Durante los últimos años, he prestado más atención a las razones por las que se ha despedido a los pastores, incluidos algunos de mis conocidos y antiguos alumnos. En algunos casos, la congregación ha sido un grupo de personas “cabezas de chorlito” que han tratado mal a un líder; pero también he visto a algunos líderes que invitaron a tener problemas al hacer lo siguiente:
- Liderar demasiado rápido hacia el cambio. No era que el cambio no fuera necesario; fue que los líderes impulsaron el cambio con tanta fuerza y rapidez que la iglesia no estaba lista para moverse en esa dirección.
- Impulsar una agenda teológica. Aquí, no estoy hablando de alguien que promueva la herejía. En estos casos, han sido líderes que piensan que su “ismo” particular es el único correcto dentro del ámbito del evangelicalismo, y luchan por ello.
- Ser perezoso e irresponsable. Esto incluiría a los líderes que ven el ministerio como un trabajo de solo 40 horas a la semana, con poca o ninguna disposición para trabajar más allá de ese límite. También incluye líderes en iglesias pequeñas que no responden ante nadie y que a menudo ministran solos.
- Plagio de sermones. Este enfoque para la preparación de sermones siempre ha sido malo, pero el acceso a los sermones en Internet ahora lo ha hecho más fácil de hacer y más fácil de atrapar.
- Crear conflicto con otros miembros del personal. Algunos líderes son excelentes en cosas como proyectar una visión, pero no tan buenos para liderar un equipo. Cuando el personal está formado por miembros queridos a largo plazo, el conflicto puede llevar a la partida del nuevo.
- Caída moral. Muchos de nosotros no tenemos que ir muy lejos para encontrar a alguien que haya recorrido este doloroso camino. Algunas personas toman decisiones y emprenden acciones que les cuestan más de lo que alguna vez ganaron por sus malas decisiones.
- Fracasar en pastorear a la gente. Cuando este fracaso ha llevado al despido, la mayoría de las veces ha sido cuando los pastores ven su papel casi exclusivamente como el que estudia la Palabra y predica; tanto, de hecho, que ven poca necesidad de caminar con la gente.
- Mala gestión de fondos. Quizás ha estado gastando el dinero de la iglesia en formas frívolas e incorrectas, o quizás ha estado gastando sin rendir cuentas. De cualquier manera, los problemas financieros han llevado a la iglesia a desconfiar de su líder, lo que le dificulta liderar.
¿Qué otras razones agregaría a esta lista?
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