Desafíos Bíblicos – Estudio Bíblico

El Libro de Dios, la Biblia, nos presenta los siguientes desafíos:

Que sea proclamado (2 Timoteo 4:2).
Para que se oiga (Juan 5:25; Juan 6:45).
Para que se entienda (Efesios 3:3-4; Efesios 5:17.
Para que se crea (Romanos 10:9-10).
Para que se reciba con miras a la obediencia (Hechos 2:41; Hebreos 5:9; 1 Pedro 1:22).
Que sea vivida – Filipenses 2:12.
Que sea defendida (Filipenses 1:17; 1 Timoteo 6:12).
Que se lea con reverencia como palabra de Dios (Hebreos 4:12).
Que se lea despacio para saborear la riqueza de su mensaje (Salmos 19:9-10).</li
Que se lea imparcialmente porque Dios no hace acepción de personas (Mateo 28:18-20; Hechos 10:34-35).
Que se lea con escrutinio porque produce fe salvadora ( Romanos 10:17; Hechos 17:11).
Que sea leída y obedecida prontamente porque exige completa sumisión – 2 Corintios 6:2; Hch t 18:8; Romanos 1:5).
Que se lea para ser seguido fielmente a fin de recibir sus gloriosas recompensas (1 Timoteo 4:11-16; Apocalipsis 22:14).
Para contemplar al Hijo de Dios revelado (Hechos 17:3).
Para reflexionar sobre el poder que contiene (Romanos 1:16).
Para cumplir con las condiciones del perdón que especifica ( Marcos 16:15-16; Hechos 2:36-38).
Para pesar el alma se evalúa (Mateo 16:26).
Para evitar el pecado se expone (Juan 15:22; Santiago 1:15).
Para resistir al diablo que ha desenmascarado (Santiago 4:7).
Para apreciar el perdón que asegura (Hebreos 10:22) .
Para hacer el sacrificio que ordena (Romanos 12:1-2).
Para completar la peregrinación que ordena (2 Timoteo 4:5-8; Hebreos 12:1 -4).

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