Suraj Kasula, a quien llamamos el plantador de iglesias más improbable de Nepal, nos envió esta actualización sobre el devastador terremoto de magnitud 7,9 que azotó su tierra natal este fin de semana y las fuertes lluvias monzónicas e inundaciones a su paso. Esto es lo que escribe Suraj (publicado con autorización).
El sábado por la tarde fue una hora oscura para la gente de Nepal. El terremoto de 7,9 golpeó fuerte, convirtiendo las casas en polvo en segundos. Los monumentos históricos y algunos templos antiguos fueron arrasados. Las carreteras quedaron gravemente dañadas.
La mayoría de las casas en Nepal tienen más de treinta años, construidas con tierra y ladrillos (y tierra y piedras en las aldeas remotas). Las casas son compactas y están integradas entre sí formando muros continuos a ambos lados de caminos y carreteras, especialmente en las grandes ciudades como Bhaktapur, Katmandú y Lalitpur que constituyen el Valle de Katmandú. El Valle está densamente poblado (2,5 millones de personas, aproximadamente una doceava parte de la población total de Nepal). A pesar de que el epicentro se encuentra en la parte occidental de Nepal, los peores daños se produjeron en el valle.
El valle está lleno de templos antiguos construidos en los siglos XVI al XVIII, atracciones turísticas protegidas como sitios históricos, pero ahora completamente destruidas o gravemente dañadas.
Se informa que en En algunas partes remotas de Nepal, el terremoto provocó deslizamientos de tierra que arrasaron con todo un pueblo. También provocó una avalancha en el Monte Everest, que mató al menos a 17 montañeros e hirió gravemente a 61 escaladores. El terremoto ocurrió en medio de los servicios de la iglesia (los servicios son los sábados), matando a 35 cristianos conocidos. Pero los edificios de las iglesias en Nepal son modernos y pequeños, lo que evitó daños mayores.
Mis padres están a salvo, pero perdimos algunos amigos. Nuestra casa en Bhaktapur se derrumbó. El edificio de nuestra iglesia está ligeramente agrietado. La tasa de mortalidad aumenta hora tras hora. Se estima que entre 8.000 y 10.000 personas han muerto a causa de esta atrocidad.
La fuerza del terremoto significó que la gente tenía una pequeña posibilidad de salir corriendo de sus casas. Aquellos que lograron salir corriendo no pudieron encontrar espacios abiertos de inmediato. Las personas atrapadas dentro de las casas murieron por el derrumbe de las estructuras, y los que lograron salir corriendo de sus casas murieron por la caída de los techos. La destrucción de frágiles casas de ladrillo fue una de las principales razones por las que el número de muertos se está disparando.
Además, en lugares densamente poblados como Bhaktapur, el terremoto se produjo cuando la gente celebraba el festival bajo techo de Dugu Puja. Familiares de toda la región se reunían en casas para observar esta fiesta, y la mayoría de ellos habrían estado borrachos. Los celebrantes que murieron, que habrían incluido muchos niños, murieron en medio de la fiesta.
Y todavía se sienten muchos temblores, sesenta a ochenta temblores se han experimentado en estos tres días; algunos tan fuertes como 6,5 en la escala de Richter. Las casas que sufrieron daños leves por el primer golpe se derrumbaron en estas réplicas. Nadie se atreve a volver a entrar en las casas en pie debido al temor constante de más terremotos. La gente duerme afuera en tiendas de campaña. Y lo loco es que está lloviendo, ¡el monzón está cerca!
El terremoto golpeó a todo el país y la tragedia nacional se ve agravada por la falta de alimentos, agua y refugio. Las vidas de las personas están en riesgo ahora simplemente por la falta de necesidades. El gobierno no puede suplir las necesidades.
Tenemos un edificio de iglesia pequeño, y debido a que es pequeño hay menos riesgo de un colapso total. Abrimos la iglesia para los que necesitan refugio, y vienen muchos. Una mujer y su bebé recién nacido se refugian en uno de los salones de la Escuela Dominical. Pero los de la iglesia también necesitan comida y agua. La electricidad se ha detenido y eso significa que el agua se ha detenido.
La mayoría de las personas afectadas por esta tragedia en Nepal son hindúes. Culpan a sus dioses cada vez que ocurre un desastre, y volverán a hacer lo mismo. Los dioses hindúes no se ven afectados por el sufrimiento. Jesús, en cambio, se acerca y se compadece de los que lloran, porque conoce el sufrimiento humano y las lágrimas humanas. Y tan difícil como es de imaginar en este momento, el sufrimiento que Jesucristo soportó en la cruz para pagar la ira de Dios en nombre de los pecadores supera el dolor de toda la nación de Nepal en este momento.
Visto a través del prisma de la cruz, Cristo es exactamente lo que mi nación necesita ahora. Tendemos a pensar que el evangelio sería ineficaz o inapropiado para predicar mientras la gente sufre tan profundamente. Pero es al revés. El evangelio es el mensaje de un Salvador quebrantado que es relevante para alcanzar vidas quebrantadas en este momento. Él es el único verdadero consuelo que mi país puede tener en este sufrimiento.
Entonces, si considera enviar apoyo financiero inmediato y las necesidades físicas son grandes, únase a mí para orar para que esta oscura tragedia abra nuevas puertas de ministerio y cree nuevos caminos para que la esperanza de Jesucristo brille aún más en la nación de Nepal, trayendo consigo el mensaje de esperanza, consuelo y restauración.
Se necesitan desesperadamente donaciones para ayuda en Nepal. Un canal confiable es la Junta de Misiones Internacionales.
Suraj Kasula es nativo de Bhaktapur y estudia teología en el Seminario Teológico de Edimburgo en Escocia. Lea su historia aquí.