¿El estado de tus finanzas te acelera el pulso? ¿Tu cerebro procesa números todas las noches mucho después de que se supone que debes estar dormido? Ahora es el momento de volverse a Dios y orar por sus finanzas.
Es difícil dar generosamente o participar en misiones a corto plazo cuando ya sentimos presiones financieras. No podemos experimentar plenamente la vida abundante que Cristo prometió si estamos enterrados en deudas y esclavizados a nuestra chequera fluctuante.
Si los temores financieros dominan sus pensamientos, ¡anímese! Jesús no es sólo el Dios de nuestra salvación. Él es nuestro Jehová-Jireh, nuestro proveedor, guía y ayuda siempre presente, y anhela llevarnos a niveles más profundos de libertad en cada área, incluidas nuestras finanzas. Aquí hay 10 oraciones por las finanzas que pueden ayudarlo a alinear su corazón y sus prácticas financieras con la voluntad perfecta de Dios.
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