Celo selectivo – Estudio bíblico

La audiencia selectiva, especialmente por parte de los hijos o de los maridos, es un fenómeno común. Uno escucha lo que quiere escuchar e ignora el resto. “Sacar la basura,” es una de esas frases que se desconecta. “Haz tu tarea,” hay que repetir. Pero diga, “Hay helado en el congelador,” y la recepción es cristalina. O proclamar que el mejor amigo de uno llamó y el oyente se dirige directamente al teléfono.

El celo también sufre de selectividad. El celo es una intensidad de sentimiento hacia una persona o principio. Puede ser una virtud o dar un giro hacia el mal, como en la envidia.

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