Asunto: Covid-19, Día de Oración
Desde el Escritorio del Pastor. ORACIÓN
Con todos nuestros problemas y preocupaciones por la enfermedad del Coronavirus (COVID-19) el Presidente ha fijado hoy como un día de oración. Creo que es algo maravilloso para los cristianos de todas las creencias religiosas.
Les da a los cristianos la oportunidad de reflexionar internamente sobre nuestra fe personal en Dios. También podemos evaluar nuestra fe exterior en lo que hacemos y cómo se manifiestan nuestras creencias personales. Este conocimiento de uno mismo definitivamente tiene una gran influencia en quiénes somos.
Tengo amigos que me cuentan cuántas maneras diferentes hay de orar. Yo digo que solo hay dos. Las cortas y las largas.
Juan 17:1-26 es generalmente conocido como la Oración de Despedida de Jesús dado que es una intercesión por la Iglesia venidera. Es, con mucho, la oración más larga de Jesús en cualquiera de los evangelios.
Luego, en una reunión de la Fraternidad de Atletas Cristianos, Bobby Richardson, ex segunda base de los Yankees de Nueva York, ofreció una oración que es un clásico en breve y conmovedor: «Querido Dios, Tu voluntad, nada más, nada menos, nada más». Amén.»
Estoy seguro de que recuerdas lo que dijo Jesús acerca de mover montañas, pero ¿captaste la última frase?
Marcos 11:22: Entonces Jesús dijo a los discípulos: “Tened fe en Dios. 23 De cierto os digo, podéis decirle a este monte: ‘Que seas levantado y arrojado al mar’, y sucederá. Pero realmente debes creer que sucederá y no tener ninguna duda en tu corazón. 24 Os digo, podéis orar por cualquier cosa, y si creéis que lo habéis recibido, será vuestro. 25 Pero cuando estés orando, perdona primero a cualquiera a quien tengas rencor, para que tu Padre que está en los cielos también perdone tus pecados.” (NTV)
Oración larga o corta. Primero tienes que arreglar tu relación con Dios y luego con los demás aquí en la tierra. En segundo lugar, tienes que creer realmente, de verdad, en lo profundo de tu alma, que Dios contestará tu oración. Luego debes susurrar una oración para que aceptes lo que Dios hace con tu oración.