La edad se refiere a un comienzo. Pero Dios no tiene principio ni fin. Salmo 106:48 (NASB), «Bendito sea el SEÑOR, Dios de Israel, desde el siglo hasta el siglo». Salmo 90:2, “Antes que nacieran los montes, Y formaste la tierra y el mundo, Y desde el siglo hasta el siglo, Tú eres Dios”

Dios creó la dimensión del tiempo para sus hijos. Sin embargo, Dios no está sujeto al tiempo; Él es eterno. Isaías 57:15, “Porque así dice el Alto y Sublime Que habita en la eternidad, cuyo nombre es Santo””

No hay nadie como Dios. Dios está más allá de nuestro entendimiento. Sin embargo, Él nos creó con una mente, y se complace cuando le hacemos preguntas sobre Él y sobre Su plan. Incluso nos invita a razonar con Él. “Venid, razonemos juntos, dice Jehová,” Isaías 1:18. 

Sin embargo, incluso después de miles de millones de años, nunca comprenderemos completamente la gloria y la maravilla de Dios. Dios mismo dice, “…yo soy Dios, y no hay otro; Yo soy Dios, y no hay nadie como Yo…” Isaías 46:9.