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El Libro del Apocalipsis (Apocalipsis 11-B)

El Libro del Apocalipsis (Apocalipsis 11-B)

Pero primero se nos da un vistazo de la coronación en el Cielo del rey legítimo de Dios. ¡Parece como si nunca se cansaran de coronarlo en el Cielo!

• En Apocalipsis 5 se le dio el título de propiedad de la tierra y los ancianos arrojaron sus coronas a Sus pies.

• En Apocalipsis 11 se le reconoce como el Rey legítimo de la tierra.

• En el capítulo 19, aparece como Rey de reyes y Señor de señores, y sobre su cabeza hay muchas coronas.

La Palabra de Dios nos dice en el versículo 14 que el segundo ay ha pasado; y he aquí, el tercer ay viene pronto.

Mira Apocalipsis 11:14 El segundo ay ha pasado; y he aquí, el tercer ay viene pronto.

Hay tres ayes en el libro de Apocalipsis…

Mira Apocalipsis 8:13, leemos, “Mientras miraba, escuchó un águila que volaba en el aire gritar a gran voz: “¡Ay! ¡Aflicción! ¡Ay de los moradores de la tierra, a causa de los toques de trompeta que están a punto de ser tocados por los otros tres ángeles!”.

• El primer ay se registra en Apocalipsis 9:1-12;

• El “segundo ay” en Apocalipsis 9:13-21 y

• El tercer ay se revela después del juicio de la séptima trompeta. Este ay es paralelo a la trompeta que suena en Joel 2 y señala la consumación del plan de Dios para el mundo entero.

-Este tercer ay marca el final del juicio de Dios sobre el pecado; ocupa el libro de Apocalipsis hasta el capítulo 19, cuando el Reino de Cristo se establece en la tierra. Incorporados dentro de este tercer y último ay están las siete “copas” de la ira de Dios, descritas en Apocalipsis 16:1-21.

-Esta serie de juicios es el mayor horror que los ciudadanos de la tierra jamás hayan visto. Jesús dijo: «Si aquellos días no se hubieran acortado, nadie sobreviviría» (Mateo 24:22).

Lo más probable es que 11:18 insinúe el tercer ay que incluirá la batalla de Armagedón. —la batalla final entre Dios y Satanás. Esto comenzará cuando el ángel toque la séptima trompeta.

¿CUÁLES SON LOS AYES EN EL LIBRO DE APOCALIPSIS?

Estos tres ayes son un conjunto completo de eventos provocados en los últimos tres toques de trompeta.

Es decir, cada uno de estos tres males está lleno de horror como el mundo jamás ha visto antes.

Es importante notar cómo hay una ampliación de los eventos desde del 1° al 3° Ay.

• Por ejemplo, las cosas hechas en el 2° son mucho más que las del 1°.

• Cada Ay termina cuando los eventos de su explosión son completado.

Por ejemplo, se da una pista sobre cuándo se completaría la 7ma Trompeta. El tiempo habría terminado.

El tercer ay (séptima trompeta) suena en Apocalipsis 11:15, leemos, Y el séptimo ángel tocó la trompeta; y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos de este mundo han venido a ser los reinos de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los siglos de los siglos.

Observe las palabras “GRANDES VOCES EN EL CIELO”

Estas GRANDES VOCES EN EL CIELO ¿de dónde vienen? Podría estar viniendo de…

(1) Hueste angélica

(2) Santos resucitados

El séptimo ángel toca la séptima trompeta, y en vez de destrucción inmediata hay fuertes alabanzas de “voces en el cielo”.

La referencia a fuertes voces implica un grupo, pero no se nos dice la identidad específica del grupo. Tal vez sean todos los que están en el Cielo, pero lo más probable es que sean ángeles en el Cielo,

Recuerda en Apocalipsis 5:11 cantando. “Entonces miré y oí la voz de muchos ángeles, que se contaban por miles y miles, y diez mil por diez mil. Rodeaban el trono y los seres vivientes y los ancianos.”

¿POR QUÉ SE REGOCIJAN ESTAS GRANDES VOCES?

En el capítulo cinco de Apocalipsis se le da al Señor el título y la escritura de la tierra. Sin embargo, durante el período de la tribulación, Satanás tiene el control total de la tierra.

¡Pero al final del período de la tribulación y la batalla de Armagedón, el Señor ahora se dispone a reclamar lo que es Suyo!

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Gobernará y reinará durante el Milenio por mil años.

Isaías 9:6 Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado estará sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios fuerte, Padre eterno, Príncipe de paz.

Observe que la palabra “hombro” es singular. No dice “Hombros”. Es decir, será cosa fácil para Él durante el Milenio gobernar y reinar.

