4 Razones por las que las iglesias aman tanto a su expastor

Un pastor anfitrión estaba hablando con un expastor, que en ese entonces era presidente de un seminario teológico y célebre como líder denominacional distinguido. Lo habían invitado para un día especial, un regreso a casa o algo así. Todos estaban emocionados de verlo y escucharlo predicar. La asistencia fue buena. El distinguido invitado miró a su anfitrión y dijo: “¿En serio? ¿Te dijeron eso?”

“Uh, sí. Dicen que realmente lo hacen”.

“Escucha”, dijo el presidente del seminario. “Ese monumento que me construyeron fue hecho con las piedras que me arrojaron”. ¿Le tiraron piedras al ex pastor? ¿Y ahora están diciendo cuánto lo aman? Sí. Pregúntele a cualquier pastor veterano.

¿Por qué las iglesias aman tanto a su antiguo pastor?

“La mayoría de las iglesias tienen dos pastores por detrás en su aprecio”. – Ron Lewis

Usted sirve varios años en una iglesia y tiene la típica experiencia de buenos y malos tiempos. Eres amado por unos y despreciado por otros. Es la vida. Sucede. Y luego, eventualmente, te jubilas o te mudas a otra iglesia. Después de algunos años y un par de pastores, te invitan a regresar para una gran ocasión. Y al escucharlos decirlo, los suyos fueron los años de gloria para esa iglesia. Esos fueron los mejores tiempos, habías reunido al mejor personal, todo era perfecto cuando estabas aquí. Se entusiasman con todos los sermones inspiradores que predicaste y los momentos inolvidables en la historia de la iglesia.

Eso es lo que dicen. Y les daremos el beneficio de la duda y les diremos que probablemente lo dicen en serio.

Sufren de mala memoria. Y eso no es del todo malo. Entonces, no me malinterpreten aquí. Preferiríamos olvidar algunas de esas hondas y flechas de aquellos años. Y no culparemos a los miembros por hacer lo mismo.

Pero hay una falta de sinceridad al respecto. El pastor actual a veces sufre por la comparación con el falso recuerdo de nuestros años en esa iglesia. Y es por eso que lo estamos comentando hoy.

Antes de analizar por qué las iglesias juegan este pequeño juego: idolatrar al pastor más en la memoria que cuando estaba en la escena, debemos admitir dos cosas obvias aquí…

—Algunas iglesias aman a todos sus pastores, punto. Los honran mientras están presentes y los aman con la misma sinceridad después de que se van. El nuevo predicador es amado y honrado en la misma medida en que fue amado el anterior. Estas iglesias son la excepción, por desgracia. Testimonio: En mi experiencia, la Primera Iglesia Bautista de Columbus, Mississippi, se acerca lo más posible a la perfección de esta manera. Amaban a JD Franks (1921-1946), amaban a SR Woodson (1946-1972), amaban a McKeever (1974-1986), amaban a Bobby Douglas (1987-2002, supongo) y aman a Shawn Parker (2004 hasta el presente). Eso habla mucho más de la iglesia que de los predicadores, aunque todos estos son excelentes siervos de Dios, con la posible excepción.

—Y, algunas iglesias tienen poca utilidad para los antiguos predicadores. Después de que se vaya, es historia. He servido un par de esos. Por sus propias razones, el liderazgo (y sospecho que los pastores posteriores) optaron por no tener más contacto. Una de esas iglesias a las que serví fielmente durante el seminario. Tuvimos tres años increíbles allí. Muchos años después, cuando celebraron su 50 aniversario con una gran fiesta, aunque yo era el pastor vivo de mayor edad y estaba a solo 10 millas de distancia y me hubiera gustado ser parte de los eventos, no escuché ni una palabra de ellos.

Sin embargo, esas son excepciones. La mayoría de las iglesias parecen exagerar su amor y aprecio por los predicadores “muertos” (dicho en tono de burla). La pregunta es por qué.

Entonces, vamos al grano. ¿Por qué las iglesias aman tanto a su expastor?

4 razones por las que las iglesias aman a su expastor

1. Es más seguro.

El pastor actual es el que tienen que sentarse al otro lado de la mesa y trabajar con él en varios proyectos, al que tienen que escuchar domingo tras domingo. Pero estás aquí solo por hoy. Su predicación será un cambio agradable. Entonces, aunque pensarían largo y tendido sobre jurar amor eterno al pastor actual, no tienen problemas para expresar su devoción por ti. No hay ataduras y no estará presente para hacer que respalden sus palabras con acciones.

2. Es más fácil.

Es más barato y no cuesta nada. Requiere poco esfuerzo y, francamente, no tiene sentido.

3. Es engañoso.

Decir cuánto te amaban los engaña haciéndoles creer que te apoyaron desde el principio. Si te dan su sincero aprecio ahora, quizás olvides lo que te dijeron cuando estabas aquí.

4. Es una trampa.

En cierto sentido, parece darles una licencia para no amar al chico presente. De la misma manera, un viejo amor de la época universitaria puede parecer una mejor opción que el cónyuge con el que terminamos (¡un tipo peligroso de engaño, créanme!) La gente les hace eso a los predicadores. Recuerdan mal y toman cualquier cosa que puedan para comparar desfavorablemente al pastor actual.

Le dije a un pastor que me había sucedido: “Estas personas parecen recordarme como un recaudador de fondos. Pero si alguna vez te dicen que la iglesia no tenía problemas de dinero cuando Joe era pastor, es porque tienen mala memoria. ¡Tuvimos los mismos problemas que experimentan todas las demás iglesias!” Se rió, y probablemente lo descubrió.

Tales declaraciones de amor son falsedades. Pero en su mayoría son inofensivos, así que los dejaremos ir. Los ex pastores agradeceremos a aquellos que nos expresan su amor aunque estén exagerando el impacto de nuestro ministerio. Saludaremos a los ancianos, abrazaremos a las ancianas y exclamaremos oh y ah por los bebés. Luego nos subiremos a nuestro automóvil y conduciremos a casa.

Al llegar a casa, daremos gracias al Señor por los años en esa iglesia, le daremos alabanza por ayudarnos a superarlos y exaltaremos ¡A él por siempre por sacarnos de allí!

Por favor, sonría y no se tome demasiado en serio nada de esta pequeña discusión. Está perfectamente bien honrar al ex pastor y decirle cosas lindas. Simplemente no deje de amar y honrar a la persona actual que está soportando las cargas del liderazgo en este momento.

Este artículo sobre por qué la gente ama a su antiguo pastor apareció originalmente aquí y se usa con permiso.