Sirvamos fielmente a Dios – Estudio bíblico

Se cuenta la historia de un hombre encarcelado que una vez escapó de una penitenciaría estatal. Veinticuatro horas después de su fuga, su madre lo entregó a las autoridades penitenciarias.

Lo realmente triste de esta historia, es que al hombre solo le quedaban veintitrés días para cumplir cuando huyó de un detalle de trabajo. Un juez le otorgó cinco años adicionales por su fuga.

Podríamos decir, “Qué tonto fue ese hombre, arriesgando cinco años por veintitrés días.”</p

Sí, de hecho era un tonto. Sin embargo, consideremos cuántas personas arriesgan la vida eterna por lo que es infinitamente más corto. Muchos arriesgan esa morada gloriosa llamada cielo por “los placeres del pecado por un tiempo” (Hebreos 11:24-25).

Algunos prefieren “dormir en” los domingos por la mañana que adorar a Dios como Él ha mandado (Hechos 2:41-42; Hechos 20:7; Hebreos 10:24-25).

Hermanos, no cambiemos la vida eterna por la satisfacción de nuestra propia deseos egoístas. Sirvamos fielmente a Dios para que podamos escapar de la condenación eterna (1 Corintios 15:58).