Aquí hay 5 “Ds” que he hecho parte de mis oraciones diarias:

Lo que sea necesario, Señor, dame…

• Deleitarse en ti como el mayor tesoro de mi corazón.

  Deléitate en el Señor y él te concederá los deseos de tu corazón. (Salmo 37:4)

• Desear conocerte, estar contigo y buscar tu reino por encima de todo.

  Deléitate en el Señor y él te concederá los deseos de tu corazón. (Salmo 37:4)
  
  

• Discernimiento que proviene de una mente renovada para conocer tu voluntad.

  Pero el alimento sólido es para los maduros, para aquellos que tienen sus poderes de discernimiento entrenados por la práctica constante para distinguir el bien del mal. (Hebreos 5:14)

• Disciplina para hacer planes para lo que discierno como tu voluntad.

  Mira bien entonces cómo andáis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos. (Efesios 5:15-16)

• Diligencia para hacer tu voluntad de todo corazón.

  ama al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con todas tus fuerzas. (Deuteronomio 6:5)