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5 formas en que las iglesias habrán cambiado dentro de un año

5 formas en que las iglesias habrán cambiado dentro de un año

No soy profético. Y si soy profético, es solo porque tengo la increíble ventaja de escuchar a decenas de miles de líderes de la iglesia en las iglesias cada año.

Si bien es cierto que es difícil proyectar tendencias en tiempos típicos, es extremadamente difícil hacerlo en un momento de pandemia que se dirige, con suerte, a una era posterior a la cuarentena. Debido a que escuchamos de tantos líderes y miembros de la iglesia, permítanme aventurarme donde estarán las iglesias locales dentro de un año.

  1. Al menos el 20 por ciento de los que asistieron antes de la pandemia no regresarán a iglesia. Por supuesto, este número variará de una iglesia a otra, pero los primeros indicadores apuntan a este nivel de pérdidas. Algunos de los antiguos asistentes en persona se convertirán en asistentes solo digitales. La mayoría de este grupo, sin embargo, no asistirá en absoluto.
  1. Más pastores dejarán el ministerio vocacional durante los próximos doce meses que en cualquier otro momento de la historia reciente. Los pastores sufren una muerte por mil cortes. Por lo general, no es solo uno o unos pocos factores los que empujan sus límites, es el efecto gota a gota de las constantes críticas y conflictos que experimentan. Esa presión y desánimo continuos se han visto exacerbados por las increíbles presiones que trajo la pandemia.
  1. Las iglesias pasarán a un nuevo énfasis en el crecimiento de la conversión. Las iglesias han sido silenciosamente desobedientes a la Gran Comisión durante tres décadas. Estamos viendo señales de una nueva llamada de atención. Los líderes de la iglesia están cada vez más convencidos de que deben guiar a sus iglesias para alcanzar a los que no creen en Cristo. Los miembros de la iglesia están reflejando esa misma convicción y compromiso. La mayor parte del crecimiento de la iglesia durante las últimas tres décadas ha sido crecimiento por transferencia, cristianos moviéndose de una iglesia a otra. Esa triste realidad está a punto de cambiar.
  1. Las iglesias iniciarán más iglesias, muchas de ellas como microiglesias. Las iglesias están pasando de un crecimiento vertical (conseguir que asista la mayor cantidad posible en un lugar el domingo por la mañana) a un crecimiento horizontal (crecimiento más allá de un sitio el domingo por la mañana). Gran parte de este nuevo crecimiento incluirá el inicio de microiglesias, congregaciones de alrededor de 25 a 30 personas. Como nota al margen que se desglosará más adelante, estas tendencias tendrán enormes implicaciones para el futuro de las instalaciones de la iglesia.
  1. Dos movimientos crecerán rápidamente: la adopción de iglesias y el fomento de iglesias. Habrá más iglesias enfermas que necesitarán ayuda en los próximos meses. Habrá más iglesias luchando sin pastores. Algunas de estas iglesias serán adoptadas; serán asumidos en otra familia de la iglesia y se convertirán en un sitio de la iglesia adoptiva. Otros serán fomentados, lo que significa que una iglesia más saludable ayudará a aquellas iglesias que luchan por una temporada corta. Hablaré de estos dos movimientos la próxima semana.

Si bien se ha convertido en un cliché decir que estamos viviendo tiempos sin precedentes, estamos viviendo tiempos sin precedentes. Aquellas organizaciones que vean esta nueva realidad como una oportunidad verán posibilidades ilimitadas. Esta perspectiva es especialmente cierta para las organizaciones que llamamos iglesias.

Es un momento desafiante. Es un momento emocionante.

Los próximos doce meses serán increíblemente reveladores para el futuro de las iglesias locales en todo el mundo.

Déjame saber lo que piensas.

Para leer más, consulte “Cinco tipos de miembros de iglesia que no regresarán después de la cuarentena.”

Este artículo apareció originalmente aquí.