9 Razones por las que algunos pastores se quedan demasiado tiempo

Ayer, publiqué sobre “Indicaciones de que un pastor se ha quedado demasiado tiempo”, con atención particular en el liderazgo de iglesias en declive. Hoy, estos son mis pensamientos sobre por qué algunos pastores se quedan demasiado tiempo.

1. No quieren terminar un ministerio con una nota negativa. Nadie lo hace. Por lo tanto, se aferran, con la esperanza de que el próximo programa de evangelización o el próximo nuevo miembro finalmente marque la diferencia.

2. No sienten un fuerte llamado a irse. Al menos, es decir, no sienten el mismo tipo de atracción que los llevó a esta posición actual en primer lugar. Están esperando la autorización de Dios para irse.

3. Creen genuinamente que Dios todavía quiere usarlos para cambiar la iglesia. Creen que Dios los llamó allí y están dispuestos a seguir adelante en medio de declive y todavía confían en que Dios tiene planes para ellos con esa congregación.

4. Se sienten cómodos con el puesto. Incluso si no les gusta el hecho de que la iglesia no está creciendo, están contentos con el trabajo. Y, debido a que la mayoría de las iglesias no recortan un salario, se han acostumbrado a su salario incluso cuando la iglesia está en declive.

5. Su familia está totalmente asentada en la zona. En algunos casos, su cónyuge tiene un trabajo más seguro con mejores beneficios que ellos. Sus hijos se sienten como en casa en la zona. Pensar en irnos ahora sería demasiado disruptivo.

6. No tienen quien les diga la verdad. Ellos sirven solos, o no tienen amigos cuyas voces escuchen bien. Cuando sirves solo, permanecer en una situación difícil o irse cuando las cosas no van bien puede ser difícil.

7. Su iglesia no tiene un sistema para evaluar su ministerio con regularidad. Por lo tanto, la iglesia ha tolerado en silencio su liderazgo y su declive, y nadie se siente con derecho a hablar sobre sus preocupaciones.

8. Su iglesia es lo suficientemente grande como para decaer lentamente. A veces, la iglesia tiene suficientes asistentes que cualquier declive lento apenas se nota. Mi experiencia es que los pastores, sin embargo, conocen la realidad de la situación, y algunos aún eligen quedarse por alguna de las razones enumeradas aquí.

9. Simplemente están esperando que otra iglesia los llame. Han enviado sus currículos y han notificado a todos sus conocidos sobre su disponibilidad. Tan pronto como la puerta se abre en otro lugar, se van, pero mientras tanto siguen sirviendo donde están actualmente.

¿Qué agregaría a esta lista?

Este artículo apareció originalmente aquí.