¿Qué les pasa a los que nunca han oído?

P: ¿Qué les pasa a los que nunca han oído el evangelio? ¿Son enviados al infierno porque no aceptaron a un Jesucristo del que nunca oyeron hablar?

R: Los hombres y las mujeres no son condenados al infierno en función de si han oído hablar de Jesucristo o no. Más bien, son justa y apropiadamente condenados en base al hecho de que son pecadores. De hecho, son pecadores que no han actuado responsablemente en lo que Dios ya les ha revelado, ya sea a través de la luz de la creación (Rom. 1), a través de la luz de la conciencia (Rom. 2), o a través de la luz de Cristo. (Romanos 3). Si las personas responden a cualquier luz que tengan, entonces Dios les enviará la luz del evangelio. Debido a que a nadie se le ha ocultado la existencia de Dios, todos somos responsables directamente ante Él (Lucas 12:47-48).

Mientras que la Biblia afirma que Cristo es el único Salvador (Hechos 4:12), también afirma que Dios es verdaderamente justo (Job 34:12) y que ama a la humanidad con un amor eterno (Juan 3:16). Por lo tanto, trabajemos aún más para llevar el mensaje de reconciliación de Dios a un mundo que necesita desesperadamente la salvación (Rom. 10:13-15), sabiendo que no hay otra manera de llegar a Él sino a través de Su Hijo, el Señor Jesucristo (Juan 14:6).

Finalmente, debemos preguntarnos, si aquellos que nunca han oído el evangelio están destinados al cielo, ¿por qué deberíamos intentar evangelizarlos? ¿No sería más prudente simplemente mantener a todos en la oscuridad? De hecho, si realmente llevas este argumento a su conclusión lógica, ¡Jesucristo no habría venido a buscar y salvar a los que están perdidos, sino a buscar y perder a los que ya están salvos! Entonces no sería el gran Salvador del mundo; Se convertiría en su gran destructor.