 7,58).

El Pentateuco prescribe la muerte por lapidación como la pena para dieciocho diferentes crímenes incluyendo la violación del Sabbath, pero sólo para un solo crimen —el homicidio— es la pena prescrita en todos los códigos. La ejecución del criminal usualmente se realizaba fuera de las murallas de la ciudad, y de acuerdo a Deut. 17,7, los testigos en el caso debían tirar la primera piedras: “…sacarás a las puertas de la ciudad a ese hombre o mujer, culpables de esta mala acción, y los apedrearás, al hombre o a la mujer, hasta que mueran. No se podrá ejecutar al reo de muerte más que por declaración de dos o tres testigos… La primera mano que se pondrá sobre él para darle muerte será la de los testigos, y luego la mano de todo el pueblo.” (Deut. 17,5-7). La lapidación también se menciona en Hch. 7,57-58, como el medio por el cual San Esteban, el primer mártir cristiano fue ejecutado. “le echaron fuera de la ciudad y empezaron a apedrearle.”

Fuente: Driscoll, James F. “Stoning in Scripture.” The Catholic Encyclopedia. Vol. 14. New York: Robert Appleton Company, 1912.
http://www.newadvent.org/cathen/14308a.htm

Traducido por Luz María Hernández Medina. rc

Fuente: Enciclopedia Católica