VIBORA

v. Culebra, Serpiente
Job 20:16 veneno de .. lo matará lengua de v
Isa 11:8 niño .. su mano sobre la caverna de la v
Mat 3:7; 12:34


(serpiente venenosa).

– Una le picó a Pablo, y sanó, Hch.28 – De su veneno se curaban mirando a la “serpiente de bronce”, Num 21:8, Jua 3:14-16.

– En el Reino del Mesí­as, los ninos jugarán con las ví­boras, [s.11:8.

– En sentido simbólico, ¡raza de ví­boras!, Mat 3:7, Mat 12:34, Mat 23:33, Luc 3:7, Isa 11:8, Isa 30:6.

– Los cristianos serán salvados del veneno de la calumnia, Mar 16:18, Luc 10:19.

Diccionario Bí­blico Cristiano
Dr. J. Dominguez

http://biblia.com/diccionario/

Fuente: Diccionario Bíblico Cristiano

†¢Animales de la Biblia.

Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano

tip, REPT FAUN TIPO

ver, SERPIENTE

vet, Traducción de dos términos heb. y uno gr., designando posiblemente dos clases de serpientes venenosas (heb. “sh’phiphon”, “eph’eh”; gr. “echidna”). (a) “Sh’phiphon” (rastrera). Es probable que se trate de la ví­bora cerasta, la serpiente de cuernos de las arenas de Arabia y de Egipto. Era considerada un animal sagrado en Tebas (cfr. Herodoto 2:74). Es una ví­bora peligrosa, con una longitud entre los 0,90 y 1,80 m., de color gris. Tiene un cuerno por encima de cada ojo; se esconde debajo de la arena. Es posible que sea ésta la serpiente a que se referí­a Jacob, que, al morder los talones del caballo, hace caer atrás al jinete (Gn. 49:17). (b) “Eph’eh” (silbante), serpiente venenosa moradora de las tierras del mediodí­a (Neguev) (Jb. 20:16; Is. 30:6). No se sabe con certeza a qué especie de serpiente se refiere el texto. En Is. 11:8 aparece en la Reina-Valera, y se traduce el término “pethen” como ví­bora (véase SERPIENTE). (c) Gr. “echidna”, reptil venenoso que se hallaba en la isla de Malta (Hch. 28:3). Esta serpiente, bien conocida por los judí­os (Mt. 3:7), era indudablemente la ví­bora común (“Vipera communis” o “Pelias berus”), muy extendida por la costa mediterránea. El término “ví­bora” se usa en el NT para denotar a personas malvadas. Juan el Bautista llamó a la muchedumbre de fariseos y saduceos que acudí­a a su bautismo “generación de ví­boras” (Mt. 3:7), y el Señor Jesús aplicó el mismo epí­teto a los escribas y fariseos, denotando con ello el carácter mortí­fero de su oposición (Mt. 12:34; 23:33).

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado

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Ofidio especialmente venenoso, de picadura mortal, a quien la tradición consideró siempre modelo de ingratitud, traición y peligrosidad.

En la misma Escritura aparece ocasionalmente citada la ví­bora como animal nefasto para la vida: Is. 30.6. Job. 20.16.

Juan el Bautista llamó “raza de ví­boras” a los judí­os hipócritas, a los fariseos (Mt. 3.7). Pablo fue mordido por una ví­bora y, como hecho singular y prodigioso, quedó indemne, originando el estupor y apoyo de los nativos de la isla a donde habí­a naufragado. (Hech. 28.6)

Pedro Chico González, Diccionario de Catequesis y Pedagogí­a Religiosa, Editorial Bruño, Lima, Perú 2006

Fuente: Diccionario de Catequesis y Pedagogía Religiosa

(heb. ´ef·`éh, tsif·`o·ní­; gr. é·kji·dna).
Culebra venenosa provista de dientes que tienen unas caracterí­sticas muy especiales, pues pueden bascular contra el paladar cuando no se utilizan. El veneno de las ví­boras varí­a según las especies, algunas de las cuales pueden encontrarse en Palestina. Una de las más peligrosas es la ví­bora del cuerno (Vipera ammodytes), que se halla en el valle del Jordán, y otro tipo es la Vipera palaestina. La palabra hebrea ´ef·`éh por lo general se relaciona con la palabra árabe ´af·`an, que se refiere a la gariba (Echis carinatus), ví­bora venenosa que habita en las llanuras arenosas de Jericó.
En Job 20:16 se hace referencia a la fuerza del veneno de la ví­bora cuando Zofar habla del poder mortí­fero de †œla lengua de una ví­bora†. Después de su naufragio en la isla de Malta, el apóstol Pablo estaba recogiendo un manojo de leña menuda y poniéndolo sobre un fuego cuando salió una ví­bora y se prendió de su mano. Sin embargo, Pablo †œsacudió a la criatura venenosa en el fuego y no sufrió daño alguno†, aunque las personas que estaban junto a él esperaban que se hinchara de inflamación o cayese muerto. (Hch 28:3-6.)

Uso ilustrativo. La peligrosa mordedura de una ví­bora se utiliza de manera ilustrativa en Proverbios 23:32, donde el hombre sabio habla de los efectos de beber vino en exceso y dice: †œMuerde justamente como una serpiente, y segrega veneno justamente como una ví­bora† (heb. u·kjetsif·`o·ní­). El profeta Isaí­as escribió con relación a la iniquidad que practicaba Israel, el pueblo de Dios: †œLos huevos de una culebra venenosa son lo que ellos han empollado […]. Cualquiera que comí­a algunos de sus huevos morí­a, y el huevo que era aplastado producí­a una ví­bora†. (Isa 59:5.) Casi todas las culebras ponen huevos, y aunque la mayor parte de las ví­boras no son oví­paras, ciertas especies sí­ lo son.
Juan el Bautista llamó a los fariseos y a los saduceos †œprole de ví­boras†. (Mt 3:7; Lu 3:7.) Jesucristo también llamó a los escribas y a los fariseos †œprole de ví­boras† debido a su iniquidad y al daño espiritual mortí­fero que podí­an ocasionar a las personas confiadas. (Mt 12:34; 23:33.)

Fuente: Diccionario de la Biblia

equidna (e[cidna, 2191), es probablemente un término genérico para denotar serpientes venenosas. Se traduce “ví­bora/s” en el NT: (a) literalmente, de este animal (Act 28:3); (b) metafóricamente en Mat 3:7; 12.34; 23.33; Luk 3:7:¶ Nota: Para therion, traducido “ví­bora” en 28.4,5, véase BESTIA, Nº 1; véase también FIERA.

Fuente: Diccionario Vine Nuevo testamento