La Iglesia es una sola, desde el punto de vista de las Escrituras. En el lenguaje del Apóstol, es «La Iglesia de los Primogénitos que están inscritos en los cielos»; o la «Iglesia del Dios viviente»; o también, «La Iglesia de Cristo». 12:23`; `1 Ti. 3:15`; `Rom. 16:16`. Fue esta Iglesia la que nuestro Señor estableció y no le dio nombre de partido. Era simplemente la Iglesia de Cristo. Desde entonces, las buenas personas, más o menos confundidas por los errores de la Edad Media, se han separado en varias bandas e iglesias de organización humana y se han unido por credos humanos. Estos son conocidos por varios nombres. Ninguna de estas Iglesias de hombres está autorizada por la Biblia ni mencionada en ella. Sin embargo, la única "Iglesia del Dios Viviente" está compuesto por el pueblo santo de Dios en todas estas denominaciones, o fuera de todas ellas, según sea el caso. Por tanto, la Iglesia más antigua es la Iglesia de Cristo; y es la única Iglesia, en la estimación Divina. Cada santo debe desear y esforzarse por ser miembro de esta Iglesia como su mayor privilegio. Los creyentes consagrados se unen a esta Iglesia en un sentido de prueba ahora, pero la entrada a la membresía plena en esa Iglesia, que es el Cuerpo de Cristo, se otorgará solo a los «vencedores», después de que hayan terminado su carrera y hayan llegado a ser participantes de la Primera Resurrección.