Estudio bíblico: Juan (Parte veintiocho)

Estudio bíblico: Juan (Parte veintiocho)

Juan 20:24 – final: La conclusión dramática del libro de Juan
#BS-JO28
John W. Ritenbaugh
Dado el 04 de agosto de 1987; 83 minutos

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descripción: (ocultar) Advertencia de Jesús a María en Juan 20:17, "No me toques" se traduce con mayor precisión como "No te aferres a mí". Cualquiera de las dos traducciones no contradice el simbolismo de las primicias. (Los sacerdotes levitas tenían que «tocar» el grano para poder ofrecerlo). También el encargo que Jesús dio a los discípulos en Juan 20:23 fue que no «perdonen el pecado». pero sólo para discernir los frutos del arrepentimiento, de acuerdo con la autoridad de atar y desatar de los Sacerdotes Levíticos, aplicando la ley de Dios. Tener la mente de Cristo le da al ministerio del Nuevo Testamento la habilidad de discernir los frutos del arrepentimiento. El problema con Thomas era más su tendencia a ser un solitario, habiéndose apartado de la compañía de sus hermanos, que su duda. La insistencia de Tomás en tocar refuta la afirmación gnóstica de que Jesús no tenía sustancia corporal. El libro de Juan no solo proporciona una plétora de señales que corroboran la autenticidad de Jesucristo, sino que también muestra un patrón para vivir activamente como Dios viviría si fuera un hombre, con el efecto de edificar y sostener la fe. El epílogo (capítulo 21) pareció agregarse para contrarrestar la suposición de que Juan viviría hasta la segunda venida de Cristo, además de refutar la afirmación de los gnósticos de que Jesús no tenía sustancia física. La conclusión describe la reacción desconcertada de los discípulos ante su maestro resucitado. En este incidente, Jesús afirma formalmente, usando expresiones que identifican diferentes niveles de amor, la intensa responsabilidad y dificultad del encargo dado a Pedro.