Conocer Las Señales Del Fin De Los Tiempos

Tema: Conocer Las Señales Del Fin De Los Tiempos

Texto: 1 Sam. 1:4-10; heb. 10:19-25; Marcos 13:1-8

La Palabra de Dios está llena de profecías, muchas de las cuales ya se han cumplido. La profecía sobre la destrucción de Jerusalén se cumplió hasta el más mínimo detalle en el año 70 dC cuando los soldados romanos destruyeron por completo Jerusalén y el Templo. La quema del Templo fundió el oro que se usaba en su decoración y en los utensilios usados en el culto. El oro fundido se podía encontrar en todas partes, incluso en las grietas de las paredes del Templo. Los soldados romanos quitaron piedra por piedra los muros del Templo para recuperar el oro y cumplieron la profecía de que no quedaría piedra sobre piedra. Estamos esperando la profecía acerca de Su regreso y Jesucristo ha revelado las señales que anunciarían el fin de los tiempos.

Después de la destrucción, los judíos dejaron de ser una nación. Fueron expulsados de la tierra y ya no tenían patria. Un milagro sucedió en 1946 cuando una nación que había dejado de existir por 2000 años renació en un día como está profetizado en las Escrituras. Israel nació como nación y el idioma hebreo se convirtió en su medio de comunicación. Nunca en la historia del mundo ha sucedido tal cosa antes. Un idioma que prácticamente había desaparecido se convirtió en el idioma de Israel. Israel estaba de vuelta en la tierra hablando el idioma hebreo pero no tenía acceso a todo Jerusalén. En la guerra de 1967, Israel, Cisjordania, los Altos del Golán y toda Jerusalén quedaron bajo el control de Israel.

Dios tiene un propósito para todo lo que está sucediendo. Él ve la imagen terminada cuando nosotros solo vemos una parte de ella. Israel tiene un papel que desempeñar en el regreso de Cristo y Dios está preparando el escenario para Su regreso. En nuestra primera lectura vemos parte de un cuadro que las Escrituras pintan para nosotros con respecto a Ana. Todo lo que podemos ver es que ella no tiene hijos y es incapaz de tener uno. Vemos a una mujer que tiene una relación íntima con Dios, adora en los tiempos señalados en el Templo y confía en que Dios le concederá un hijo. Ella, como muchos otros, también debió notar el comportamiento de los hijos de Elí y resentirse por la forma en que servían en el Templo. Esta es la imagen inacabada y no hay belleza para ver. Solo podemos ver la belleza en la imagen terminada. En la imagen terminada, Ana ora por un hijo en un momento en que Dios necesitaba un siervo para reemplazar a los hijos de Elí. Ella se compromete a dar al hijo que daría a luz para servir al Señor y cumplió su promesa. Dios satisfizo su necesidad y ella respondió trayendo a su hijo Samuel para servir al señor en el Templo. Cristo tiene un propósito para cada uno de nosotros. Necesitamos observar las señales y mirar más allá de nuestras circunstancias inmediatas para enfocarnos en Cristo. Estamos viviendo en los últimos tiempos cuando todas las señales apuntan al regreso de Cristo. ¿Estás listo para encontrarte con Él?

Vivimos en una época de maldad creciente. La pornografía, el abuso de menores, el embarazo adolescente y los abortos son comunes y generalizados. Las relaciones y los matrimonios entre personas del mismo sexo incluso se permiten en algunas iglesias. La señal de un mal creciente se ve en el comercio moderno de esclavos. Las mujeres están siendo traficadas y vendidas como esclavas sexuales. Hay tanta violencia y maltrato infligido a seres humanos por otros seres humanos. ISIS y grupos como Boko Haram han llevado el mal a nuevas alturas sin precedentes. Los seres humanos están siendo llevados cautivos y sometidos a las peores formas de abuso, incluidas las decapitaciones.

Las señales de una maldad creciente finalmente harán que la luz de Cristo brille más intensamente para cumplir Su propósito. Había una nube oscura de maldad sobre el mundo cuando los nazis intentaron gobernar el mundo. Seis millones de judíos fueron asesinados muchos en las cámaras de gas de los campos de concentración nazis. En el tiempo señalado por Dios, los judíos fueron liberados y después de 2000 años regresaron a su tierra natal. Inmediatamente enfrentaron la oposición de las naciones vecinas con ejércitos bien entrenados y su victoria solo podía atribuirse a la intervención de Dios a su favor. Estas cosas tenían que suceder antes del regreso de nuestro Señor y las señales son que regresará pronto, pero estamos listos para darle la bienvenida. Cristo derramó Su sangre para pagar la pena por el pecado para que todos puedan ser salvos. Su sangre derramada nos da acceso a Su presencia y nos asegura que le pertenecemos. Como creyentes, Cristo se ha convertido en nuestro Sumo Sacerdote. “Acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua pura”. (Heb. 10:22)

El mundo está presenciando un cambio climático a un ritmo acelerado. Hay informes frecuentes de terremotos, huracanes, tormentas e inundaciones en algunas partes del mundo, mientras que otras partes sufren sequías. Hay guerras que se libran en todo el mundo. La guerra en el Medio Oriente y África ha provocado el flujo de millones de refugiados hacia las naciones desarrolladas. Muchas personas escapan de los estragos de la guerra solo para ahogarse en el mar o caer presa de los traficantes de personas. Los años 2014 y 2015 presentaron un espectáculo visible en los cielos. Cuatro lunas de sangre fueron visibles en la fiesta de la Pascua y la fiesta de los Tabernáculos en 2014 y 2015. Estas son señales de que algo importante está por suceder.

La profecía se ha cumplido y se está cumpliendo hasta el más mínimo detalle. . El nacimiento, la vida, la muerte y la resurrección de Jesucristo se cumplieron exactamente como fue profetizado. Cuando un ser querido deja la prueba de su llegada al destino previsto es una carta de su puño y letra con el sello del lugar de su nueva residencia. La promesa del Espíritu Santo vino en el tiempo señalado como lo prometió Cristo. Era claramente de su puño y letra y llevaba el matasellos del cielo que prueba que Jesús estaba en el cielo. La profecía se está cumpliendo hoy y se puede discernir claramente. Jesucristo viene pronto pero ¿estamos preparados para recibirlo?

En Jeremías se encuentra la siguiente profecía. “He aquí que envío muchos pescadores, dice Jehová, y los pescarán. Y después enviaré por muchos cazadores, y los cazarán de todo monte y de todo collado, y de las hendiduras de las peñas.” (Jeremías 16:16) Esta profecía se cumplió cuando el movimiento sionista trató de convencer a los judíos de que regresaran a Israel, pero solo unos pocos encabezaron su clamor. Luego vinieron los nazis dirigidos por Hitler y literalmente los cazaron de cada montaña y cada colina, y de las hendiduras de las rocas. Hoy en día, los judíos están regresando en gran número a Israel, lo que nuevamente es una profecía que se está cumpliendo y que se supone que sucederá antes del regreso de Cristo. La profecía sobre la segunda venida de Cristo está a punto de cumplirse. Este es el tiempo de ser fieles hasta el final “para que cuando hayamos hecho la voluntad de Dios recibamos lo prometido” (Heb.10:36) para alabanza y gloria de Dios Todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo, ¡Amén!