Obreros cansados
Trabajadores cansados
Servicio matutino del 13 de febrero de 2022
Iglesia Bautista Immanuel, Waggoner, OK
Rick Boyne
Punto del mensaje: Podemos cansarnos cuando no ubicamos nuestra motivación.
Pasaje de enfoque: Gálatas 6:9-10
Introducción: ¿PAPA, HUEVO O CAFÉ?
Había una vez una hija que se quejaba a su padre de que su vida era miserable y que no sabía cómo iba a salir adelante. Estaba cansada de pelear y luchar todo el tiempo. Parecía que cuando se resolvía un problema, pronto le seguía otro.
Su padre, un chef, la llevó a la cocina. Llenó tres ollas con agua y colocó cada una sobre un fuego alto. Una vez que las tres ollas comenzaron a hervir, colocó papas en una olla, huevos en la segunda olla y granos de café molidos en la tercera olla. Luego los dejó reposar y hervir, sin decir una palabra a su hija. La hija, gimió y esperó con impaciencia, preguntándose qué estaba haciendo.
Después de veinte minutos apagó los quemadores. Sacó las papas de la olla y las colocó en un bol. Sacó los huevos y los colocó en un tazón. Luego sirvió el café con un cucharón y lo colocó en una taza. Volviéndose hacia ella, preguntó. "Hija, ¿qué ves?
"Patatas, huevos y café" ella respondió apresuradamente.
"Mira más de cerca", dijo él, "y toca las papas". Ella lo hizo y notó que estaban blandas. Luego le pidió que tomara un huevo y lo rompiera. Después de quitarle la cáscara, observó el huevo duro. Finalmente, le pidió que tomara un sorbo de café. Su rico aroma le hizo sonreír.
"Padre, ¿qué significa esto?" preguntó ella.
Luego explicó que las papas, los huevos y los granos de café habían enfrentado la misma adversidad: el agua hirviendo. Sin embargo, cada uno reaccionó de manera diferente. La papa entró fuerte, dura e implacable, pero en agua hirviendo se volvió blanda y débil. El huevo era frágil, con la fina cáscara exterior protegiendo su interior líquido hasta que se puso en agua hirviendo. Entonces el interior del huevo se endureció. Sin embargo, los granos de café molidos eran únicos. Después de exponerlos al agua hirviendo, cambiaron el agua y crearon algo nuevo.
"¿Cuál eres?" le preguntó a su hija. "Cuando la adversidad llama a tu puerta, ¿cómo respondes? ¿Eres una patata, un huevo o un grano de café?"
En la vida pasan cosas a nuestro alrededor, nos pasan cosas, pero lo único que realmente importa es lo que pasa dentro de nosotros.
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I. Cansarse
a. Sacar nuestro enfoque de Jesús y de nosotros mismos, situación, circunstancias, etc
b. Hacer las cosas por nuestro propio poder, en lugar de confiar en el poder de Dios
c. Sentirse despreciado o ignorado
II. Renunciar
a. demasiado cambio; no es el tipo de cambio que queremos o esperamos
b. frustrarse por la falta de resultados
c. en lugar de renunciar a duplicar
III. Reuniendo fuerzas
a. Debemos mantener la mirada en Jesús, que nos guía y completa nuestra fe. Soportó la vergüenza de ser clavado en una cruz, porque sabía que más tarde se alegraría de haberlo hecho. ¡Ahora está sentado al lado derecho del trono de Dios! (Hebreos 12:2 NVI)
b. Así que, mis queridos hermanos y hermanas, sean fuertes e inamovibles. Trabajad siempre con entusiasmo para el Señor, porque sabéis que nada de lo que hacéis para el Señor es jamás inútil. (1 Corintios 15:58 NTV)
c. Trabajen de buena gana en todo lo que hagan, como si estuvieran trabajando para el Señor y no para las personas. (Colosenses 3:23 NTV)
d. Obviamente, no estoy tratando de ganar la aprobación de la gente, sino de Dios. Si complacer a la gente fuera mi objetivo, no sería un siervo de Cristo. (Gálatas 1:10 NTV)
Solicitud/Llamado a la Obediencia: ¿Estás cansado? ¿Estás listo para rendirte? Entonces escucha ahora la Palabra del Señor: "Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. "Llevad mi yugo sobre vosotros y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y ENCONTRARÉIS DESCANSO PARA VUESTRAS ALMAS. "Porque mi yugo es fácil y ligera mi carga". (Mateo 11:28-30 LBLA) Mi carne y mi corazón pueden desfallecer, pero Dios es la fortaleza de mi corazón y mi porción para siempre. (Salmos 73:26 LBLA) sobre todo, tomad el escudo de la fe con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno. (Efesios 6:16 LBLA) Si nunca has confiado en Jesús, nunca conocerás la verdadera paz o el descanso. La Biblia dice “que si confiesas con tu boca a Jesús por Señor, y crees en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo; porque con el corazón se cree para justicia, y con la boca se confiesa para salvación.” (Romanos 10:9-10 NVI)