La respuesta más directa se encuentra en 1 Corintios 11, 5-6: Pero toda mujer que [públicamente] ora o profetiza, [enseña, reprende, consuela] cuando tiene la cabeza descubierta, afrenta su cabeza [a su marido] ; es lo mismo que [si su cabeza estuviera] afeitada. (6) Porque si la mujer no quiere usar [una cabeza] cubierta, entonces también debe cortarse el cabello…"  Biblia Amplificada.  Entendemos que este estándar se aplica a las mujeres adultas seguidoras de Cristo como su Redentor y Señor, que asisten a las reuniones públicas de la iglesia.

El apóstol Pablo explica anteriormente en 1 Corintios 11:3 la razón para que una mujer se cubra la cabeza: "la cabeza de todo varón es Cristo; y la cabeza de la mujer es el varón; y la cabeza de Cristo es Dios.”   El orden correcto es: Dios, Cristo, hombre, mujer.  El velo sobre la cabeza de la mujer muestra que el varón es la cabeza de la mujer, así como Cristo es la cabeza del varón, y Dios es la cabeza de Cristo.  Le sugerimos que si comprende y aprecia lo que representa la cubierta en el arreglo de Dios, el orden y el lugar de la mujer en la iglesia, entonces debería considerar cubrirse la cabeza.  Cubrirse la cabeza sería un privilegio más que una regla o costumbre.  Tu conciencia te guiará.