Él no necesitará del congreso de los Estados Unidos

Él no necesitará del senado de los Estados Unidos

No necesitará la corte suprema de los Estados Unidos

Reclamará, y gobernará y la Biblia dice EL GOBIERNO ESTARÁ SOBRE SU HOMBRO .

Y ahora estas GRANDES VOCES se regocijan de que el Señor está reclamando de nuevo la tierra.

Estas GRANDES VOCES están diciendo en el versículo 15: “…Diciendo: Los reinos de este mundo se han convertido en los reinos de nuestro Señor, y de su Cristo; y él reinará por los siglos de los siglos.

El ejército celestial de los cielos se regocija!!!

Mira Apocalipsis 11:16-17 Y los veinticuatro ancianos, que estaban sentados delante de Dios en sus asientos, se postraron sobre sus rostros y adoraron a Dios, diciendo: Te damos gracias, oh Señor Dios Todopoderoso, que eres, y que eras, y que estás por venir; porque tomaste para ti tu gran poder, y has reinado.

¿CÓMO REACCIONA EL MUNDO PERDIDO ANTE DIOS QUE RECLAMA LA TIERRA?

Mira el versículo 18, Y las naciones se enojaron , y ha llegado tu ira, y el tiempo de los muertos, para que sean juzgados, y para que des recompensa a tus siervos los profetas, y a los santos, y a los que temen tu nombre, a pequeños y a grandes; y destruirás a los que destruyen la tierra.

Este evento es tan cierto que los ángeles lo cantaron como si ya hubiera ocurrido. Estaban gritando que el mundo entero ahora se ha convertido en el reino de Cristo. Estas voces estaban declarando el triunfo de Cristo y su asunción del lugar que le corresponde en el trono, reinando por los siglos de los siglos. El enfoque de esta alabanza es este: El reino de este mundo se ha convertido en el reino de Jesús.

Apocalipsis 11:19 Y el templo de Dios fue abierto en el cielo, y se vio en su templo el arca de Dios. su testamento: y hubo relámpagos, y voces, y truenos, y un terremoto, y gran granizo.

Una y otra vez, las cosas se abren en este libro.

• A se abre la puerta (4:1),

• Se abren los sellos (6:1-9),

• Se abre el abismo (9:2),

• Se abre el tabernáculo del testimonio (el lugar santísimo) (19:11),

• Se abren los libros (20:12),

• Se abre el templo de Dios (11:19). Aquí se abre a la vista humana, el verdadero y eterno templo en los cielos.

¿Sabías que había un templo literal en el cielo?

La apertura del templo muestra el arca que en tiempos del Antiguo Testamento siempre estuvo oculta, lo que significa que Dios está a punto de actuar en nombre de Israel.

• En el Antiguo Testamento, el arca estaba conectada con el tabernáculo y Moisés, la tierra y Josué, el reino y David, el templo y Salomón.

• Todos los pactos y promesas de Dios a Su pueblo están en ese arca. Las solemnes promesas de Dios no se pueden quebrantar: están establecidas para siempre en el Cielo.

• El arca era el símbolo de la presencia de Dios y el pacto de Dios con Israel.

• El arca del pacto tenía que ver con Israel, no con los gentiles o la Iglesia.

La aparición del arca anuncia el pronto cumplimiento de todo lo que Dios ha dicho, todo lo que ha prometido acerca de la tierra, los justos, los impíos , y toda la creación. Hay un hermoso pasaje que habla de la gran anticipación de toda la creación para que Dios cumpla Sus promesas.

Los veinticuatro ancianos están estrechamente asociados con el culto que se lleva a cabo en ese templo celestial. Su alabanza está directamente relacionada con la apertura del templo celestial y los posteriores estruendos de juicio que se escuchan en la tierra. Su ocupación con la Palabra, los caminos y la voluntad de Dios está vinculada con la marcha hacia adelante del propósito divino. ¡Qué lección para el pueblo de Dios en todas las épocas!

“Y hubo relámpagos, y voces, y truenos, y un terremoto, y gran granizo.”

Los truenos, relámpagos, y el granizo nos recuerda el poder de Dios que estuvo presente la primera vez que reveló Su pacto con los hijos de Israel, en la revelación de los Diez Mandamientos en el Monte Sinaí (Éxodo 19-20).

Los “relámpagos, y voces, y truenos, y un terremoto, y gran granizo” todos indican el nombre de Dios en estos eventos.

Estos eventos ocurren aquí, al sonido de la séptima trompeta, y también ocurrieron en la apertura del séptimo sello (8:5). Esto volverá a ocurrir cuando se derrame la séptima copa (16:18-21).

Conclusión:

Jesús vino la primera vez como un niño en un pesebre, un tierno Cordero. Él viene por segunda vez al final de la Gran Tribulación con gran poder, para vengarse de los que no conocen a Dios. Él rugirá desde Sión, “el León de la Tribu de Judá”.