¿Qué opinas de esta paráfrasis de 2 Corintios 5:16: “De aquí en adelante no conocemos a nadie ni a nada según la carne. Aunque una vez conocimos la Navidad según la carne, ¿ya no la conocemos así? Noël me dijo la semana pasada que fue a una tienda a buscar algunos adornos navideños, pero que en seis pasillos largos solo había un par de artículos pequeños relacionados con Cristo. Todo lo demás era «Navidad según la carne». ¿Cómo deben responder los cristianos a la profanación de la Navidad?

La respuesta que Noël y yo nos damos a nosotros mismos es que queremos que la mayor parte de nuestra decoración y festividades sean explícitamente centradas en Cristo y que exalten a Cristo. Hay adornos navideños que exaltan explícitamente a Cristo; hay decoraciones que son neutras y pueden volverse seculares o cristianas por su contexto; y hay símbolos anticristianos que funcionan para desviar la atención de Cristo y dar a la Navidad un significado secular aceptable para nuestra cultura.

En la última categoría ponemos a Santa Claus. El Papá Noel americano está muy lejos del viejo San Nicolás alemán que llegó el 6 de diciembre. El desarrollo del mito de Papá Noel en nuestra cultura es precisamente un sustituto y un desvío de la ofensiva realidad cristiana: “Jesucristo vino al mundo para salvar a los pecadores”. Por lo tanto, Noël y yo nunca hemos hecho de Santa Claus parte de nuestra celebración y hemos enseñado a nuestros hijos por qué pensamos que este anciano alegre es una tragedia en nuestra tierra.

En la segunda categoría de decoraciones neutras ponemos el árbol de Navidad, las velas, el acebo, las coronas, las campanas, las castañas, la nieve, las luces de colores, etc., etc. Todos estos pueden realzar maravillosamente nuestra celebración si reciben un contexto cristocéntrico. El rumor de que el pastor se opone a los árboles de Navidad es en su mayoría falso (como la mayoría de los rumores, ¡gracias a Dios!). Su verdadera opinión es que en el santuario de la iglesia deberíamos, si es que hay algún lugar, estar tan explícitamente centrados en Cristo y exaltando a Cristo como sea posible. El árbol de Navidad en nuestra cultura no tiene ese significado y por lo tanto no es tan útil para dirigirnos a Cristo como algunas otras cosas. Pero el pastor de ninguna manera se opone a sus esfuerzos creativos para santificar la creación de Dios y hacer de su árbol un faro para la gloria de Cristo; tanto en casa como en la iglesia.

Pero sobre todo superemos al mundo en alegría y celebración llenando nuestros hogares e iglesias con tantos símbolos explícitamente centrados en Cristo como sea posible. Decoremos de tal manera que los invitados y los transeúntes digan: «¡Estas personas realmente deben creer que el viejo mito es cierto!» ¡La Navidad es primero Cristo, segundo Cristo, tercer Cristo y una y otra vez Cristo! Estos son algunos de los pequeños esfuerzos que hemos hecho para mantener a Jesús en el centro de todo. (Noël escribió el resto.)

1. Utilizamos velas de Adviento. Puede haber cuatro o cinco velas. Encendemos una el cuarto domingo antes de Navidad, dos el domingo siguiente, etc. La quinta vela se enciende en Navidad, el día que celebramos. Al encender cada vela leemos profecías sobre la venida del Mesías. Otra forma de marcar nuestra anticipación es agregar piezas una por una a nuestro árbol de Jesé.
2. Ponemos pesebres grandes y pequeños en todas partes; en la parte superior de los tocadores, con las velas de Adviento, colgadas en las ventanas, convertidas en móviles, etc.
3. El centro de la celebración es un pesebre especial en la sala de estar. Debajo de esa mesa juntamos nuestros regalos. Al lado tenemos nuestra fiesta de Nochebuena — palomitas de maíz y chocolate caliente, la historia de Navidad y oraciones de acción de gracias a Dios por su amor y liberación.
4. Los niños ganan centavos por cualquier trabajo durante diciembre. Los guardan como regalo de cumpleaños para Jesús (quizás para World Relief este año).
5. Una nueva tradición en nuestra celebración es la bolsa del pastor. En Nochebuena los niños pusieron sus regalos a Jesús en bolsitas al lado del pesebre, mientras los pastores traían regalos de adoración y alegría al bebé. En la mañana de Navidad, los regalos de Jesús han sido reemplazados por pequeños obsequios divertidos para los niños: simbolizando los dones que Dios derrama sobre nosotros.
6. Los transeúntes solo ven el exterior de nuestra casa. ¿Sabrán a quién celebramos por lo que ven? En la ventana hay una escena de la natividad con vidrieras, una pequeña escena cuelga en los jardines junto a la puerta y una estrella iluminada cuelga cerca del techo. Me gustaría hacer una pancarta para colgar en el porche.

¡Podría pensar en la Navidad todo el día! Si quiere pensar más al respecto, preparé un paquete de páginas de recursos que se encuentra fuera de la oficina de la iglesia. Hay más ideas para una Navidad centrada en Cristo, una bibliografía de ideas y libros para niños, y una lista de símbolos navideños.

Que tu tiempo de Adviento esté lleno de dulce anticipación y bendita esperanza.